Las excusas de Britney Spears para justificar sus infracciones de tráfico: 'Necesito ir al baño'
En el transcurso de un mes y medio, la cantante Britney Spears ha vivido dos encontronazos con la justicia a raíz de su particular forma de conducir. El pasado 10 de septiembre, la princesa del pop fue amonestada por exceso de velocidad y, menos de un mes más tarde, el 5 de octubre, recibió otra multa por traspasar una doble línea continua en las inmediaciones de Thousand Oaks, muy cerca de su casa californiana. Ahora se han hecho públicas las grabaciones de las cámaras de seguridad que captaron su conversación con los agentes de policía que la detuvieron en ambas ocasiones.
Esos vídeos retratan a una Britney muy nerviosa por las circunstancias, pero queda claro que no le falla la inventiva a la hora de justificar sus infracciones. Con respecto al cambio de carril, la artista explica al agente, mientras éste redacta la multa, que necesitaba "ir al baño" urgentemente y que su vivienda se encontraba a escasos metros. "Lo siento mucho... Pero es que está a punto de salir. Mi casa está ahí al lado. Lo siento", le dirige visiblemente incómoda.
Asimismo, la intérprete no pudo cumplir con otro requisito básico, el de tener a mano el permiso de conducir y el registro de su vehículo: un lujoso Mercedes de color blanco. En ese sentido, Britney solo pudo argumentar que no llevaba esos documentos encima, ya que acaba de regresar de un viaje y esos papeles estaban en manos de su equipo de seguridad.
Esas excusas no conmovieron en ningún momento a su interlocutor, quien le extiende la notificación de la multa casi sin inmutarse. Puede que el policía fuera conocedor del nutrido historial de infracciones de tráfico que acumula Britney Spears desde noviembre de 2021, cuando finalmente se liberó de la tutela judicial que pesaba sobre ella desde hacía 13 años. Sin ir más lejos, cuando fue interceptada solo unas semanas antes, el citado 10 de septiembre, la artista conducía a 61 millas por hora en una vía limitada a 40, y tampoco tenía consigo su permiso de conducir, el registro del coche ni la documentación del seguro.
También hay material gráfico de ese momento. "Lo siento, lo siento mucho. Por favor, perdóname", le dice Britney al agente de ese día para demostrar que era muy consciente de la magnitud de su transgresión. Pero sus sentidas palabras de arrepentimiento no surtieron efecto esa vez. Y es que el policía ya había tenido ocasión de tratar con ella a raíz de un incidente de la misma naturaleza, ocurrido en marzo de 2022. "La última vez te dejé marchar", le recuerda el oficial según el material gráfico de su cámara personal. En consecuencia, Britney Spears fue sancionada con una multa de 1.140 dólares, que ya habría abonado.