El exmarido de Mel B, Stephen Belafonte, demanda a la artista por difamación tras ser acusado de malos tratos

Mel B y Stephen Belafonte en una imagen de 2010 credit:Bang Showbiz
Mel B y Stephen Belafonte en una imagen de 2010 credit:Bang Showbiz

El productor Stephen Belafonte ha decidido llevar a su antigua esposa, la cantante Mel B, a los tribunales, interponiendo una demanda contra ella por difamación. En concreto, el exmarido de la Spice Girl busca una indemnización de cinco millones de dólares en concepto de daños y perjuicios, ya que considera que la artista lleva desplegando, desde hace años, una campaña de desprestigio contra él al presentarse ante el mundo como una víctima de violencia doméstica, lo que él siempre ha negado.

La pareja estuvo casada entre los años 2007 y 2017, y tienen una hija en común, Madison, de doce años. Una vez separados, la intérprete británica acusó públicamente a Belafonte de haberla maltratado física y psicológicamente durante la recta final de su matrimonio. Finalmente, ambos llegaron a un acuerdo para disolver su unión, que para Mel B implicaba retirar formalmente tales acusaciones.

En el escrito presentado ante el juez, el empresario estadounidense asegura que las declaraciones de la cantante, pese a que se desdijo de ellas en sede judicial, han arruinado irremediablemente su reputación. "Sin embargo, el daño ya está hecho. Como resultado de las falsas acusaciones de violación, posesión ilegal de armas, tráfico sexual, producción de pornografía ilegal, maltrato y peligro para una menor, el señor Belafonte perdió el acceso a su casa y a sus hijos", reza un fragmento del documento obtenido por Page Six.

Belafonte esgrime la presunta adicción de Mel B a diversas sustancias como el detonante de su separación, en concreto a la "cocaína, alcohol y medicamentos prescritos". También recuerda que es él quien tiene la custodia física de Madison, a la que la cantante sólo habría visitado "una vez" en los últimos cuatro años a pesar de que la vocalista viaja regularmente a Estados Unidos por trabajo.

En los dos últimos años, Mel B ha redoblado sus ataques a Belafonte en diversas entrevistas ligadas a la promoción de sus proyectos profesionales o benéficos, reafirmándose en su testimonio de que había vivido completamente sometida a su exmarido. Para el productor, ese supuesto victimismo sólo tiene como objetivo impulsar la carrera de la artista. De hecho, ha hecho públicos unos mensajes de texto entre Mel B y su compañera de banda Geri Halliwell, en los que la primera rechaza una propuesta de su amiga para organizar un concierto solidario aprovechando el "poder" de la marca Spice Girls. "La caridad no paga facturas", habría respondido Mel B.