Yahoo Estilo Falso guacamole con calabacitas, la receta secreta sin aguacate de las taquerías en CDMX
¿Con antojo de guacamole para acompañar tus antojitos mexicanos, pero el aguacate está en su versión “lujo”? ¡No te preocupes! Te tenemos el secreto mejor guardado de las taquerías chilangas: el “falso guacamole”. Sí, esa salsa de color verde que disfrutas en tus tacos y que, sorprendentemente, no lleva ni una pisca de aguacate real.
Este es un recurso muy común de los restaurantes y taquerías mexicanas para remplazar el aguacate, ya que este tipo de salsa ofrece el sabor y la textura del aguacate a un menor precio y sin que nadie lo note.
El secreto mejor guardado de los taqueros chilangos: el falso guacamole que parece, pero no lo es
¡Si no nos dicen, no nos damos cuenta! El falso guacamole es el secreto mejor guardado de los taqueros.
¿Cómo lo hacen? El secreto es utilizar calabacitas en lugar de este bien llamado “oro verde” y hacerla es más sencillo de lo que parece. No solo es más económico, sino que también es amigable con el medio ambiente, ya que la producción de aguacates puede ser bastante costosa en términos de recursos hídricos.
El “falso guacamole” no se oxida y es una excelente opción cuando el aguacate está fuera de tu presupuesto o quieres reducir tu huella de carbono. ¡Así que anímate a probarlo! Aquí te contamos cómo preparar esta deliciosa salsa sin aguacate y seguir disfrutando de ese sabor tradicional mexicano.
Cómo hacer “falso guacamole” con calabacitas
Hacer este falso guacamole es muy sencillo: sólo necesitarás calabacitas, que son muy económicas y saludables.
Ingredientes:
2 calabacitas, cortadas en trozos medianos
4 tomates verdes, sin cáscara
4 cucharadas de aceite vegetal (para freír el chile)
2 chiles serranos
1/4 de cebolla
1 diente de ajo
1 taza de hojas de cilantro
Sal de grano
Procedimiento:
Cocinamos las calabazas y los tomates verdes en una cacerola con agua muy caliente durante aproximadamente 5 minutos o hasta que los vegetales estén lo suficientemente blandos. Luego, escurrimos y enfriamos bajo un chorro de agua fría. Reservamos.
En un sartén con aceite vegetal muy caliente, freímos los chiles serranos a fuego medio-bajo hasta que la piel comience a dorarse. Asegúrate de moverlos constantemente para obtener un dorado uniforme. Reservamos también.
Luego, procedemos a licuar las calabazas y los tomates verdes cocidos junto con el 1/4 de cebolla, el diente de ajo y los chiles serranos que acabamos de freír, incluyendo su aceite. Agregamos también el cilantro y la sal de grano. Licuamos hasta obtener una mezcla completamente integrada. La consistencia que debe adquirir es semi-espesa, pero si lo deseas, puedes agregar un poco más de aceite.
Sirve esta deliciosa salsa y acompaña tus tacos favoritos.
¡Te aseguramos que nadie notará la diferencia, ni que no lleva aguacate!
¡Disfruta tu fiesta mexicana y no dejes de pasarla de maravilla! No olvides suscribirte a nuestro canal de YouTube. Cada semana tenemos una receta nueva para ti.
