Familia Fernández pierde demanda contra Televisa por bioserie “El Último Rey. El hijo del pueblo”
La relación entre la familia del fallecido Vicente Fernández y la empresa Televisa-Univision no ha sido la mejor desde que se dio a conocer la producción de la serie del cantante, basada en un libro biográfico no autorizado que lleva por nombre “El Último Rey”.
La viuda actuó legalmente en contra de las televisoras responsables del proyecto para evitar que saliera al aire, lo cual no se logró. Sin embargo, la cuestión legal no se detuvo ahí, por lo que ahora la revista TVNotas reveló que los abogados de la familia Fernández no lograron que el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) aplicara la infracción solicitada por la transmisión del proyecto, porque presuntamente no presentaron la documentación completa que la acredita como heredera universal.
“(No obtuvieron buena resolución) porque no presentaron completos los documentos ante el IMPI. Quizá haya algo que la familia no quiere que ellos sepan”, dijo la fuente allegada a los parientes del cantante a la publicación antes mencionada.
Según la persona, para llevar a cabo este proceso, el IMPI solicitó la escritura pública, el título y oficio de renovación del registro de la marca de “El Charro de Huentitán”, pero no lo entregaron.
"(Los documentos) pueden ser firmas, la carátula, el registro, nada importante, pero si faltan hojas, es por algo. Al no cumplir, no se le dio trámite y por eso Televisa pudo pasar la serie, se desechó la infracción solicitada”, detalló el informante.
Con respecto al motivo que impidió la entrega de estos documentos, la fuente especuló que probablemente doña Cuquita no es la heredera universal de Vicente Fernández y no es dueña de la marca del famoso. “O de plano hay cosas muy gruesas que aparecen en la escritura y prefirieron perder que darle más armas a Televisa para que les saquen más cosas y acabar de balconear temas de la familia”, recalcó.
De la misma manera, la persona allegada a los Fernández reveló que existen rumores sobre que las marcas pudieron quedar a nombre de Gerardo Fernández, lo cual mencionó Olga Wornat, autora del libro en el cual se basó la serie de Televisa, además de mencionar que en los documentos faltantes podría haber posibles adeudos de impuestos y aparición de hijos no reconocidos.