Federico de Dinamarca enfrenta burlas y nuevas críticas
CIUDAD DE MÉXICO, agosto 28 (EL UNIVERSAL).- Dentro de poco se cumplirá un año del escándalo protagonizado por Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova, quienes se convirtieron en el centro de atención luego de ser captados en una actitud cómplice durante una visita del entonces Príncipe a Madrid, ciudad donde radica la socialité mexicana.
Aunque ambas partes intentaron frenar por distintos medios cualquier especulación que insinuara algo más que una amistad entre ellos, ciertamente no fue una época sencilla para ninguno. Incluso cuando la reina Margarita II decidió abdicar para que su hijo ascendiera al trono, la coronación de Federico de Dinamarca también estuvo rodeada de incertidumbre mediática.
Ahora, casi nueve meses después de dicho escándalo, el rey Federico X otra vez enfrenta severas críticas por parte de la prensa danesa, quienes se han atrevido a señalar al monarca como un "hipócrita" debido a una nueva investigación que pone en evidencia que el esposo de Mary de Dinamarca "no vive según lo que predica".
El nuevo escándalo del rey Federico de Dinamarca fue originado por un informe compartido en "Se og Hor", una revista danesa que se encargó de revelar las altas emisiones de CO2 que genera el monarca con su yate Dannebrog, algo que contrasta con su preocupación por el medio ambiente.
"Cuando da discursos pone la cara adecuada y habla de la importancia de cuidar el clima, pero cuando el rey Federico baja del podio hay un largo camino entre las palabras y los hechos, él no vive según los principios que predica", señala dicha publicación.
De acuerdo con su informe, el yate real Dannebrog ha emitido alrededor de 3.579 toneladas de CO2 en los últimos cuatro años. Recordemos que en dicha embarcación la familia real danesa disfruta de vacaciones y viajes de Estado. "Además de su flota de coches, sus numerosos vuelos en aviones privados y la calefacción de los castillos, el barco real es uno de los mayores culpables de la contabilidad climática".
Sumado a lo anterior, la revista "Se og Hor" asegura que el yate representa un alto costo para todos los contribuyentes de Dinamarca; "Los contribuyentes somos responsables de todo el funcionamiento, mantenimiento y gastos de los numerosos litros de combustible. En los últimos cuatro años, sólo el coste del combustible ha ascendido a casi un millón de euros".
Finalmente, por si ser considerado un "hipócrita" por la prensa danesa no fuera suficiente motivo de alarma para Federico de Dinamarca, de 56 años, en las últimas semanas también se ha puesto en evidencia que su elección de estilo no es la mejor, lo que le ha valido algunas críticas y burlas en sus redes sociales.