Ferdinand Marcos acusa a Rodrigo Duterte de estar bajo los efectos del fentanilo

Bangkok, 29 ene (EFE).- El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., acusó este lunes a su antecesor, Rodrigo Duterte, de estar bajo los efectos del opiáceo fentanilo, después de que este le culpara de consumir cocaína.

El cruce de acusaciones se produce en un momento de tensión entre Marcos y la vicepresidenta, Sara Duterte-Carpio, hija de Rodrigo Duterte, debido a las diferencias en torno a diversas políticas del presidente como el diálogo con la guerrilla comunista.

Antes de partir de viaje a Vietnam, Marcos reaccionó a un discurso el domingo de Duterte, que le acusó de buscar enmendar la Constitución para poder presentarse a un segundo mandato, algo prohibido actualmente, y de consumir cocaína.

"Creo que es el fentanilo", dijo el presidente filipino a los medios, según un vídeo compartido por el canal ABS-CBN en X, al tiempo que precisó que la acusación sobre drogas de su antecesor no merece una respuesta.

En 2016, Duterte admitió que se había medicado con fentanilo, un opiáceo muy adictivo usado para combatir el dolor, tras un accidente en motocicleta.

"Ha tomado la droga (fentanilo) durante mucho tiempo (...). Espero que sus médicos lo traten de mejor manera", dijo Marcos.

El domingo, Duterte afirmó ante miles de asistentes que Marcos es un adicto a la cocaína en un mítin en Davao, una ciudad en el sur del país, en la que su hijo Sebastian, el actual alcalde de la ciudad, acusó al presidente de "vago" y de gobernar contra los intereses del país, por lo que pidió su dimisión.

La vicepresidenta, que la víspera asistió a un acto con Marcos en Manila, evitó hoy la polémica en un comunicado en el que dijo que seguirá trabajando en favor de Filipinas.

La también ministra de Deportes indicó que las críticas de su hermano contra el presidente se deben al "amor fraternal" por defenderla de las críticas de personas del círculo del presidente.

Marcos Jr. y Duterte-Carpio concurrieron juntos en las elecciones de 2022 en una alianza gestada a espaldas de Rodrigo Duterte, que pasó de aliado de los Marcos a un crítico acérrimo del actual presidente.

Tras llegar al poder, el actual presidente dio un giro a la política internacional de su país al llevar a cabo un acercamiento a Washington en detrimento de China, país con el que Duterte estrechó lazos durante su mandato (2016-2022).

La vicepresidenta se ha opuesto a algunas de las políticas de Marcos como el diálogo con la guerrilla comunista Nuevo Ejército del Pueblo, lo que ha calificado de "pacto con el demonio".

Duterte padre lanzó una polémica guerra contra la droga durante su mandato en la que murieron miles de personas y que actualmente está siendo investigada por la Corte Penal Internacional por posibles crímenes contra la humanidad.

A consecuencia de esta investigación Filipinas decidió en 2019 retirarse de la corte con sede en la Haya, un paso criticado por las organizaciones de derechos humanos.

(c) Agencia EFE