Fernando Verdasco revela el grave problema de salud que ha vivido su madre

Fernando Verdasco credit:Bang Showbiz
Fernando Verdasco credit:Bang Showbiz

El tenista Fernando Verdasco se ha desahogado con sus seguidores sobre la angustia y la preocupación que ha estado viviendo su familia en el más absoluto secreto. Su madre, Olga Carmona, tuvo que ser intervenida quirúrgicamente hace un mes debido a una grave enfermedad de la que el deportista ha preferido no dar detalles. Afortunadamente, la operación fue exitosa y, aprovechando el cumpleaños de su progenitora, Verdasco ha querido rendirle homenaje en sus redes al tiempo que le deseaba "un año lleno de salud".

"¡Feliz cumpleaños a la mejor madre que uno pueda desear!", ha escrito en Instagram el marido de Ana Boyer, con quien tiene a los pequeños Miguel y Mateo, de cuatro y dos años, respectivamente. Verdasco no ha querido ocultar lo "asustados" que estaban todos los seres queridos de Olga, de 63 años, por lo que ahora les toca "dar gracias a Dios" en medio de un proceso de recuperación que va más rápido de lo inicialmente previsto.

El madrileño, que cumplirá cuarenta años el próximo 15 de noviembre, ha finalizado su mensaje con una emotiva posdata. "Gracias por formar una familia tan increíble", ha añadido en referencia a sus hermanas Sara (36) y Ana (25), así como a su padre José. Pese a ser muy reservado en lo relativo a su vida personal, Fernando Verdasco siempre ha presumido en sus redes de la importancia capital que otorga a su familia.

Hace ya siete años, el clan Verdasco se mostró como una auténtica piña en la boda de Sara y Juan Carmona, sobrino del vocalista de Ketama, Antonio Carmona. La misma felicidad les invadió a todos cuatro años más tarde, cuando la pareja dio la bienvenida a sus dos mellizas, Carmen y Valentina. Uno de los momentos más emotivos que protagonizó Fernando con Sara fue precisamente en ese inolvidable año 2020, cuando se reencontraron y se fundieron en un cálido abrazo tras varios meses separados con motivo del coronavirus.

En 2017, Sara sufrió un aparatoso accidente en la ciudad de Miami, al ser atropellada mientras circulaba en bicicleta por la acera. Las numerosas fracturas que padeció, unidas al impacto psicológico por lo sucedido, la hicieron temer por la posibilidad de que no pudiera tener hijos. En esos tiempos tan difíciles, Sara se refugiaba precisamente en el amor y el apoyo de los suyos. "Me he aferrado a que soy muy creyente y a mi familia. Mi familia me ha ayudado muchísimo. También tengo ayuda psicológica. Tengo un trauma de todo lo que he sufrido. Con la ayuda de Dios y de mi familia, ahí sigo", contaba al diario El Mundo.