Festival de Cannes: tras la ovación para George Lucas, la Palma de Oro fue para un gran director independiente de Estados Unidos
Ni David Cronenberg, ni Francis Ford Coppola, ni Paul Schrader, ni Paolo Sorrentino. Ninguno de los nombres más conocidos de la competencia oficial del Festival de Cannes pudo llegar en 2024 a la Palma de Oro. Tampoco la película sobre los comienzos de Donald Trump, The Apprentice. Este año, el premio mayor (y el más importante de todo el calendario cinematográfico anual en muestras de este tipo) fue para el estadounidense Sean Baker, que con Anora alcanza la consagración definitiva después de desarrollar sobre todo en la última década una admirable y muy elogiada carrera en el cine independiente de su país.
El triunfo de Baker cerró este sábado la edición número 77 del Festival de Cannes, cuya jornada de clausura tuvo su momento de mayor emoción cuando George Lucas, el legendario creador de la saga de La guerra de las galaxias, recibió el premio a la trayectoria (la Palma de Oro de honor) de manos de su colega, amigo y casi contemporáneo Coppola.
“Vine aquí hoy para agradecerles a todos. Soy solo un niño que creció en Modesto, California, rodeado de viñedos, y que hizo películas en San Francisco con mi amigo Francis Coppola. Los dos pasamos nuestras carreras en paralelo y de hecho nunca hice una película de Hollywood como director, por lo que es un verdadero honor recibir este premio”, dijo Lucas en medio de una fervorosa ovación de pie entregada por todos los asistentes.
Recuerdos de dos grandes
Coppola, antes de entregar el premio, recordó su primer encuentro con Lucas, que se produjo durante el rodaje de El camino del arco iris (Finian’s Rainbow), en 1968. “Le sugerí en ese momento que viniera todos los días al set pero solo con una condición: tenía que presentar una sugerencia brillante por día, algo que por supuesto hizo constantemente. Así comenzó una asociación que duró toda la vida. George siguió y siguió haciendo historia en el cine, en la propia historia y en la industria. Y ahora también hace historia en Francia”, agregó el director de El padrino, que participó este año de la competencia oficial por la Palma de Oro con su última película, Megalópolis.
El reconocimiento a la carrera de uno de los grandes visionarios del cine de Hollywood en toda su historia se produjo inmediatamente antes del anuncio de la Palma de Oro para Baker. Anora, que había recibido en los días previos las más altas calificaciones y elogios de la crítica especializada, es una comedia romántica que explora la relación entre una trabajadora sexual y el hijo de un potentado ruso en Brooklyn . La película, según se anticipa, es una nueva aproximación a los temas que Baker viene observando en sus aplaudidas películas previas, Red Rocket (2021), Proyecto Florida (2017, disponible en Max) y Tangerine (2015), todas ellas historias sobre personas de clase baja con sueños frustrados y complicaciones personales , en especial alrededor de los temas vinculados con el sexo.
“Había algo que nos recordaba a los clásicos. La película tiene elementos del cine de Lubitsch y de Howard Hawks. Sean Baker hizo algo inesperado. Nos invitó a emprender un viaje. Cada actuación nos encantó, pudimos sentir las caras de los personajes”, dijo la actriz y directora estadounidense Greta Gerwig (Barbie), presidenta del jurado oficial de este año. Es la primera vez desde 2012 que una película estadounidense gana la Palma de Oro. La última triunfadora de ese origen fue El árbol de la vida, de Terrence Malick.
Otra gran ganadora de Cannes 2024 fue Emilia Perez, de Jacques Audiard, que se llevó el Gran Premio del Jurado y el premio a la mejor actuación femenina, compartido por su cuarteto de actrices protagónicas: Karla Sofia Gascón, Selena Gomez, Zoe Saldaña y Adriana Paz. La película es un atípico musical ambientado en México en el que un narcotraficante decide cambiar de sexo con la ayuda de una abogada mientras a su alrededor se suceden femicidios y episodios de violencia de género. La española Gascón es la primera actriz trans en recibir un premio a lo largo de toda la historia de Cannes y fue la única de las cuatro ganadoras presente en la ceremonia de clausura realizada este sábado. Emilia Pérez fue adquirida por Netflix y por ahora tiene su estreno confirmado a través de esa plataforma en Estados Unidos y en Europa. Todavía no está confirmado si llegará a América latina por esa misma vía.
Tampoco se hizo presente para recibir el premio a la mejor actuación masculina el actor estadounidense Jesse Plemons por su participación en Tipos de gentileza (Kinds of Kindness), de Yorgos Lanthimos, el mismo director de Pobres criaturas. Plemons interpreta en esta película, dividida en episodios, a tres personajes diferentes. Protagonizada también por Emma Stone y Willem Dafoe, Tipos de gentileza ya tiene su estreno confirmado en los cines argentinos para el 22 de agosto.
El Grand Prix, segundo en importancia entre los premios de Cannes, fue para All We Imagine at Light (Todo lo que imaginamos en la luz), de Payal Kapadia, la primera película india presentada en la competencia oficial de los últimos 30 años, protagonizada por tres mujeres de distintas edades y experiencias de vida que comparten sentimientos y emociones en medio de la agitada vida de una megaurbe como Bombay. Al aceptar el premio, Kapadia se solidarizó con los trabajadores del festival que vienen reclamando una serie de reivindicaciones laborales (sobre todo relacionados con la inestabilidad de sus empleos temporarios) y amenazaron en los días previos con medidas de fuerza que finalmente no se concretaron.
El Premio Especial del Jurado fue adjudicado a la película iraní The Seed of a Sacred Fig (La semilla del higo sagrado), del director disidente Mohammad Rasoulof, que llegó a Cannes el viernes pasado para acompañar la presentación del film después de escapar pocos días antes de su país. Rasoulof había sido condenado a ocho años de cárcel, la confiscación de los bienes y una cantidad no especificada de latigazos por sus críticas a las políticas del régimen teocrático que gobierna Irán. Cuando estaba por hacerse efectiva esa sentencia, el director pudo salir clandestinamente y emprender un complicado viaje de casi un mes que culminó en un lugar no especificado de Europa (al parecer en Alemania) donde reside en la actualidad.
El portugués Miguel Gomes ganó el premio al mejor director de Cannes 2024 por Grand Tour, suerte de cruce entre el documental y la ficción sobre la misteriosa travesía de un hombre por caminos y ciudades del sudeste asiático en 1918. La francesa Coralie Fargeat recibió el premio al mejor guión por The Substance, una de las películas más comentadas y discutidas de Cannes 2024, relato de terror con imágenes muy explícitas de cuerpos deformados o infectados que fue recibida además como una gran reivindicación de la carrera de Demi Moore, que a los 61 años recupera un lugar protagónico en el cine y además se anima aquí al desnudo integral en varias escenas.
Finalmente, el premio Camera d’Or, al que aspiran cada año los directores debutantes de todas las secciones del festival, fue otorgado al noruego Halfdan Ullmann Tøndel, nieto de Liv Ullmann e Ingmar Bergman, por la película Armand, originaria de ese país. Uno de los candidatos a ese premio era el argentino Federico Luis, que obtuvo este año un importante reconocimiento para el cine de nuestro país al ganar el Grand Prix de la Semana de la Crítica, principal distinción de una de las secciones paralelas más importantes del Festival de Cannes.