De los cambios de look de Dolores Fonzi al paso de Leonardo Sbaraglia, Luis Brandoni y Belén Chavanne por San Sebastián
El pasado viernes, arrancó la 71a. edición del Festival de cine de San Sebastián y hasta fin de mes varias estrellas de la industria desfilarán por la alfombra roja presentando sus producciones, que según los organizadores del evento, este año ascenderán a 232.
A pesar de la huelga de guionistas y actores de Hollywood (que se hizo notar del otro lado del océano también), ya están confirmadas las visitas de Juliette Binoche, Gabriel Byrne, Jessica Chastain, Sandrine Bonnaire y James Norton, entre otros. Del plano local, este fin de semana se pudo ver a Leonardo Sbaraglia, Dolores Fonzi y Toto Rovito, quienes asistieron a una premiere juntos, pero además están presentando Blondi, la ópera prima de la actriz que habla sobre la relación de una madre y su hijo. Y eso no es todo, ya que Sbaraglia también forma parte del elenco de Puan, la película argentina que forma parte de la competencia oficial.
Asimismo hoy se presentó la serie Nada, protagonizada por Luis Brandoni con Robert DeNiro, y creada y dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat, que llegará al mundo del streaming el 11 de octubre y se podrá ver por la pantalla de Star+.
La actriz, que debutó con este film como directora, eligió una camisa blanca con detalles calados y una falda en tonos beige de la diseñadora Jazmín Chebar. Complementó su look con unas sandalias negras con hebilla y accesorios minimalistas. Por su parte, los protagonistas masculinos optaron por tonos más oscuros. Mientras que Sbaraglia se sumó a la tendencia del traje sin camisa, outfit que destacó con unas botas de caña media, Rovito prefirió un atuendo más informal en la gama de los tierra.
En defensa del cine
Los actores no sólo tuvieron la misión de representar el cine nacional sino que aprovecharon este tercera jornada del festival para expresarse en defensa del Instituto Nacional de Cine y Arte Audiovisuales (INCAA). Junto a otros artistas como Santiago Mitre, Esteban Bigliardi, María Alché y Martín Rejtman, los actores posaron en las escaleras del auditorio Kursaal, sede principal del evento, donde desplegaron una bandera con el lema “Cine argentino unido” ante las amenazas de Javier Milei, candidato de La Libertad Avanza, de cerrar el INCAA y otras instituciones estatales de relevancia básica para la vida cultural en caso de ser electo presidente.
El título de la carta es claro: “El cine argentino se une para defender su futuro ante las recientes amenazas” y su contenido también: “Los representantes de las 25 películas y proyectos argentinos presentes en el Festival Internacional de cine de San Sebastián, en su mayoría partícipes de la Asamblea Audiovisual Abierta y nucleados en la consigna Cine Argentino Unido, que representa a todos los sectores de la industria, expresamos nuestra profunda preocupación por los dichos del candidato presidencial de un partido de ultraderecha que amenaza con el cierre del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (además del cierre del Ministerio de la Cultura, del Ministerio de Educación, del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, del Ministerio de Salud, entre otras instituciones estatales). Argentina presenta este año una participación récord en el festival, uno de los más prestigiosos del mundo, gracias al trabajo y talento de nuestros equipos técnicos y artísticos y a la continuidad de una política cinematográfica que fomenta nuestra industria”.
En el texto también se especifica que “la industria cultural audiovisual argentina se destaca como impulsora de la economía, generando trabajo directo e indirecto en una enorme cantidad de servicios asociados, con un crecimiento sostenido del empleo en los últimos 15 años de un 45%. El impacto económico de la industria audiovisual es de un 5.2% del total de la economía argentina, sumando los efectos directos e indirectos sobre otros sectores (...). El camino debe ser mejorar, fortalecer y volver más eficientes las políticas de fomento que acompañen y no desactivar la existencia de una industria pujante y consolidada. Los países que desarrollaron una industria audiovisual lo han hecho gracias a la continuidad de las políticas industriales y culturales”.