Ganó $15 millones en Los 8 escalones, sueña con ser presidente y ya sabe con quiénes compartirá el premio
Santiago Simari es el participante de 19 años oriundo de San Cristóbal que sueña con ser presidente de la Nación, que estudia y trabaja, y que rompió el récord de Los 8 escalones. Ahora se convirtió en “el joven de los 15 millones de pesos” y sin dudas dejó su huella en el programa de Guido Kaczka. De buena oratoria, seguro y siempre con los pies sobre la tierra, el quíntuple campeón habló con LA NACION sobre su deseo de estar en el Poder Ejecutivo, el incalculable apoyo que recibió de su familia y de sus amigos y cómo hizo para ganar el juego tantas veces seguidas.
“El secreto estuvo en ir tranquilo. Me tenía fe, estaba confiado en el primer programa. Intenté, a pesar de todo, tomármelo como un juego, responder de la forma más tranquila posible, con mucha templanza y no ponerme nervioso ni ansioso por contestar porque eso me iba a jugar en contra”, le dijo el campeón a LA NACION y aseguró que para él “la clave” fueron “la paciencia y el timing para responder”.
Simari dejó boquiabierto a más de uno con su impecable juego. Nunca pensó que se quedaba afuera, incluso en los momentos de mayor incertidumbre. Si no sabía una respuesta, intentaba razonarla y darle la vuelta. Además, fue una iniciativa suya anotarse. Cuando podía veía el programa con su familia y se dio cuenta de que tenía mucho conocimiento de “cultura general” y que podía defenderse en todas las áreas.
Lector apasionado de la historia y la política y al tanto de la actualidad, venció sus propios prejuicios, avanzó y ganó los 12 millones de pesos, y batió así el récord del mayor monto entregado en el programa hasta entonces. Pero, como si eso fuera poco, se superó a sí mismo y acumuló 15 millones. Compitió por sexta vez por los $18.000.000, pero esa vez no pudo ser.
Su participación fue un “refresh” para la televisión y sobre todo interpeló a aquellos que tenían sus “reservas con los jóvenes”. “Creo que es positiva la imagen que di en el sentido de que está bueno tener conocimientos, se puede ser canchero e interesante, sabiendo y leyendo. No siempre el canchero es el que es solo ‘vivo o más reo’. A pesar de que tengo 19 años, y leo desde muy chiquito, pude ganar. Competí contra gente que quizás estaba más preparada académica o profesionalmente, pero el tener siempre la vista en esta forma de vida, la que me lleva a leer, a estar interiorizado en los temas, a discutir, fue que me hizo participar y ganar”, reveló.
Radiografía del campeón de Los 8 escalones
Hoy parece muy lejano, pero, en su primera aparición en el ciclo de entretenimientos, Santiago contó que, si ganaba los 3 millones iba a destinar una parte a ayudar a su familia. “Ellos están muy contentos, no paran de llorar”, aseguró. Sus padres, Leandro y Silvina, son empleados gastronómicos. Tienen un bar, Jacques, sobre la calle Defensa, entre Yrigoyen y Alsina, a una cuadra de la casa de Gobierno.
“Cuesta mucho porque la pandemia redujo considerablemente los ingresos de muchos sectores y es una lucha constante más con tantos hijos en su casa. La idea es ayudarlos a ellos principalmente y que mis hermanos también estén mejor”, sostuvo.
Santiago es muy ‘familiero’ y tiene una gran relación con sus hermanos menores, Valentino de 15 años, Catalina 7 y Olivia 2: “Al ser el mayor me siento responsable. Tengo mi trabajo y parte del sueldo va a la caja común de la casa”. Desde hace un año trabaja en la Procuración Penitenciaria, donde hace los relevamientos de las condiciones de encierro de las cárceles en los establecimientos federales. Además de eso, está por empezar su tercer cuatrimestre de la carrera de Ciencia Política en la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Si bien comentó que “está contento”, también aseguró que es complicado balancear el ritmo. “Trabajo todos los días a la mañana hasta las primeras horas de la tarde y después curso a veces desde las 3 hasta las 23 sin parar, porque también soy ayudante de cátedra de una materia, Fundamentos de Ciencia Política”. Aunque reconoció que le gusta estar ocupado, admitió que todo lo que hace, su formación, su constancia y su sacrificio tienen un objetivo final: ser presidente de la Nación.
Santiago, el campeón de Los 8 escalones que sueña con ser presidente de la Nación
La primera vez que Simari apareció en Los 8 escalones, Guido Kaczka reveló que el joven quería ser presidente.“Si tengo las posibilidades y me da la capacidad, me encantaría. Pero, es ambicioso, así que hay que ver”, sostuvo el joven delante de las cámaras. No tiene bien en claro cuándo empezó a gestarse ese sueño, que no quedó en una simple fantasía de niño, sino que se fue retroalimentando a medida que fue creciendo. “Siempre me gustó mucho la historia y me interesa el hecho de ayudar a la gente desde el lugar que sea”, manifestó.
Una de las cosas que más sorprendió en el programa fue cuando dijo, en voz alta y de memoria, los nombres de todos los presidentes argentinos desde 1862 en adelante. Comentó que muchos creen que memorizó una lista y que lo hizo solo para el programa, pero no. “Fui aprendiendo, indagando sobre distintos periodos de la historia y logré tener un mapeo bastante acabado de los primeros mandatarios. Fue de manera natural y en un momento me di cuenta de que sabía todos los apellidos en orden cronológico”.
Una banda de amigos fieles, la mejor cábala que llevó al estudio
Santiago tiene “una banda amiga que le aguanta el corazón”, como diría La Vela Puerca. Cuando ganó por primera y segunda vez lo acompañaron sus amigos, Gero y Santo. Guido Kaczka quedó tan conmovido que les aseguró que le daban ganas de ser parte del grupo. Ellos dos y Pipe, que estaba de viaje, son sus tres mejores amigos, sus “pilares”.
El campeón contó que tras su aparición comenzó a escribirle “todo el mundo” para acompañarlo al programa, desde compañeros de fútbol, hasta de la primaria y la secundaria y también del trabajo. Fue así como, la quinta noche, apareció con “28 amigos y Santo”.
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Es justamente con sus amigos, con quienes planea usar parte del dinero que ganó en el juego. Tienen la idea de reabrir juntos un kiosco que está en la esquina de su escuela primaria, que cerró durante la pandemia. Si bien aún hay que hacer números, “la posibilidad es concreta y está avanzada”. El estudiante aseguró que “confía en el país y en invertir acá a pesar de los riesgos”. Así como una fracción del los 15 millones será para su emprendimiento, otra para que en su casa estén “más holgados”, al resto lo destinará a ahorrar o invertir.
La vida de Santiago cambió considerablemente desde que pasó por la televisión. Lo saludan en la calle, le piden fotos y tiene más seguidores en sus redes, @santisimari. “Me parece una locura, es un sueño que supongo que, cuando termine de caer, lo voy a valorar aún más”, precisó. Pero, la exposición no se le subió a la cabeza. Educado y respetuoso, sigue centrado y enfocado en sus proyectos, en escribir sobre Ciencia Política e Historia y en el fútbol de los fines de semana con sus amigos.
Tiene mucho camino por delante, un conocimiento que le valió 15 millones de pesos, seres queridos que lo acompañan incondicionalmente y la certeza y la convicción de formarse y trabajar para que su sueño se haga realidad.