Guionista de Jessica Jones y Supergirl revela cómo es la explotación laboral de los estudios hacia los escritores
La huelga de guionistas lleva varias semanas activa y ya ha afectado distintas producciones multimillonarias, desde series esperadas como Stranger Things (98%) hasta cintas de gran interés como la secuela de Batman (85%). Las cosas no parecen ir muy bien por ahora, pues las productoras no quieren negociar con ellos, aunque sí lo hicieron sin problema con el gremio de directores y, se espera, también con el de actores. Como los escritores no son el rostro de la industria, es fácil para el público quejarse de su lucha, pero lo cierto es que ellos son la columna del medio y merecen mejores tratos de todo tipo, como bien explica uno de los guionistas de Jessica Jones (69%), quien reveló también la forma en la que se les explota para crear este tipo de proyectos.
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Los actores multimillonarios que se vuelven todavía más ricos por ser populares y taquilleros, así como los directores que hablan en diversas entrevistas sobre sus esfuerzos detrás de cámara suelen ser las figuras con las que el público relaciona las películas. Cuando se observa un fracaso como Black Adam (52%) se dice que Dwayne Johnson falló, y si vemos un éxito como John Wick 4 (93%) se elogia a Keanu Reeves y al director Chad Stahelski, pero no se recuerda quién escribió la secuela o al menos quién creó al famoso personaje en primer lugar.
Mientras estas figuras ganan miles de millones y son premiados por su trabajo, pocas personas se ponen a analizar lo que está detrás de esto, y cómo los guiones y las historias los forman ante el público. En ese sentido, la única vez que se recuerda la labor de los guionistas es cuando las audiencias no están contentas con alguna producción como El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder (90%), y a partir de estas malas experiencias forman toda su opinión y una idea general de que los escritores no tienen nuevas ideas, o que no hacen las cosas bien para hacer funcionar ciertos proyectos.
La huelga de guionistas justamente quiere abordar eso, pues no es que ellos no puedan ofrecer algo nuevo, es que las productoras, con millonarios CEO al frente, quieren sagas que puedan explotar por años sin mucho esfuerzo. Esto lleva a una sobreexplotación bastante común en el medio, donde los guionistas trabajan sin descanso, pues en cuanto queda una primera entrega o temporada ya se está pensando en la que viene. Ellos mismos son los primeros en pedir un cambio para tener mejores grupos de escritores en los que también se de espacio a nuevas voces que están tratando de hacerse de un nombre en Hollywood.
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Con todos los comentarios sobre los programas de Inteligencia Artificial que el gremio de guionistas quiere regular, la atención se ha desviado a este punto y se ignoran otros sobre la explotación laboral que son mucho más importantes e inquietantes, y que deberían interesar al público consumidor y hasta aquellos que sueñan con llegar a Hollywood algún día. Para ejemplificar estos problemas, J. Holtham, guionista de Jessica Jones y Supergirl, reveló varios detalles sobre cómo operan las productoras para exprimir en lo posible a estos trabajadores.
Durante una entrevista con The Popverse, el escritor explicó cómo se les paga poco a los nuevos escritores bajo el concepto de staff writers y su dinero se diluye durante las 20 semanas que deben trabajar en una serie, mientras que a un editor de guion se le paga mejor en menos tiempo:
Los estudios han abusado todavía más de la situación. Ahora, en lugar de una sala de escritores durante 20 semanas, tendrás una mini sala durante 6 u 8 semanas, luego los escritores se van y, si eres el showrunner, podrías estar escribiendo todos los episodios tú mismo, cubriendo el set tú mismo, cubriendo la producción tú mismo, y todo se amortiza. Es un verdadero 'jódete'.
Aunque el guionista estuvo contento de trabajar en Marvel, sabe que detrás de cada serie existe un sistema para explotar a la gente nueva que entra y que añora formar parte de algo así de importante. De igual forma reconoce que los servicios de streaming llaman la atención por su contenido, pero para algunos de ellos eso ni es indispensable en sus negocios:
A dos de las grandes productoras, Apple y Amazon, no les importa. Su negocio de televisión no es su negocio principal, es un complemento, es un líder de pérdida, así que no les importa si hay contenido nuevo o no. Pero Warner Bros. no puede sobrevivir sin él. Netflix ni siquiera puede sobrevivir sin contenido nuevo. Hay mucha presión por todos lados.
El también escritor de The Handmaid's Tale (73%) y Cloak & Dagger (87%) sabe que el sistema está hecho para explotar a la mayor cantidad de creativos posibles por un tiempo, sin reparo en cambiarlos o despedirlos para reducir costos porque la verdadera inversión millonaria siempre estará destinada a las celebridades en turno y al costo de producción para cubrir la filmación.
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