Haakon de Noruega cumple 50 años con un objetivo muy claro y la polémica de su boda enterrada para siempre

Haakon de Noruega cumple este jueves 50 años, motivo por el que ha concecido una entrevista sin precedentes a la agencia de noticias NTB en su residencia familiar, el palacio Skaugum, en Oslo. El hijo mayor de los reyes Harald y Sonia es el heredero al trono espera que sus próximos 50 años de vida sean tan buenos como los primeros. "Soy increíblemente afortunado. Tengo una familia tan agradable, muchas personas a las que amo y que, con suerte, también me aman a mí", ha dicho desde una de las dependencias del hogar que comparte con su esposa, la princesa Mette-Marit, quien, casualmente, cumplirá 50 años el próximo 19 de agosto.

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Haakon de Noruega y la princesa Mette-Marit
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El heredero al trono noruego no cree que su día a día vaya a cambiar por haber cumplido medio siglo de vida. "La gran diferencia vendrá, probablemente, cuando los niños se vayan de casa", ha comentado. Marius Borg Høiby se independizó hace varios años, pero la princesa Ingrid Alexandra, de 19 años, y el príncipe Sverre Magnus, de 17, todavía viven en Skaugum. "Estamos acostumbrados a tener un club juvenil aquí. Esstá lleno de jóvenes, que pasan el rato y ven películas o comen pizza", ha manifestado.

El cambio de década le ha hecho reflexionar sobre su papel como padre y entender mejor a los suyos. "Paso por todas las mismas fases que pasaron mis padres. En lugar de ver las cosas desde la perspectiva de un niño o un joven, de repente ves cómo se sentían mis padres", ha reconocido, abordando con total naturalidad las discusiones que mantiene con sus hijos sobre la hora a la que deben regresar a casa por las noches. "Es un poco divertido encontrarte contigo mismo en la puerta. Hay cosas que tal vez no entendí del todo cuando era niño y adolescente, y luego lo vemos desde la perspectiva de los padres". Pese a ello, considera que lo mejor es tener una buena comunicación entre padres e hijos. "Es bueno hablar de eso juntos. No siempre tienes que tener reglas tan estrictas".

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Haakon de Noruega y su familia
Haakon de Noruega y su familia

Haakon tendrá una celebración de cumpleaños muy familiar. Según ha contado en esta entrevista, desayunará con su mujer y sus hijos, después hornearán un brownie y soplarán las velas mientras recibe algún que otro regalo. Por la noche, organizarán una fiesta a la que asistirán más familiares y amigos. El próximo 25 de agosto, coincidiendo con su aniversario de boda, soplará las velas junto a su mujer en un acto más multitudinario.

Fue el 25 agosto del año 2001 cuando en la Catedral de Oslo, el príncipe Haakon, Heredero al trono de Noruega le daba el 'sí, quiero' a Mette-Marit Tjessem Høiby, una madre soltera cuyo pasado había sido sometido a un minucioso examen, que para muchos no había superado. Su amor desató la polémica en toda Europa y encontró la oposición de la Familia Real, del pueblo y de la prensa nacional e internacional. La propia Princesa se refirió a su pasado como "salvaje" y pidió perdón al pueblo por ello, mientras el Príncipe anunció que no dudaría en renunciar a la corona por amor. 22 años después, siguen tan enamorados como el primer día. Nadie duda de que Mette Marit sea una princesa perfecta y la mejor compañera de vida del heredero al trono noruego.

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Haakon de Noruega y su familia
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Haakon está llamado a ser el próximo rey de Noruega, un cargo para el que lleva preparándose desde que nació y que asumirá con el máximo compromiso. "Lo haré lo mejor que pueda. Me tomo esto muy en serio. Quiero manejar bien el papel cuando llegue ese día", ha afirmado. También está dispuesto a hacer que su trabajo sea lo más placentero posible. "Tampoco debemos ponernos demasiado serios al respecto. Debería ser divertido también. Así que es importante tener esta dualidad".

El heredero es consciente de que no tiene el mismo sentido del humor que su padre, del que destaca su enorme generosidad. "Es una persona muy fácil de querer, una cualidad que aprecio realmente de él". A pesar de tener el mejor ejemplo en casa, Haakon quiere ser él mismo cuando reine, un consejo que ha recibido del mismo Harald de Noruega, que se convirtió en rey con 53 años tras la muerte de su padre, Olaf V, en 1991. "Tengo que hacer las cosas a mi manera. Eso es algo que siempre me ha dicho mi padre, que tengo que ser yo mismo y encontrar mi propio camino".

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