La hija de Kim y Kanye prefiere el apartamento de su padre a la mansión de su madre

North y Kanye West credit:Bang Showbiz
North y Kanye West credit:Bang Showbiz

Los hijos de las hermanas Kardashian-Jenner están creciendo rodeados literalmente de cámaras y lujos. Ninguno de ellos había nacido cuando sus madres comenzaron a grabar el programa de telerrealidad que las convertiría en unas de estrellas; de hecho, el nacimiento de Mason -el primogénito de Kourtney Kardashian- fue documentado en un episodio de la carta temporada. Sin embargo, el dinero no siempre garantiza su felicidad.

La hija mayor Kim y Kanye prefiere la casa de su padre que la lujosa mansión de Hidden Hills valorada en 60 millones de dólares que su madre se quedó durante el divorcio, y donde cuenta con un chef, seguridad privada, asistentes personales y un niñero.

Kim siempre ha tratado de proteger a sus cuatro hijos de los escándalos del rapero y jamás ha hablado mal de su ex a pesar de que él sí la ha atacado públicamente en varias ocasiones. Por eso le duele tanto escuchar a North decir que su padre lo hace todo bien.

"Si estuviera aquí, ella te diría: 'Papá es el mejor'. Él lo tiene todo resuelto. No tiene niñera, no tiene chef, no tiene seguridad. Vive en un apartamento. Ella se pone a llorar y me dice: '¿Por qué no tienes un apartamento? No puedo creer que no tengamos un apartamento'", ha explicado Kim durante una conversación con su hermana Kourtney en el episodio del jueves de su reality 'The Kardashians'.

Aunque a menudo discuten y se gritan, Kourtney y Kim saben aparcar sus diferencias cuando la otra necesita ayuda. En un intento por consolarla, Kourtney le ha asegurado que los niños siempre dirigen los reproches al progenitor que está más involucrado en su educación.

"Eso también lo hacen en casa de Scott", le ha asegurado, refiriéndose a su ex Scott Disick. Los reproches que le hacen sus tres hijos -Mason, de 13 años, Penelope, de 11, y Reign, de ocho- siempre siguen la misma línea: "'Papá tiene la mejor casa, tu casa es lo peor. Él tiene la mejor casa. No es súper grande, el ambiente es mejor'".

Kim es la primera que reconoce que North le ha enseñado mucho sobre el arte de la "paciencia" porque, de sus cuatro retoños, es quien mejor sabe ponerla a prueba.