El ajuste en el Incaa: un recorte de gastos que asciende a 1800 millones de pesos
Llega a casi 1800 millones de pesos el recorte de gastos dispuestos por el Gobierno en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) a través del fuerte plan de ajuste que lleva adelante la gestión encabezada por Carlos Luis Pirovano.
Según pudo saber LA NACION de fuentes oficiales, el total de las restricciones establecidas en la resolución 16/2024 (publicada el lunes 11 de este mes en el Boletín Oficial) que lleva como título “suspensión de erogaciones económicas en el marco de la racionalización de recursos” dentro del Incaa es de 1.791.074.337 pesos. Esa cifra corresponde a la suma de cada una de las medidas de austeridad aplicadas en los diez ítems en los que fue dividida la resolución.
LA NACION accedió a los montos discriminados de todos los gastos que quedaron suspendidos con la instrumentación de este plan de recortes dispuesto por la conducción del Incaa. El valor más alto de erogaciones suspendidas (640.179.003 pesos) corresponde a la no renovación de contratos del personal que prestaba servicios en concepto de locación de obra y de obra por especialidad (monotributistas).
Le siguen en orden decreciente las cifras de los distintos tipos de apoyo que llevaba adelante el Incaa. A un total de 252.000.000 pesos asciende la quita de respaldo económico a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; de 217.445.967 al lanzamiento de películas; de 148.726.629 a los festivales y mercados audiovisuales internacionales, y de 134.663.164 a los festivales nacionales, muestras y semanas de cine.
El Incaa también suspende las horas extras al personal del organismo (por un valor de 150.823.685 pesos), los desplazamientos del personal e invitados, dentro y fuera de la Argentina (113.360.068) y los adicionales en servicios de seguridad (22.150.260).
También se suspenden los servicios de motomensajería, traslados en taxi y otros servicios de movilidad (42.026.392), los reintegros por gastos de combustibles, estacionamiento y comida (28.863.766) y la compra de “suministros comestibles” para el personal (4.846.174). Por último, hay un monto de 2.739.230 incluido en la lista por la terminación de los contratos con las compañías de telefonía celular.
El jueves último, en una reunión con las autoridades de la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica (CAIC), Pirovano explicó que el Incaa enfrenta en este momento un déficit de cuatro millones de dólares, hasta ahora financiado en partes iguales por aportes del Tesoro y planes de deuda. Cuando asumió la actual gestión designada por el gobierno del presidente Javier Milei, los ingresos del organismo a través del Fondo de Fomento establecido por la Ley de Cine vigente sumaban alrededor de 12 millones de dólares, mientras los egresos llegaban a 16 millones.
Pirovano expresó a la CAIC, según consta en el informe que la entidad envió a sus afiliados, que tiene la intención de aplicar en la primera etapa de su gestión un plan de estabilización con el objetivo de reducir los costos estructurales del organismo. Una vez saneado el quebranto actual, la idea es aplicar las normas vigentes y restituir el 50% del Fondo de Fomento fijado por la ley a los subsidios a la producción. “Eso es imposible porque los costos de la estructura (personal, alquileres, gastos operativos) demandan cerca del total de los recursos del Incaa”, explicó Pirovano a la entidad.
Otras instituciones, como el Colectivo de Cineastas y Cine Argentino Unido, que promovieron la masiva movilización del último jueves frente a las puertas del cine Gaumont en rechazo al plan de ajuste y a la gestión de Pirovano, anunciaron junto con los sindicalistas de la Asociación de Trabajadores del Estado para el sábado 23 un “encuentro cultural en defensa del cine argentino”.