La inesperada hipótesis que plantea la película de Nahir sobre el crimen

Valentina Zenere se pone en la piel de Nahir
Valentina Zenere se pone en la piel de Nahir

El caso Nahir Galarza fue uno de los más polémicos de los últimos años, sobre todo porque quien asesinó a su novio de dos disparos terminó convirtiéndose en la mujer más joven en ser sentenciada a cadena perpetua en nuestro país. Tanto impacto tuvo en la sociedad, que este miércoles 22 de mayo Amazon Prime Video sumó a su lista de contenidos la película Nahir. Pese a que la mayoría conoce la historia de quien mató a Fernando Gabriel Pastorizzo el 29 de diciembre de 2017 en Gualeguaychú, Entre Ríos, la ficción plantea una inesperada hipótesis que pone en jaque esa versión.

Nahir Galarza y Valentina Zenere
Nahir Galarza y Valentina Zenere

Tal como indica el film ideado por Lucas Jinkis, Nahir y Fernando -que en la ficción es llamado Federico- protagonizan una relación marcada por celos, discusiones y cientos de llamadas perdidas; sin embargo, nunca se dejaron de ver hasta la noche que marcó un antes y un después.

Luego de un encuentro íntimo en la casa de Nahir, la pareja tiene una discusión y se dirige hacia la cocina. Ahí, la película muestra dos secuencias diferentes; primero, la joven toma el arma reglamentaria de su padre, Marcelo Galarza, quien se desempeñaba como Policía de la ciudad entrerriana y la guardaba sobre la heladera, y la esconde en uno de los bolsillos de su campera; la segunda, es él quien agarra el revólver y ella se lo quita mientras ambos se dirigen en moto hasta la intersección del crimen. Mientras discuten sobre el vehículo, ella saca el arma y le dispara por la espalda. Acto seguido, él cae sobre la calle de tierra y pide ayuda, pero la joven gatilla por segunda vez directo al pecho.

La otra versión fue desarrollada basándose en los dichos de Galarza dos años después del asesinato. Según reveló, dijo ser la culpable de la muerte de Fernando porque “su padre y el abogado le prometieron que el 31 de diciembre pasaría la noche en su casa” y porque así “tendría una condena máxima de 10 años”. Sin embargo, esto nunca pasó, por lo que decidió realizar la explosiva declaración que no surtió efecto.

A mediados de enero de 2022, los medios replicaron las palabras que Nahir le había dicho a Raquel Hermida Leyenda, su nueva abogada, quien se desempeña en causas con perspectivas de género, una de sus últimas estrategias para revertir la causa. “Yo no lo maté a Fernando, fue papá”, expresó en aquella nueva declaración, en la que también dijo que “le anotaron lo que debía decir” y que su padre le prometió que diría la verdad luego de “arreglar algunas cosas”.

Sin embargo, la fiscalía de Gualeguaychú desestimó la denuncia en lo relativo al homicidio al considerar que el caso ya había sido analizado y tratado “en juicio oral y público, y confirmado en diversas instancias superiores” que “arrojaron un grado de certeza” sobre el hecho.

Debido a esto es que una de las secuencias que llama la atención en la ficción forma parte de un final alternativo. Luego de la discusión que protagoniza la pareja, ambos se dirigen a la cocina, Pastorizzo agarra el arma, le apunta a Nahir y le dice: “Sos mía y de nadie más”. En paralelo, se la ve a Nahir desde la cárcel con su nueva declaración: “No es la primera vez que Federico agarraba el arma y mi papá lo sabía. De golpe se la llevaba, para joder con sus amigos. Mi papá me había dicho: ‘si la toca una vez más (...)’”.

Mientras ella habla, se ven imágenes de lo que sucedió después. Marcelo Galarza está detrás viendo la escena, sin que ellos se den cuenta. Una vez que salen y suben a la moto, Galarza los sigue. En ese momento de la película, ella continúa el relato: “Nosotros nos íbamos en la moto y él nos sigue en el auto. Enseguida llegamos a la calle de tierra, íbamos despacio con la moto y de repente escuchamos el auto”. En esa línea, el padre le dice que se baje de la moto y le dispara.

“Le dijo algo a Federico, no sé por qué no lo pude escuchar. Fue todo como estar en una película, pero no”, concluye en la cinta.