El inesperado vestido 'princesa' con el que Lindsay Lohan confirma su nueva era en el cine

Alcanzó la fama con la película Tu a Londres y yo a California cuando tenía 11 años, comenzando así un meteórico ascenso profesional que nos dejó películas de culto como Chicas malas o Devuélveme mi suerte, y que fue casi de la mano con su declive personal. Tras algunas detenciones, problemas de adicciones y rehabilitación, Lindsay Lohan decidió poner fin a su etapa en Los Ángeles para marcharse a Dubái, lejos de los paparazzi que minaban su moral. Allí ha vivido casi una década en la que ha encontrado estabilidad y una familia. En 2022 se dio el 'sí, quiero' con el financiero Bader Shammas y anunció su regreso al cine adentrándose de nuevo en su género favorito, la comedia romántica. Aquel año estrenó en Netflix Navidad de golpe, y como un fénix, resurgió de sus cenizas para dos años después, y tras ser mamá, volver a la industria por todo lo alto.

Algo que ha quedado confirmado este 2024 con un anuncio muy especial: Lindsay Lohan se encuentra rodando la segunda parte de Ponte en mi lugar, la cinta que protagonizó en 2003 junto a Jamie Lee Curtis, con quien se ha reencontrado más de 20 años después. Y precisamente ha querido rendir homenaje a la legendaria actriz en los Disney Legends Awards, unos galardones anuales que conmemoran a figuras que han sido especialmente relevantes en la factoría. Curtis se llevaba un premio por su trayectoria presentado por la neoyorquina, quien resaltó la suerte que ha tenido de trabajar con ella, dedicándole unas bonitas palabras a la protagonista de Halloween.

Una ocasión muy especial para la que Lindsay Lohan volvió a presumir del cambio de estilo que en los últimos meses hemos apreciado en sus elecciones. Y es que su armario se ha sofisticado hasta dejarnos looks inolvidables de alfombra roja, algo que intuíamos en la after party de los Oscar con aquel asombroso vestido de flecos metalizados, obra de Balenciaga. Anoche aparecía en los premios de Disney enfundada en un precioso diseño de gasa en verde pálido, una creación de cuello redondo y tejido vaporoso, firmada por Jil Sander.

Posaba espectacular momentos antes del inicio de la gala, completando su apuesta con unas sandalias de tacón metalizadas a juego con bolso caja plateado de la marca Tyler Ellis y pendientes largos que quedaban a la vista con su elegante semirrecogido. Sin duda uno de los looks más aplaudidos desde su regreso, que tiene detrás el toque mágico de uno de los dúos de estilistas más cotizados de la industria.

No es casualidad el giro de 180 grados que ha dado el vestidor de la intérprete, pues a comienzos del 2024 decidió ponerse en las manos de Rob Zangardi y Mariel Haenn, estilistas y consultores de imagen que desde entonces han trabajado con ella construyendo combinaciones tan espectaculares como esta. Ambos se han ganado un reconocimiento en su sector gracias a la importante cartera de clientas que tienen, así como su buen gusto por la moda, pues son ellos quienes ayudan también a Jennifer Lopez, Lily Collins o Jessica Biel a idear sus estilismos.