Integrante de Destiny’s Child recluida por depresión

Michelle Williams
Michelle Williams

Michelle Williams reveló que no hace tanto estuvo recluida para recibir tratamiento psiquiátrico por problemas mentales. En un post de Instagram la integrante de Destiny’s Child y activista de la salud mental admitió que siguió su propio consejo y buscó ayuda.

“Por años me he dedicado a concienciar sobre la salud mental y empoderar a la gente a reconocer cuándo es momento de buscar ayuda, apoyo y guía de aquellos que te aman y se preocupan de tu bienestar”, escribió.

Ella continúa diciendo que buscó ayuda profesional, tal cual motiva a muchos de sus seguidores. “Hoy me pronuncio orgullosa, feliz y saludable como alguien que continuará liderando con su ejemplo y como una portavoz incansable de aquellos en necesidad. Si cambias de actitud, puedes cambiar tu vida”.

La mujer de 37 años recibió muchos mensajes de apoyo, incluyendo a Tina Lawson, la mamá de Beyoncé, quien la conoce desde niña, y la felicitó por su honestidad e iniciativa. Su prometido, el pastor Chad Johnson, también le dejó un mensaje.

“Estoy tan orgulloso de tu valentía y compromiso con esto. Nosotros estamos en esto juntos y en un increíble viaje mirando al maestro pintar una obra de arte sin precio”, escribió el hombre.

Junto a su prometido Chad Johnson.
Junto a su prometido Chad Johnson.

La pareja hizo público su compromiso el pasado marzo. En octubre 2017 Williams había hablado sobre sus pensamientos suicidas mientras era parte del famoso grupo. “Estoy en uno de los grupos femeninos de mejores ventas de la historia sufriendo depresión”, dijo a un programa televisivo.

“Cuando se lo mencioné a nuestro manager, él no entendía porque habíamos firmado un contrato multimillonario y nos íbamos de tour. ‘¿Por qué estás deprimida?’”, ella relató que el papá de Beyoncé, Matthew Knowles, le dijo.

Williams siguió hacia delante, pero admitió que su depresión empeoró al punto de sentirse suicida y querer abandonar el grupo. Ella dijo que ha batallado la depresión desde que tenía 13 años, pero entonces no sabía qué era lo que la aquejaba. “Creo que a los 25 si hubiera tenido un nombre para lo que sufría, hubiera dicho que era depresión”.