Jada Pinkett Smith ha sido incapaz de vivir separada de Will Smith
El pasado mes de octubre Jada Pinkett Smith publicó sus memorias, donde soltaba una bomba sobre su matrimonio con Will Smith: el actor y ella llevaban separados desde 2016 y habían estado fingiendo ante el resto del mundo cuando se presentaban como una pareja feliz sobre la alfombra roja.
En las entrevistas que fue concediendo para promocionar su libro, ella explicó que no habían encontrado ningún motivo para formalizar su ruptura solicitando el divorcio. Sus planes de futuro eran confusos, y ella tampoco hizo mucho por aclararlos. Lo último que dijo al respecto fue que estaban trabajando muy duro, y juntos, para encontrar una solución que funcionara para los dos.
Ahora Jada ha ofrecido una actualización sobre el estado de su relación con Will, que no aclara si han conseguido reconectar a nivel sentimental, pero sí desvela que siguen en contacto.
"Vamos a estar juntos para siempre", ha asegurado en una nueva entrevista con Drew Barrymore, donde ha dado a entender que no es capaz de vivir lejos del padre de sus dos hijos. "Lo intenté. Lo intentamos los dos".
Por el momento, Will y Jada viven en lugares distintos; ella se compró una casa por su 50 cumpleaños y se mudó lejos del que había sido su hogar familiar hasta entonces. Sin embargo, está convencida de que algún día volverán a convivir bajo un mismo techo para que pueda "cuidar" del actor.
"Para serte sincera, creo que en algún momento volveremos a hacerlo, de verdad que sí. Will se está haciendo viejo. Yo me mantengo bastante joven, pero se me está haciendo evidente que él va a necesitar a alguien que cuide de él", aseguró.
El otro implicado en toda la historia se pronunció sólo por medio de un comunicado público donde parecía asumir parte de la culpa de su separación, al reconocer que con el paso de los años se había instalado en una especie de "ceguera emocional" con respecto a su esposa, que le impedía apreciar lo increíble que es Jada.