Yahoo Estilo James Cameron, es hora que Terminator tire la toalla
Tras un no parar de fracasos intentando revitalizar Terminator con nuevas entregas, sus responsables no parecen rendirse en volver a sacar a flote al personaje de Arnold Schwarzenegger. En una entrevista con el podcast Smartless y en la rueda de prensa de la secuela de Avatar (a través de Variety) -titulada Avatar: El sentido del agua en España y Avatar: El camino del agua en Latinoamérica-, James Cameron analizó los recientes descalabros en taquilla de la saga y señaló que el futuro de este clásico de ciencia-ficción no está del todo cerrado.
Según el director de Titanic, que creó la franquicia en 1984 y se apartó después de dirigir Terminator 2 en 1991, la razón del fracaso de las últimas películas se encontraría en su enfoque tan puramente nostálgico, en el apoyarse en traer de vuelta a estrellas como Schwarzenegger o Linda Hamilton y hacerla parecer una película “para tu abuelo”. Cameron admite estar “razonablemente feliz” con el resultado de cintas como Terminator: Destino oscuro (o Destino oculto en Latinoamérica), la última entrega estrenada en 2019 que, bajo un elevado presupuesto de 185 millones de dólares, recaudó unos decepcionantes 261,1 en todo el mundo. Sin embargo, reconoce que desde el principio tuvo discusiones con el director Tim Miller sobre el rumbo que debía seguir esta entrega.
Y es que cree que la cinta solo debió contar con una de sus estrellas originales, no las dos. De ahí que piense que se generara una impresión de que era una producción solo para las antiguas generaciones sin nada nuevo que ofrecer. “Creo que la película podría haber sobrevivido con Linda en ella”, dijo Cameron durante la promoción de su última película. "Creo que podría haber sobrevivido teniendo a Arnold en ella, pero cuando pones a Linda y Arnold en ella y luego, ya sabes, ella tiene 60 y tantos, él tiene 70 y tantos, de repente no era tu película 'Terminator'. Ni siquiera era la película Terminator de tu padre, era una película Terminator para tu abuelo. Y no vimos eso”.
Pero esta teoría no se sostiene por ningún lado. Si recordamos, Terminator: Génesis, la película estrenada en 2016 que contó con Emilia Clarke como Sarah Connor y que recuperó a Arnold Schwarzenegger tras su ausencia en la cuarta entrega, ya se encajaba en la fórmula que Cameron quería para Destino Oscuro: el contar con una nueva y relevante cara protagonista, como fue el caso de una importante personalidad de Juego de Tronos como Clarke, a la vez que con la mayor estrella de la franquicia. Desde luego, el toque nostálgico se equilibraba con lo nuevo y renovado, pero el problema es que la trama de la cinta, que volvió a apostar por una reimaginación de la historia original, no daba más de sí.
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Y la misma sensación ya estuvo presente en Terminator Salvation (o Terminator: la salvación), la entrega de 2009 protagonizada por Christian Bale y Sam Worthington, y volvió a rodear a Terminator: Destino oscuro en 2019. Es decir, que el problema de la saga se encuentra en estar extremadamente explotada, en no saber salir del déjà vu constante y, en definitiva, quedar relegada a ser un título de acción de manual sin nada nuevo que ofrecer. Pero esto no parece entrar en la cabeza de sus responsables. Y están empeñados en seguir con más entregas cuando la franquicia ya no da más de sí.
Según Cameron, ahora mismo está sobre la mesa una nueva película, y, aunque aún no hay nada confirmado, querría una trama centrada en Skynet y la inteligencia artificial y no tanto en robots letales. "Si tuviera que hacer otra película de Terminator y tal vez tratar de lanzar esa franquicia nuevamente, lo cual está en conversaciones pero no se ha decidido nada, lo haría mucho más sobre el lado de la Inteligencia artificial y no tanto sobre robots enloquecidos”, explicaba. Sin embargo, no es ninguna idea novedosa, puesto Skynet y su funcionamiento siempre ha jugado un papel muy relevante en todas películas y, de hecho, este foco fue una de las principales apuestas de entregas como Terminator: Génesis. Así que tal vez es hora de tirar la toalla con esta saga, quedarnos con su buen recuerdo y dejar de explotarla con cintas que no van a dar más de sí.
