Jeremy Renner desvela su arma infalible para acelerar su recuperación

El pasado día de Año Nuevo, Jeremy Renner sufrió un accidente que estuvo a punto de acabar con su vida. El actor de la factoría Marvel trató de auxiliar a su sobrino cuando una máquina quitanieves, de gran tonelaje, se dirigía descontrolada hacia él, deslizándose por las placas de hielo formadas a raíz de la copiosa nevada que había caído la noche antes en las inmediaciones de Reno.

El intérprete se subió al vehículo, que volcó y le aplastó en cuestión de segundos. Cuando llegó al hospital en estado crítico, Renner tenía 30 huesos rotos y un traumatismo severo en el pecho. Una vez confirmado que su vida ya no peligraba, la preocupación recaía en la posibilidad de que algunas de sus lesiones fueran irreversibles y desembocaran en una retirada demasiado temprana de la industria del cine.

Afortunadamente, desde entonces Jeremy Renner ha estado informando con frecuencia a sus seguidores de las redes sociales de los excelentes progresos que ha realizado en el marco de su ardua recuperación, a los que ha calificado en más de una ocasión como "milagrosos". Pero lejos de conformarse, el artista siempre quiere ir un paso más allá a la hora de acelerar el proceso y, con suerte, volver al trabajo lo antes posible.

En su nueva publicación de Instagram, el ídolo de acción ha presentado a sus fans uno de los tratamientos a los que se ha venido sometiendo últimamente para mejorar significativamente sus resultados. Dos veces al día, Renner se mete en una cámara hiperbárica, que estimula la regeneración de tejidos, reduce la fatiga muscular y le proporciona oxígeno puro, el cual se disuelve con mayor facilidad en la sangre. "Cámara hiperbárica, 2 de presión atmosférica, oxígeno alto, dos veces al día", ha escrito junto a una imagen del procedimiento.