Yahoo Estilo Joven baloncestista fue asesinado y quemado por ganga en Nueva York
Dos jóvenes fueron fatalmente agredidos por una ganga en Nueva York. La tragedia ocurrió en un campo de golf en El Bronx. Nikki Huang y su amigo, el baloncestista Jesse Parrilla, de 22 años, fueron asesinados a balazos. Según reporta el diario The New York Post, la joven le dijo a unos amigos gangueros que otra ganga rival le había robado una cartera, y la atacaron por venganza.
Parrilla no tenía nada que ver con este conflicto, el joven simplemente estaba acompañando a su amiga y estaba en el lugar equivocado. La rivalidad entre las gangas Up The Hill y Down The Hill terminó en esta tragedia, con la muerte de Huang y Parrilla.
Según las autoridades, Parrilla no tenía récord criminal ni afiliación a ninguna ganga. Su madre Michelle Morales dijo que su hijo conocía a Huang desde que estudiaban juntos en la escuela intermedia. El carro que quemaron era de la madre de Parrilla.
Según la madre, su hijo solo era un buen amigo que acompañó a Huang esa tarde. "Él no tenía idea lo que estaba pasando porque él nunca se pondría en una situación así", dijo la madre entre lágrimas. Morales dijo sentirse devastada y que las últimas palabras que le dijo su hijo fueron "te amo".
Facebook Nikki Huang y Jesse Parrilla
Los cadáveres de los jóvenes fueron encontrados en el auto quemado. Según las autoridades, Huang, de 23 años, fue robada hace días —perdiendo su cartera, dinero en efectivo y tarjetas de crédito— y sus supuestos ladrones eran miembros de la ganga Down The Hill. La joven denunció el crimen a sus amigos de la ganga rival, Up The Hill, en vez de reportar el robo a las autoridades.
Huang trabajaba en un restaurante de comida china en el Lower East Side. Su madre es la propietaria del restaurante y de un salón de belleza, Nails by Nikki, reporta el diario.
Facebook Jesse Parrilla
Varios miembros de estas gangas rivales murieron en altercados antes de que la ganga Down The Hill siguiera a Huang. Parrilla, su acompañante, también fue agredido. Las víctimas fueron llevados a un campo de golf en El Bronx, donde fueron asesinados y su auto prendido en llamas.
Nikki Huang
Parrilla, quien jugaba baloncesto para Genesee Community College, soñaba con convertirse en empresario.
