Kate Winslet: entre la lesión que puso en riesgo su salud y un jugado desnudo
Las ganas por sacar a la luz su nueva película, un largometraje biográfico sobre la Segunda Guerra Mundial, hicieron que Kate Winslet esté dispuesta a hacer cualquier cosa para conseguirlo, incluso trabajar con una lesión en la espalda que era un serio riesgo para su salud.
Winslet, que interpreta a Elizabeth “Lee” Miller, una modelo de moda que se convirtió en una aclamada corresponsal de guerra de la revista Vogue durante la Segunda Guerra Mundial, habló con este medio sobre todo lo que tuvo que hacer para que la película llegara a buen puerto.
El primer día de rodaje, Winslet se resbaló y se lesionó la espalda mientras ensayaba una escena en la que Miller corre por la calle en la ciudad francesa de Saint-Malo, esquivando bombas y balas enemigas. “Tenía tres hematomas masivos en la columna, enormes”, contó en la entrevista y sumó: “Apenas podía mantenerme en pie”.
Decidida a que no hubiera retrasos, Winslet siguió adelante con el plan de rodaje a pesar del dolor, levantándose antes de las 4 de la mañana, peinándose y maquillándose a las 5 y entrando en el set antes de las 7. Esta misma ética de trabajo es la que aplicó para conseguir que la película llegara a los distribuidores. “El proceso de ponerla en marcha fue la lucha más fenomenal. Realmente la llevé por una montaña”, aseguró.
Un juzgado desnudo y las críticas recibidas
El esfuerzo y la pelea para lograr sus objetivos no son algo ajeno para la actriz. A lo largo de su carrera muchas veces tuvo que batallar contra los prejuicios que tenían productores y directores con respecto a su cuerpo. “Me decían constantemente que no tenía la forma adecuada”, afirmó Winslet y sumó: “Me decían constantemente que tendría que conformarme con menos”.
Recreando para la película una famosa fotografía que Miller tomó a un grupo de amigas haciendo un picnic en topless en Francia antes de la guerra, Winslet, de 47 años, se desnudó por completo a pesar de que debido a la lesión que sufrió el primer día de rodaje no había podido entrenar para sentirse más a gusto con su figura.
“Tuve que ser muy valiente para dejar que mi cuerpo fuera la versión más suave de sí mismo y no esconderme de él”, dijo Winslet antes de referirse a otra escena en la que sale luciendo solo la parte superior de una malla. “Y créeme, la gente de nuestro equipo me decía: ‘Quizá quieres sentarte un poco’. Y yo decía: ‘¿Por qué? ¿Por la parte de carne que se ve? No, así es como va a ser’”.
Con el paso de los años, Winslet aprendió a ignorar el ruido, ya sea con respecto a su cuerpo o a su trabajo. En varias oportunidades, la actriz declaró que no lee ninguna crítica desde que tiene 21 años. “Creo que probablemente se deba a haber estado sometida al escrutinio y a los juicios más terribles y, de hecho, me atrevería a decir que sufrí acoso por parte de los principales medios de comunicación cuando tenía 20 años”, consideró.
Con esta película y los altibajos que le generó la lesión, Winslet aprendió a dejarse llevar y admitió que se alegraba de no poder hacer ejercicio. “En cierto modo fue extrañamente bueno para mí: aprendí que tengo que ser indulgente conmigo misma”, sostuvo.
El respeto por su cuerpo no es algo nuevo para la estrella. Winslet ha sido una de las pioneras en oponerse a los retoques digitales y ha luchado contra la distorsión de la belleza real causada por los efectos del Photoshop.
Además siempre ha estado estuvo muy alerta respecto a este tema y ha puesto sus propias condiciones a la hora de participar de algún tipo de campaña o producción. “El envejecimiento no es algo malo […] Prefiero que digan ‘parece mayor’ a que digan ‘parece retocada’”, dijo en 2009, en una entrevista con Harper’s Bazaar.