Kelly Clarkson se resiste a enamorarse de nuevo

Kelly Clarkson credit:Bang Showbiz
Kelly Clarkson credit:Bang Showbiz

La cantante Kelly Clarkson vivió en 2021 uno de los años más complicados de su vida. Por si no fuera suficiente con su separación de Brandon Blackstock, padre de sus dos hijos, el proceso de divorcio que siguió a esa decisión adquirió rápidamente tintes muy dramáticos y conflictivos.

El empresario no sólo le exigió una pensión para la manutención de los niños, también otra elevadísima para su propio bienestar. Solicitó además poder vivir y explotar económicamente, a título de inquilino inamovible, una finca cuya propiedad pertenecía exclusivamente a la intérprete, algo a lo que acabó accediendo la artista. En definitiva, la estrella fue la gran perdedora del proceso y tiene que abonar a su antiguo esposo cerca de 200.000 dólares al mes hasta el año 2024.

Desde entonces, a la estrella de la música, quien presenta estos días un exitoso 'talk show' que ocupa la franja vespertina en la que antes se hallaba el ya extinto programa de Ellen DeGeneres, no se le han conocido novios, pretendientes o amigos especiales con los que iniciar un nuevo capítulo en su vida amorosa. Ella misma ha reconocido ahora que no está demasiado interesada en conocer a su hipotética 'media naranja', ya que se encuentra muy cómoda en su condición de madre soltera y, por otro lado, porque quiere proteger a su prole, River Rose (9) y Remington Alexander (7), de experiencias potencialmente indeseables.

"Estoy disfrutando de mí misma, de mis hijos y de mi trabajo. Me encanta lo que estoy haciendo ahora mismo. Y también es verdad que soy recelosa, porque la presencia de padrastros no siempre funciona bien para todos, o el mero hecho de que haya otra persona involucrada en tu vida", se ha sincerado en conversación con el portal de noticias E! News.

La vencedora de la primera edición de 'American Idol' (2002), autora además de éxitos como 'Stronger' y 'Since U Been Gone', quiere evitar a toda costa que sus retoños sean víctimas de dinámicas aún más "confusas" que las que ya presiden su día a día. "Ya de por sí es bastante confuso, teniendo en cuenta que sus padres viven en sitios diferentes y que el divorcio siempre es duro para los niños. Honestamente, lo último que quiero ahora es crearles situaciones más confusas todavía", ha argumentado en relación con una custodia que comparte a partes iguales con su antiguo esposo.