Kelly Osbourne cree que ser madre le ha salvado la vida porque pensaba no llegaría a los 40

La estrella de la televisión alcanzó la edad hito el 27 de octubre y ahora ha admitido que pensó que su batalla contra la adicción cortaría su vida, pero dar la bienvenida a su hijo Sid con Sid Wilson de Slipknot la colocó firmemente en el camino correcto. credit:Bang Showbiz
La estrella de la televisión alcanzó la edad hito el 27 de octubre y ahora ha admitido que pensó que su batalla contra la adicción cortaría su vida, pero dar la bienvenida a su hijo Sid con Sid Wilson de Slipknot la colocó firmemente en el camino correcto. credit:Bang Showbiz

Kelly Osbourne cree que ser madre le ha salvado la vida porque antes pensaba que no llegaría a los 40.

La estrella de la televisión - hija del rockero de Black Sabbath Ozzy Osbourne - alcanzó la edad hito el 27 de octubre y ahora ha admitido que pensó que su batalla contra la adicción cortaría su vida, pero dar la bienvenida a su hijo Sid con Sid Wilson de Slipknot la colocó firmemente en el camino correcto.

Kelly - que ahora está sobria - dijo a Us Weekly: "Creo de verdad que mi bebé me salvó y me convirtió en una persona completa... Te das cuenta en ese segundo: 'Me has dado un propósito como nada me había dado antes'. No creo que tuviera un propósito. Iba de una cosa a otra, y este nivel de odio a mí misma y de duda que solía tener me aniquilaba".

La estrella de 'The Osbournes' añadió: "No creo que Dios me hubiera dado un bebé en una época en la que no estaba mental o físicamente preparada para ello. Cuando seguía bebiendo, consumiendo... habría sido una madre terrible. No era lo suficientemente desinteresada. Me alegro mucho de que ocurriera cuando fui un poco mayor y tenía las cosas claras".

Kelly reveló además que todavía lucha con su sobriedad cuando tiene un mal día, pero ha encontrado diferentes maneras de afrontar los momentos cuando se siente mal.

Explicó: "Es un camino pedregoso para mí. La mayoría de los días son estupendos, pero de vez en cuando tengo un día realmente malo en el que me resulta difícil salir adelante. Mi instinto natural habitual es anestesiarme, porque así no tengo que sentir el dolor ni sentirme indigna. Puedo simplemente hibernar. Pero no puedes hacer eso cuando tienes un bebé. No se puede en absoluto. Encontrar otras formas de superar esos días duros puede ser difícil a veces".