Kevin Costner pide a billonarios creer en sus filmes
Alejandra Musi, enviada
CANNES, Francia mayo 21 (EL UNIVERSAL).- Las lágrimas de emoción con las que el actor y director estadounidense Kevin Costner recibió aplausos en la presentación de la primera película de la saga en la que está volcando todos sus esfuerzos (y capital) fueron la antesala de una divertida y emotiva rueda de prensa.
En ella, Kevin dijo entre risas, pero dejando claro que no es broma, que ha venido al Festival no sólo a presentar su "Horizonte", el western que está diseñado como saga de al menos tres películas, pero también a ver si alguno de los billonarios que se pasean en sus enormes yates por la Riviera francesa escuchan su llamado, y quieren producir sus películas.
"Yo les prometo que a cambio los invito a todas las alfombras rojas y a vivir todo el glamour que esto conlleva", explicó con humor el actor de 69 años.
Costner insistió en lo complicado que es hacer este tipo de cine que se considera clásico y simple hoy en día.
"Pero no hay nada fácil en hacer un western, hacer uno bueno es muy complejo. Cuando Hollywood los hace simples no me interesan, algo tiene que estar en riesgo. Además, las películas también tienen que lograr tener algo en común contigo, o pierdes la atención. Cuando nos reconocemos en ellas es que podemos empezar a crear momentos que nunca vamos a olvidar", señaló.
Al cineasta le ha costado varias décadas comenzar esta saga. El ganador del Oscar señaló que fue difícil que la gente creyera en él.
"Creo que es un patrón que se repite conmigo, me pasó con Danza con lobos (por el que ganó el premio de la Academia). Quizás es porque me gusta ir por la forma tradicional. Por eso no dejo de soñar y vuelvo a preguntar si no hay por aquí entre nosotros algún billonario que quiera acompañarme en la aventura".
Con sabor agridulce
Con una carrera de más de 40 años en la que ha recibido premios como el Globo de Oro y Emmy, el actor se mostró modesto con respecto al poder que tiene su nombre entre la gente:
"Es divertido cómo quizá para ustedes tengo esta especie de fama mundial, pero si pudiera quitármela por un momento verían que somos muy parecidos. Soy alguien que se preocupa por los problemas de sus hijos, que sufre para hacer sus proyectos, como esta película que desde 1988 estuve intentando hacer y que no pude dejar", reflexionó.
Entre otras cosas que compartió es cómo en "Horizon: an american saga" (título original) también le dio un papel a uno de sus hijos, porque no podía con la idea de dejarlo tanto tiempo.
"Nunca le doy papeles a mis hijos porque sé que hay personas que darían todo por tener esta oportunidad, y si a mis hijos no les interesa actuar, no quiero quitarle ese lugar a alguien que realmente lo desee, pero en este caso sabía que me iba a alejar de mi pequeño por mucho tiempo y que ésta era una forma de tenerlo cerca.
"Así que fue una trampa. Al final, soy un padre al que verás emocionado en la primera fila del colegio grabando a sus hijos en sus obras de teatro escolares", dijo.
También aseguró que está dispuesto a arriesgar su patrimonio con tal de conseguir hacer los filmes que quiere:
"¿Quién necesita cuatro casas para vivir? Si tengo que venderlas para seguir dirigiendo, lo haré. Voy a llegar lo más lejos que pueda y mis recursos me permitan… Si todo va mal, mis hijos ya pueden buscarse la vida".
Esta es la cuarta vez que Costner dirige; la primera fue en "Dances with wolves" (Danza con lobos) de 1990, "The postman" (Mensajero del futuro) de 1997 y "Open range" (Pacto de justicia) de 2003. Cuando lo ha hecho, generalmente ha sido con una pasión clara por la narración y los personajes.
Sin embargo, en contraste con la ovación al proyectar el filme, el regreso de Costner a la dirección tras casi 20 años se empaña con las primeras reacciones de la crítica; en Rotten Tomatoes tiene un 29% de aprobación.
El filme incluye en su elenco a Sienna Miller, Abbey Lee, Sam Worthington y Costner.