Kodi Smit-McPhee: quién es el joven actor australiano que puede ganar el Oscar este año y que busca romper los moldes

Kodi Smit-McPhee, en la premiere en Nueva York de El poder del perro
Michael Ostuni

Cuando Peter ingresa a El poder del perro, la película de Jane Campion nominada al Oscar, creemos conocerlo cabalmente. Sin embargo, el trabajo del joven actor australiano Kodi Smit-McPhee nos conduce por un terreno sinuoso. Peter no es un personaje fácil de leer, se mueve frágil en un mundo machista que lo repele y se aferra a lo práctico, a los hechos, a la medicina, en ese escenario en el que todo puede desmoronarse como un castillo de naipes, principalmente su madre.

La fortaleza de El poder del perro es que permite inferir, nos deja entrar en un espacio sin saber realmente qué rumbo tomar una vez inmersos en éste. Por lo tanto, su gran elenco interpreta sin estridencias, como si todos estuvieran guardándose un as bajo la manga. Y la actuación de McPhee, que le valió un Globo de Oro, una nominación al BAFTA, al SAG, al Critics’ Choice y, esta mañana, al Oscar, circula por ese carril. Los pronósticos, además, están a su favor: el joven de 25 años podría ganar fácilmente la estatuilla dorada el 27 de marzo, y ese premio sería uno de los galardones más inspirados de la Academia en años, sobre todo cuando en raras ocasiones se celebra una caracterización sutil .

Viggo Mortensen compartió todas las escenas de la película con el actor infantil australiano Kody Smit-McPhee que interpreta a su hijo
Viggo Mortensen compartió todas las escenas de la película con el actor infantil australiano Kody Smit-McPhee que interpreta a su hijo


Viggo Mortensen compartió todas las escenas de La carretera con Kodi Smit-McPhee, quien interpretó a su hijo

McPhee comenzó a actuar desde pequeño. A los 11 años, ya era coprotagonista del aclamado film Romulus, My Father de Richard Roxburgh por el que obtuvo el premio AFI -el equivalente al Oscar de Australia- por ser el mejor actor joven del año. En 2009, ya estaba jugando en las grandes ligas junto a Viggo Mortensen en el aclamado drama apocalíptico La carretera, de John Hillcoat, y en 2011 le llegaba uno de los personajes más importantes de su carrera hasta la fecha, por el que recibió su segunda nominación a los Critics’ Choice.

Personajes complejos para un actor a la altura del desafío

Kodi Smit-McPhee y Chloë Moretz, protagonistas del film
Kodi Smit-McPhee y Chloë Moretz, protagonistas del film


Kodi Smit-McPhee y Chloë Moretz, protagonistas de Déjame entrar

En Déjame entrar, de Matt Reeves, McPhee se puso en la piel de Owen, un pequeño que entabla un fuerte lazo con una niña vampiro, personaje que cayó en manos de Chloë Grace Moretz. El desafío estaba a la vista. Los actores, a muy corta edad, no debían imitar los grandes trabajos de Kåre Hedebrant y Lina Leandersson en la película sueca en la que se basa el largometraje, sino darles su propia impronta, una empresa muy compleja si se tiene en cuenta que el film original es descomunal. Sin embargo, los pequeños lograron estar a la altura de las circunstancias en una remake no precisamente necesaria pero sí muy bien ejecutada por Reeves, quien adaptó con oficio la novela de John Ajvide Lindqvist, y quien volvería a dirigir a Kodi en El planeta de los simios: confrontación.

Kodi Smit-McPhee y Eric Bana en una conferencia de prensa antes del estreno mundial de Romulus, My Father en 2007
Kristian Dowling


Kodi Smit-McPhee y Eric Bana en una conferencia de prensa antes del estreno mundial de Romulus, My Father en 2007 (Kristian Dowling/)

Desde ese momento en adelante, McPhee fue consolidándose como uno de los mejores actores de su generación, y un joven con buen ojo para no repetirse a sí mismo. Como consecuencia, le puso la voz a Norman Babcock en ParaNorman, fue el protagonista indiscutido del drama de Michael Johnson All the Wilderness en el que interpreta a un adolescente con dificultades para procesar la muerte de su padre, formó parte de una nueva adaptación de Romeo y Julieta bajo las órdenes de Carlo Carlei, llegó al universo X-Men con el rol de Kurt Wagner (Nightcrawler) en X-Men: Apocalipsis, y participó del subvalorado largometraje de Craig Brewer, Yo soy Dolemite.

Los personajes que abordó parecen, a priori, no tener demasiado en común, y el propio actor declaró que el proceso de metamorfosis es lo que mantiene viva su pasión por la actuación. De todos modos, sí hay un hilo que los ata: McPhee sabe cómo darles una complejidad, contemplar más allá de la superficie, habitar sus contradicciones. Ese proceso lo aprendió viendo actuar a su padre, Andy.

Kodi Smit-McPhee firma autógrafos para los fanáticos en la alfombra roja en el estreno mundial de Romulus, My Father, el film por el que recibió el AFi, el equivalente al Oscar de Australia
Kristian Dowling


Kodi Smit-McPhee firma autógrafos para los fanáticos en la alfombra roja en el estreno mundial de Romulus, My Father, el film por el que recibió el AFi, el equivalente al Oscar de Australia (Kristian Dowling/)

“Mi papá me preguntó si quería ser actor para divertirme un poco”, reveló Kodi, cuya hermana mayor, Sianoa, también actúa, además de ser cantante. “Empezó de esa forma, desde un lugar especial, viajaba mucho con él, lo considero mi mentor, y tengo los mejores recuerdos; por eso, que ahora estén hablando de mi trabajo me enorgullece mucho, pero al mismo tiempo trato de no prestarle tanta atención. Cuando se trata de actuar, nunca lo hice por los premios, lo hice para poder generar conversaciones sobre las películas, aunque admito que ser reconocido por El poder del perro es también ser reconocido por todo el trabajo que vine realizando en estos años, eso me da mucha alegría”, remarcó el actor que también encontró en la actuación una forma de escape cuando fue diagnosticado con espondilitis anquilosante, una forma crónica de artritis, cuando tenía tan solo 16 años. “Ahora tengo otra perspectiva respecto a cómo mantenerme saludable”, aseveró en diálogo con The Guardian.

Peter Gordon, el personaje en quien se ve reflejado

Kodi Smit-McPhee y Benedict Cumberbatch en El poder del perro.
KIRSTY GRIFFIN/NETFLIX


Kodi Smit-McPhee y Benedict Cumberbatch en El poder del perro. (KIRSTY GRIFFIN/NETFLIX/)

Es imposible hablar del rol de McPhee en El poder del perro sin dañarles la experiencia a quienes no han visto todavía la gran película de Jane Campion. Es por eso que Kodi es muy cuidadoso al referirse a Peter, aunque sí se explaya sobre aquello que lo conecta con él. “Encuentro varios paralelismos”, reconoce. “ Ninguno de los dos encajamos en las cajas que te impone la sociedad, y él además tiene cierta confianza en sí mismo, no vive en función de las expectativas ajenas, sobre todo en cuanto a lo que se supone que es masculino, y al concepto de fortaleza ”, explica McPhee, asegurando que se ha enfrentado en ocasiones a su padre, quien también fue luchador profesional, respecto a esos tópicos tan importantes.

Mc-Phee junto a Kirsten Dunst, Benedict Cumberbatch y la directora Jane Campion
Grosby Group


Mc-Phee junto a Kirsten Dunst, Benedict Cumberbatch y la directora Jane Campion (Grosby Group/)

“Un día nos peleamos y le dije que jamás sería como él”, recordó, e hizo una salvedad. “En ese choque, me dijo que no quería eso, pero que sí quería que estuviera siempre alerta, quería que me protegiera a mí mismo. En un momento se quebró y me dijo que pensaba que yo era perfecto tal cual era”. Desde el modo en que elige vestirse a ese rostro tan impactante que transmite una variedad de sentimientos en pantalla, se percibe esa perenne búsqueda por ser genuino. “Un día tuve una epifanía y supe que no quería ser igual a nadie. Soy un artista y hay belleza en eso, también me interesa la filosofía. Peter me ayudó a descubrir que está bien no encajar en la caja de la masculinidad. Podés ser fuerte más allá de cómo luzcas, de cómo te muevas y de las cosas que te atraigan”, declaró el actor que halló en Jane Campion a la realizadora que más lo inspiró en su carrera.

Kodi Smit-McPhee, gran candidato al Oscar
Stefanie Keenan


Kodi Smit-McPhee, gran candidato al Oscar (Stefanie Keenan/)

“Todos los directores con los que trabajé me han ayudado mucho, como Matt Reeves, pero Jane lo hizo de una manera extraordinaria, nunca dudó en exigirme más, siempre con el objetivo de salir de mi zona de confort. Al comienzo fue difícil, pero cuando te dirige una maestra como Jane, depositás toda tu confianza, te entregás, y agradezco haberlo hecho porque de lo contrario no podría haber construido a Peter”, destacó McPhee, quien comparte secuencias brillantes con su partenaire, Benedict Cumberbatch (quien se mantuvo en personaje todo el rodaje, salvo cuando a veces aparecía “el dulce caballero inglés”) en un film memorable que alude precisamente a lo que Kodi plantea.

El poder del perro no encasilla al espectador, pero tampoco a los personajes salidos de la obra de Thomas Savage. El poder del perro no encasilla, sobre todo, a Peter, quien se rehúsa a ser víctima de lo que ahora reinterpretamos como masculinidad tóxica. “Ninguna película me hizo sentir tantas cosas como esta. Es un film que no te dice cómo sentirte”, apunta McPhee sobre la experiencia en las que nos sumerge el drama psicológico de Campion por el que su actor “de reparto” seguramente reciba el reconocimiento de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood.

“Me alivia saber que la atención que recibo significa que la película está generando debates, eso es lo más satisfactorio”, remarca un actor necesario, fiel a su verdad, que se destaca en una industria del descarte donde muchos intérpretes quedan en el camino. Con McPhee, intuimos, el panorama será diferente. El control está en sus manos.