Kristen Bell "intimidó" a su coprotagonista Russell Brand para que no se propasara en el set

Poco después de que se estrenó Forgetting Sarah Marshall, Kristen Bell dijo en una entrevista que tuvo que "intimidar" a su coprotagonista Russell Brand para conseguir que entendiera que ella no estaba interesada en tener relaciones sexuales con él durante el rodaje.

Los recuerdos de su convivencia con el actor y comediante resurgieron a raíz de las acusaciones de que presuntamente violó y agredió sexualmente a varias mujeres en la cima de su fama.

Una investigación conjunta realizada por The Times, The Sunday Times y Channel 4 Dispatches destaparon las historias de cuatro mujeres, incluida una joven que tenía 16 años en el momento de su relación, quienes alegan que Brand las violó o abusó sexualmente de ellas entre 2006 y 2013.

Brand niega las acusaciones.

Durante una entrevista con Scottish Daily Record, Bell compartió que estaba consciente de lo "mujeriego" que era Brand y le dejó claro que no iba a tolerar sus insinuaciones.

"Dejé muy claro desde el principio que le daría un puñetazo en las bolas si intentaba algo. Así que se sintió intimidado", contó al periódico.

Bell mencionó que el comediante le pareció atractivo en un principio, pero se le fue el gusto cuando leyó sobre cómo trataba a las mujeres. "No tenía idea de quién era hasta que lo busqué en Google y vi lo canalla que es con las mujeres. Nos recordaba cada 10 minutos lo famoso que es en Gran Bretaña diciendo: ‘Es muy extraño no ser reconocido aquí’", relató a The Daily Mail. "No me pretendió en absoluto y, de hecho, hizo todo lo posible para decirme lo grotesca que era. Y ciertamente yo no lo pretendí porque es muy exigente; tardó más tiempo en maquillaje que yo".

En otra entrevista, mencionó que el actor "no intentó molestarme ni acostarse conmigo", y agregó que "sabía que le cortaría los hu*vos".

A pesar de dejar en claro que estuvo muy alerta con respecto a Brand, también elogió al actor y señaló durante las giras de prensa que le "encantó" trabajar con él. "Puede que sea la única mujer en el mundo que lo gritaría a los cuatro vientos, pero así fue", dijo en una entrevista separada.

Agregó que en ese entonces, él fue protector con ella y que, en última instancia, era un "hombre muy agradable".

"A Russell le encanta que todos sepan que es un mujeriego y que ha hecho un montón de cosas extrañas, pero creo que hay un chico muy agradable escondido dentro de Russell", dijo. "Me lo pasé muy bien con él porque era un poco protector conmigo".

Brand se describe a sí mismo como “promiscuo”, un rasgo que fue central para su imagen pública durante el apogeo de su fama desde finales de los años 2000 hasta la década de 2010. Insiste en que todos sus encuentros “siempre” fueron “absolutamente consensuados”.

Las mujeres que declararon para la investigación conjunta contaron historias que describían a Brand como controlador, emocionalmente abusivo y físicamente dominante.

Una de las víctimas mencionó a los editores que tenía 16 años en el momento de su supuesta relación sexual con Brand, quien entonces tenía 30 años. Afirma que Brand se refería a ella como “la niña” y escogía la ropa que ella debía usar durante sus citas.

Otra mujer afirma que Brand la violó en su casa de Los Ángeles en 2012 después de que ella se negó a participar en actos sexuales con él y un “amigo”. La mujer alegó que tuvo que visitar un centro de tratamiento de violación después del incidente y pasar cinco meses en terapia para superar lo sucedido.

Los mensajes de texto entre ella y supuestamente Brand se hicieron públicos durante el fin de semana. El número que ella afirma que es el de Brand se disculpa en los mensajes por actuar de manera “loca y egoísta”.

Brand, que ahora dirige un pódcast que a veces se inclina por teorías de conspiración de derecha, niega haber actuado mal y sugirió que puede haber alguna otra “intención oculta” detrás de las acusaciones en su contra.

“Siempre fui transparente [sobre la promiscuidad], casi demasiado transparente. Y ahora también estoy siendo transparente al respecto. Y ver que esa transparencia se convirtió en algo criminal, algo que niego rotundamente, me hace preguntarme: ¿hay otra intención oculta en juego?”, preguntó.

The Independent se puso en contacto con Brand en busca de comentarios.

Traducción de Michelle Padilla