Kylie Minogue disfruta de la 'libertad' que le proporciona su soltería

La cantante Kylie Minogue vive un momento de plenitud artística y personal a sus 55 años. La estrella del pop lanzó el verano pasado una de las canciones más pegadizas y radiadas del momento, 'Padam Padam', por la que recibió hace unas semanas el premio Grammy a la mejor canción 'dance'. En el terreno sentimental, lo cierto es que la intérprete no podría ser más feliz pese a no tener pareja, ya que por fin está exprimiendo al máximo todas las oportunidades que le brinda la soltería para su realización personal.

"Estoy soltera, disfrutando de la libertad. Creo que en estos momentos tenemos un mayor margen de maniobra que en otras épocas. Quiero decir... Que no hay nada de lo que asustarse. Definitivamente ese ha sido mi caso", ha celebrado en conversación con el semanario Sunday Mirror. La intérprete australiana corrobora así que por fin se ha independizado de ese relato de 'mujer incompleta' que hablaba, no sin condescendencia, sobre lo afortunada que era en el trabajo y lo poco que lo era en el amor.

La actitud tan positiva con la que Kylie afronta esta etapa de su vida es fruto de un progresivo cambio de mentalidad, suya y de los demás. Tanto es así, que ahora ha reconocido que, con la perspectiva que le aporta la madurez, se arrepiente de haberse embarcado en ciertos noviazgos que, a la larga, no le han aportado demasiado. No ha querido revelar nombres, teniendo en cuenta que entre sus exparejas se encuentran hombres tan conocidos como Michael Hutchence, el fallecido vocalista de la banda INXS, el modelo Andrés Velencoso o el actor Jason Donovan.

"Hay romances de los que podría haber prescindido, pero todo ello es parte de lo que nos hace humanos y de lo que nos ayuda a entenderlo todo. Estoy tratando de pensar en algo más elevado, pero... Simplemente te enamoras. Vives y aprendes", ha añadido en unas declaraciones que recuerdan en cierto modo a las de la actriz Jennifer Aniston, quien tuvo que escribir una carta abierta para afear a la opinión pública que la victimizara por sus desengaños amorosos, sobre todo desde que Brad Pitt le pidiera el divorcio en 2005 tras enamorarse de Angelina Jolie.