Las lágrimas de Jamie Foxx en su reaparición meses después de su hospitalización: ‘No podía caminar'
Jamie Foxx se emocionó en su reaparición en la entrega de los premios de cine y televisión de la Critics Choice Association en honor a los logros de negros, latinos, asiáticos, americanos y habitantes de las islas del Pacífico. El ganador del Oscar, de 55 años, tuvo que contener las lágrimas al aceptar el premio de manos de la presentadora y coprotagonista de The Burial, Jurnee Smollett, en su primera aparición pública desde su misteriosa y complicada hospitalización el pasado mes de abril. Después de recibir una abrumadora ovación del público al subir al escenario, Foxx no pudo evitar hablar sobre el problema de salud que sufrió la pasada primavera. "Sabes, es una locura, no podía hacer esto hace seis meses; en realidad no podía caminar", comenzó Foxx su discurso de doce minutos de duración, en el que tuvo que hacer una pausa para recuperar el aliento.
"No soy un clon, no soy un clon. Conozco a mucha gente que ha dicho que fui clonado", bromeó. "Quiero dar las gracias a todos. He pasado por algo, he pasado por algunas cosas", continuó sin querer dar más detalles. "Ahora valoro cada minuto; es diferente", compartió. "No le desearía lo que pasé ni a mi peor enemigo porque es difícil cuando casi termina... cuando ves el túnel". "Vi el túnel, no vi la luz", puntualiza. "Tengo un nuevo respeto por la vida. Tengo un nuevo respeto por mi arte. Vi tantas películas y escuché tantas canciones tratando de pasar el tiempo. No renuncies a tu arte, hombre, no te rindas", quiso añadir en su discurso.
-Los detalles del grave problema de salud de Jamie Foxx
A mediados del mes de abril Foxx tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital en Atlanta, mientras estaba rodando la película Back in Action junto a Cameron Díaz. Todo lo referente a su hospitalización y el posterior diagnóstico ha sido un misterio. Mientras la leyenda del boxeo Mike Tyson afirmó que el actor había sufrido un derrame cerebral, la familia de la estrella no habló del motivo de su ingreso, que le llevó a permanecer hasta un mes hospitalizado. Un mes después del colapso, el protagonista de Django desencadenado recibió el alta en Atlanta y fue trasladado a un nuevo centro hospitalario en Chicago, especializado en lesiones cerebrales, para proseguir la recuperación.
Este verano Foxx reapareció sonriente y con signos de plena recuperación en un yate en Chicago y entonces habló de sus problemas de salud, que había sido como ir al infierno y haber regresado, y dio las gracias a su hermana Deidra y a su hija Corrine Foxx por salvarle la vida. "Pasé por algo que pensé que nunca pasaría", dijo Foxx, que explicó el motivo de no haber reaparecido antes. "Sé que mucha gente estaba esperando o queriendo escuchar una última hora, pero para ser honesto contigo, no quería que me vieran así", dijo con lágrimas en los ojos. "Quiero que me vean riendo, pasándolo bien, de fiesta, contando un chiste, haciendo una película o un programa de televisión. No quería que me vieran con tubos saliendo de mí y tratando de averiguar si iba a salir adelante", reconoció. Más de siete meses después de su ingreso, el actor ha dado signos de recuperación y ha aceptado un premio como un hombre nuevo y con otra actitud ante la vida: disfrutar de cada minuto como si fuera el último.