La nueva línea de productos para el cuidado de la piel de Kim Kardashian no es apta para los débiles

Kim Kardashian en su oficina de Calabasas, California, el 19 de mayo de 2022. (Chantal Anderson/The New York Times)
Kim Kardashian en su oficina de Calabasas, California, el 19 de mayo de 2022. (Chantal Anderson/The New York Times)

CALABASAS, California — “Yo me animo a probar cualquier cosa”, afirmó Kim Kardashian el mes pasado durante una entrevista desde su enorme oficina en la ciudad. Ahí tiene un estudio fotográfico, una sala de exposiciones, un salón de rodaje, oficinas para sus empleados, su oficina personal, un salón de glamur (donde se prepara para las sesiones fotográficas), un salón de glamur para modelos (donde los modelos se preparan para las sesiones fotográficas), una sala de conferencias, una sala de cine y más. “Si me dijeras que literalmente tengo que comer popó todos los días para verme más joven, quizá lo haría. Es muy probable”.

Hasta el momento, el excremento no es uno de los ingredientes en la nueva línea de productos para el cuidado de la piel de Kardashian.

Sin embargo, la vitamina C, el ácido hialurónico, la niacinamida, el ácido glicólico y láctico, la manteca de karité y el escualeno son de los ingredientes más tradicionales que encontrarás en SKKN by Kim, que se lanzará al mercado a finales de este mes. El cuidado de la piel es una prioridad para Kardashian, quien tiene 41 años (ya había vendido fragancias y maquillaje a través de KKW Beauty y KKW Fragrance, marcas que ya están descontinuadas). Sus primeros nueve productos son un reflejo de su propio régimen de belleza, el cual es bastante riguroso.

¿Por qué la mujer que trajo al mundo el concepto del contorneado quiere empezar con el cuidado de la piel en lugar de, pues, el contorneado, en su regreso a la industria cosmética? La respuesta es sencilla: Kardashian quiere presumir el tono y la textura de su propia piel. Cuando se contempla de cerca, es realmente asombrosa, radiante, hidratada y lisa.

“Solo quería ser fiel a lo que uso, aunque todos me dijeran que es agobiante”, dijo Kardashian, quien vestía ropa deportiva negra de Balenciaga y sandalias de goma Yeezy con todo el glamur del mundo, con maquillaje listo para las cámaras y su cabello rubio platino alisado que le llega hasta la cintura.

A pesar de no haber adoptado en su momento los regímenes de chorrocientos pasos popularizados por las marcas coreanas de productos de cuidado de la piel, la rutina que vende Kardashian es extensa. Su sistema de nueve pasos “tal vez asuste a algunas personas”, advirtió. “Por eso estoy aquí, para guiarles paso por paso y demostrar por qué todos los pasos son necesarios”. El único que podría omitirse es el de los exfoliantes (hay dos), pues no es necesario usarlos todos los días, dependiendo de tu tipo de piel.

Los productos SKKN cuestan bastante más que la mayoría de los productos para el cuidado de la piel, ya sean creados o no por celebridades. (Un sérum de ácido hialurónico y un aceite facial nocturno cuestan 90 y 95 dólares). En conjunto, los nueve productos —limpiador facial, tónico, exfoliante, sérum de ácido hialurónico, sérum de vitamina C, crema facial, crema para ojos, gotas de aceite y aceite nocturno— suman un total de 630 dólares. Es un precio que podría estar fuera del alcance de muchos de sus clientes potenciales y sus 313 millones de seguidores en Instagram. (Todos los productos se pueden recargar, y los envases rellenables cuestan un 15 por ciento menos que el empaque original).

Kim Kardashian en su oficina de Calabasas, California, el 19 de mayo de 2022. (Chantal Anderson/The New York Times)
Kim Kardashian en su oficina de Calabasas, California, el 19 de mayo de 2022. (Chantal Anderson/The New York Times)

A Kardashian no le preocupa demasiado que la gente no pueda costear su rutina de cuidado de la piel.

“Sin duda son productos de prestigio y creo que eso era necesario para que tuvieran los tipos de ingredientes que para mí son imprescindibles”, comentó. “No es por comparar ni nada, pero los productos equivalentes que yo usaba eran mucho más costosos. Traté de conseguir la mayor calidad al mejor precio posible, sobre todo el sérum de vitamina C”.

‘No solo es parte de mi trabajo, es quién soy’.

La apariencia de Kardashian ha sido una fuente de fascinación desde hace décadas enfocada en su físico. Las fluctuaciones perpetuas y la evolución de su peso, sus proporciones exageradas, su trasero, su cintura, sus labios, sus pómulos, su cabello y su maquillaje son la clave para retener la atención de la audiencia.

“Hay muchas personas que quieren pretender que no les importa cómo se ven”, señaló. “Yo no pretendo que me resulta fácil o que todo es natural. Simplemente no es posible que te levantes y te pongas cualquier cosa. Te despiertas y usas ingredientes. Los faciales de bioestimulación con plasma rico en plaquetas (PRP), los faciales con células madre, las terapias láser, todo eso representa un gran trabajo”.

Todo el negocio de Kardashian se basa en la imagen y ella se lo toma muy en serio. Se calcula que su patrimonio neto es de más de 1000 millones de dólares y está basado en su cuerpo, su rostro y su “look”. Todo lo demás es una extensión de eso. Su apariencia física y su disposición a manipularla son los cimientos de su carrera, ya sea que intente bajar de peso para usar un vestido específico o pase 18 horas tiñendo su cabello color platino.

Desde hace años ha sido noticia por probar tratamientos extremos de belleza. ¿Recuerdan cuando publicó una selfi de su rostro ensangrentado después de someterse un “facial vampiro”?

A Kardashian a menudo se le atribuye el crédito de cambiar los estándares modernos de belleza y eso no sucedió debido a su alianza con una crema o un sérum en particular. No es dermatóloga ni esteticista. Entonces, ¿por qué la gente debería tomar en serio sus productos de cuidado de la piel?

“Creo que la credibilidad viene de saber que recibí los mejores consejos y las mejores fórmulas de algunas de las personas que más respeto”, respondió Kardashian. Con Skims, relató que quería encontrar soluciones de ropa moldeadora que, a su parecer, hacían falta en el mercado. Para su línea de productos de cuidado de la piel, buscaba soluciones para los problemas cotidianos de la piel.

Con el paso de los años, Kardashian comentó que ha probado casi todos los productos y tratamientos de lujo para el cuidado de la piel que hay en el pasillo de cosméticos (investigación y desarrollo que integró en SKKN). Para desarrollar sus fórmulas, trabajó con Joanna Czech, esteticista y facialista de los famosos que tiene su propia línea de productos para el cuidado de la piel.

Czech, que cuenta con más de 35 años de experiencia, asesoró a Kardashian en cuanto al vocabulario del cuidado de la piel (no utilizan el término “antienvejecimiento”); le enseñó los diferentes tamaños de moléculas y versiones de vitamina C; y le ayudó a reformular sus productos para cumplir con las normas de productos de cuidado de la piel de la Unión Europea.

“No hicimos tres pruebas de producto… hicimos 23”, afirmó Czech, e indicó que obtener la consistencia óptima para cada sérum, sobre todo para los aceites, fue lo más desafiante de todo el proceso.

Czech, que dijo que los productos fueron “creados desde cero”, agregó: “La gente no espera más de una celebridad que del aceite de oliva”.

No obstante, a Kardashian sigue sin importarle la percepción que tiene el público de las líneas de productos de celebridades e influentes. Basta con ver lo que logró con Skims, un gigante de la ropa moldeadora que, hasta enero de este año, está valuado en la suma impresionante de 3200 millones de dólares.

Resplandecerás como nunca

SKKN by Kim es el emprendimiento más ambicioso de Kardashian en la industria cosmética, pero no es para nada el primero. Sus primeras líneas de cosméticos fueron emprendimientos dispares y no todos tuvieron éxito. Estuvieron KKW Fragrance, una línea de perfumes estilo kitsch con temática de emojis; y KKW Beauty, una colección de maquillaje.

Cerró ambas: KKW Fragrance en abril y KKW Beauty el verano pasado. El conglomerado francés de cosméticos Coty, que tenía una inversión minoritaria en KKW Beauty, ayudará a ampliar el alcance de SKKN by Kim a nivel internacional y será un recurso para cosas como el embalaje, mencionó Kardashian.

Vanessa Reggiardo, directora general de la marca SKKN en Coty, declaró que se hicieron pruebas exhaustivas de la línea con clientes y que está “formulada para atender todos los tipos, tonos y texturas de piel en cada etapa de madurez, tanto para damas como para caballeros”.

Kardashian planea consolidar y, con el tiempo, lanzar sus otros productos de belleza y estilo de vida bajo una sola marca SKKN by Kim. Sus nuevos productos de cuidado de la piel solo se podrán adquirir a través de un nuevo sitio web, skknbykim.com. El próximo año, SKKN by Kim estará disponible en las tiendas de un importante minorista de cosméticos, según afirmó (aún se están ultimando los detalles).

Por ahora, los posibles clientes tendrán que valerse del contenido y los tutoriales en línea antes de pedir un aceite facial de 95 dólares, que, cuando se mezcla con la crema facial, tu piel “resplandecerá como nunca”, sostuvo Kardashian.

Quiere demostrarlo.

Luego de revisar muestras de productos SKKN, Kardashian fue al baño a lavarse la cara y quitarse el maquillaje de una sesión fotográfica que venía de hacer. Recogió su cabello de sirena con un enorme broche de pelo y realizó una versión resumida de su rutina de noche para el cuidado de la piel. Limpió y exfolió su rostro para luego darse palmaditas con una mezcla de aceite con brillo y crema facial.

“Siempre bajo por mi pecho hasta mis pezones, siempre llego hasta los pezones”, puntualizó Kardashian, mientras masajeaba la emulsión en su cuello, su escote y la parte superior de sus senos. Pronto veremos una ola de tutoriales en TikTok, con influentes que adaptarán su propio régimen de cuidado de la piel “hasta los pezones” tal como lo hace Kardashian.

¿Ejercer ese tipo de influencia se vuelve una cruz en algún momento?

Cuando le preguntamos sobre la controversia que creó al perder peso para que le quedara el vestido que vistió a la Gala del Met, el mismo atuendo fino y brillante que usó Marilyn Monroe en 1962 cuando le cantó “Feliz cumpleaños” al presidente John F. Kennedy, Kardashian respondió: “Yo solo pensé: ‘Bueno, Christian Bale puede hacerlo para interpretar un papel en una película y es aceptable’. Incluso Renée Zellweger subió de peso para un papel. Para mí, todo es igual. No era mi intención decir: ‘Oigan todos, vayan a perder esta misma cantidad de peso en tan poco tiempo como puedan’”.

En su opinión, era una cuestión de compromiso, como un boxeador que necesita llegar a cierto peso para una pelea. Perdió unos 7,2 kilogramos en un mes, con ayuda de una dieta, un traje sauna y dos salidas a correr al día. “No hice nada que no fuera saludable”, afirmó.

¿Y si no hubiera llegado al peso necesario para la gala?

“Simplemente no habría podido ir, y no habría importado”, comentó. “Para mí, solo era importante alcanzar esa meta”.

Esa fue tan solo una escena más en el papel más aclamado que Kardashian ha interpretado en su vida: el de ella misma. Y si hay algo que Kardashian les ha demostrado a sus seguidores con el paso de los años es que nunca se rinde hasta cumplir una meta.

© 2022 The New York Times Company