‘La Güereja’ y su desafío más duro que nada tiene que ver con la actuación

María Elena Saldaña
María Elena Saldaña

POR Alejandro Feregrino-. Cuando María Elena Saldaña confirmó que su hija había nacido con Síndrome de Down supo que estaba ante el desafío más complicado de su vida.

La actriz, famosa por su personaje de niña en programas de televisión como ‘La Güereja y algo más’ y ‘Güereja de mi vida’ nació con talla baja, pero –contrario a lo que muchos piensan– eso nunca determinó su vida.

La Güereja y Benito Castro
La Güereja y Benito Castro

De hecho, su madre la trató con la misma disciplina y le exigió los mismos resultados que al resto de sus hermanos e incluso más que ellos pues era la mayor de la familia.

En entrevista con Yordi Rosado reveló que durante su infancia se sometió a distintos estudios y tratamientos para descubrir qué era lo que provocaba su baja estatura, hasta que le pidió a sus padres no hacerlo más.

“Un día le dije a mi papá que ya, que ya no quería, tenía nueve años y le dije a mi papá: ‘ya ahí muere’, además vivíamos en Veracruz y me tenían que internar en el Hospital de La Raza.

“Los estudios me los iban a hacer en el Centro Médico y que me iban a llevar en una ambulancia (…) convencí a mi papá de que ya no quería ese guateque’”.

"Solo era un poco más pequeña"

Desde que era pequeña, sus padres se impusieron el desafío de criarla bajo los mismos parámetros que al resto de sus hermanos y decidieron que no harían ninguna diferencia con ella.

“Nunca lo hicieron, que yo sepa, jamás. Entonces, mi vida transcurría como la vida de cualquiera. Me pedían lo mismo: buenas calificaciones, acuéstate temprano, lava los trastes, cuida a tus hermanos porque eres la mayor, tienes que dar el ejemplo porque eres la mayor”.

“Sólo era un poco más pequeña. Quizá no alcanzaba el lavatrastes, quizá no alcanzaba la estufa y cuando tenía que hacer el ponche de Navidad, tenía que poner una silla y subirme, porque además éramos seis hijos y con mamá y papá éramos ocho, y la olla del ponche era la de los tamales”, dijo hace tiempo durante una conferencia en la que compartió su testimonio de vida.

El camino de la maternidad

El verdadero desafío de su vida llegó cuando se convirtió en mamá de una pequeña con Trisomía 21, el trastorno cromosómico conocido como ‘Síndrome de Down’.

“Me fui a los cuneros, les pedí que me dieran a mi nena. Llegué a los cuneros y les pedí a mi niña y la abracé. Ahora yo vivía el desafío que habían vivido mis padres a la hora que vieron a su hija en un caso especial, ahora era yo quien lo vivía, era yo quien tenía que responder a este desafío".

A partir de ese momento ‘La Güereja’ se dedicó a estudiar todo lo posible para comprender el Síndrome de Down y se dedicó a sacar adelante a su hija.

“Se vino un trabajar y trabajar, investigar y estudiar, porque ahora era yo quien no podía poner la situación de mi hija en manos de alguien más”, dijo en aquella conferencia.

Actualmente Belén tiene 23 años y es capaz de valerse por sí misma e incluso ayudarle cuando lo ha necesitado.

“Hoy por hoy mi hija estudió algo de cocina en escuelas normales, con chefs. Hace unos meses, yo creo que ya como un año, me dio un vértigo ‘bruto’ y la que me subía de comer era Belén y cuando me tenían que llevar el cómodo me lo llevaba Belén, es la que hacía de comer”.

Finalmente, logró cumplir la promesa que le hizo a Belén el día que nació y la tuvo en brazos por primera vez: “Le dije que confiara en mí, que íbamos a hacer todo lo posible porque todo estuviera bien”.

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