¿Por qué es una mala idea el cumpleaños secreto del Rey Felipe VI?

El Rey Felipe VI. EFE/Kiko Huesca
El Rey Felipe VI. EFE/Kiko Huesca

La semana que viene, el miércoles 30 de enero es el cumpleaños del Rey Felipe VI. El hijo de don Juan Carlos cumplirá 51 años. Y, una vez más, mantienen todo lo relacionado con la celebración de su aniversario en completo secreto. Sabemos que ese día no hay programado ningún acto oficial ni para el Rey ni para la Reina. Felipe y Letizia tendrán totalmente libre el día 30 de enero. Así aprovecharán para celebrarlo como quieran y sin que nadie se entere.

El cumpleaños del Rey será un día libre y secreto, insisto. Pero, ¿por qué?. ¿A qué viene siempre tanto secretismo? Luego se habla de aperturismo y cercanía de los Reyes hacia los ciudadanos. Sin embargo, algo tan simple como la celebración de un cumpleaños se convierte casi en “secreto de Estado”.

El Rey Felipe VI y la reina Letizia, durante la celebración de la Pascua Militar en el Palacio Real. EFE/Archivo
El Rey Felipe VI y la reina Letizia, durante la celebración de la Pascua Militar en el Palacio Real. EFE/Archivo

Venimos estos días de, prácticamente, convertir en un héroe al Príncipe Guillermo de Inglaterra por hacer todo lo contrario. Todos han felicitado al marido de Kate Middleton por descubrir voluntariamente uno de sus secretos más íntimos. El Príncipe Guillermo sorprendió a al mundo entero hablando en el Foro Económico Mundial de Davos de Suiza sobre sus problemas mentales. El Duque de Cambridge explicó con toda naturalidad que padeció problemas de salud mental y estrés postraumático, tras su actuación como piloto de ambulancias aéreas de la Real Fuerza Aérea Británica.

La intervención de Guillermo fue muy sincera y directa, nada de secretismos. Y con esta confesión, además de ayudar a que las personas que han padecido, o que padecen, enfermedades, o traumas, mentales sientan su situación más normalizada y vean que se puede hablar de ello con naturalidad, el Príncipe Guillermo ha logrado con su confesión convertirse en alguien mucho más cercano. Muchísimo más.

EFE/MATT PORTEOUS/ PA
EFE/MATT PORTEOUS/ PA

Ver cómo el heredero al Trono británico no tiene inconveniente en hablar de su salud mental y el Rey de España no quiere que se sepa qué va a hacer el día de su cumpleaños choca, la verdad. Y a primera vista parece un gran error. Además, frente al secretismo siempre surgen las especulaciones. Y las especulaciones pueden llegar a ser nocivas. Y hasta muy nocivas. Ya hay quinielas sobre el lugar donde el Rey y la Reina Letizia van a celebrar el cumpleaños del monarca. Ya hay quien dice que no van a invitar a la celebración al Rey Juan Carlos, así como Felipe no acudió a la conmemoración del 81 cumpleaños de su padre. Ya se vuelve a elucubrar sobre relaciones, o malas relaciones, familiares. Y ya vuelve a salir el nombre de la Reina Letizia como la principal “sospechosa” de ser quién promover este secretismo exagerado, para proteger la vida privada de su familia.

El Rey de España consigue un efecto tan potente al ocultar la celebración de su cumpleaños como el que ha logrado el del heredero al Trono de Inglaterra al hablar de sus problemas psicológicos, pero con un resultado absolutamente contrario: Guillermo obtiene la cercanía de los ciudadanos y el aplauso, Felipe se lleva las intrigas y la distancia. ¿Error de cálculo? No parece una buena idea encerrar en el secretismo un simple cumpleaños. Pero, estamos a tiempo de cambiar de estrategia. Estamos a tiempo de dejar para lo oculto, lo hermético y lo secreto, cuestiones de mayor calado que un aniversario y su celebración. Estamos a tiempo, o quizá no.