Laura Zapata, la otra cara de una villana de telenovelas
Se convirtió en una de las villanas más recordadas de las telenovelas mexicanas, pero Laura Zapata no se conformó con ser exitosa como actriz, por lo que decidió abrirse paso en otros campos que le interesan, como la poesía.
La actriz iniciará este 2020 con una segunda publicación de poemas que presentará en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México. Así lo hizo también en julio de 2018, cuando lanzó su primer libro 'El alma que se asoma', con el que desnudó su alma.
"Estamos vivos, somos seres humanos, todos tenemos las mismas emociones, los mismos deseos, las mismas ansias de vivir. Sexo pueden tener hasta los perritos en la calle, pero el erotismo es diferente", comentó el día de su debut como escritora en 2018, año en el que llevó su primer libro al 2do Encuentro de Literatura Hispanoamericana, en París, Francia.
La actriz decidió volver a abrir su corazón a través de sus palabras, y considera que su segundo libro, ‘Pensamiento ventana’ contiene "poemas un poco más fuertes en comparación con el primer libro, y tengo más material para continuar nutriendo otras páginas", dijo antes de finalizar el 2019.
Para Laura no resulta una dificultad expresarse al escribir, pues lo hace desde los 9 años. "Yo tengo 6 o 7 años trabajando para 'Leo, luego existo', este programa de Bellas Artes tan importante. Somos como el vínculo entre los escritores, los poetas, los dramaturgos y el público que no está acostumbrado a leer. Entonces alguien de Bellas Artes conoció mi obra y me dijo que tenía que editar, pero qué temor exponer tu interior", comentó en 2018 en una entrevista al programa 'Intrusos'.
El acercamiento de Laura Zapata con la escritura resulta novedad para quienes la han seguido solo como actriz, pero lo cierto es que siempre ha mostrado interés por la palabra escrita. De hecho, en 2016 participó en la conmemoración del 30 aniversario luctuoso de Juan Rulfo, y junto a Arturo Rosales, dio voz a algunos de los personajes del autor en la lectura dramatizada de fragmentos de sus obras.
Zapata también ha probado que con su voz puede mover fibras de su público, pues paralelo a su trabajo como actriz, ha tenido presentaciones como cantante de música vernácula desde hace una década.
En México no ha tenido tanta repercusión, pero así como su primer libro de poesía, su estilo particular para cantar también la ha llevado a París. Allá le cantó a la Virgen de Guadalupe en la Catedral de Notre Dame junto al mariachi El Sol, como parte de las celebraciones para la considerada Emperatriz de América.
Las redes sociales también se han convertido en un escenario que Zapata utiliza para expresarse, y en 2019 destacó por calificarlo como "el año de la muerte", al hacer una crítica de la inseguridad en México, y al hacer un llamado al presidente Andrés Manuel López Obrador para "que se ponga a trabajar, que deje las mañaneras y se ponga a trabajar".
De hecho, en su cuenta de Twitter editó su perfil para que agregar junto a su nombre la frase "Fuera Chairos", en referencia a los detractores que la atacan en la red social. Laura dice que no le molesta que le digan "fifí", pero sí que se "nos engañe y diga que todos estamos muy felices y todo está muy bien cuando no es cierto, eso no lo aguanto porque no soy tonta".
La personalidad de Zapata la hace resaltar, pero desde que debutó en la década de los 70, la actuación ha sido la mejor forma en la que las audiencias masivas la han conocido, por lo que Zapata aprovecha cuando se le ofrece regresar a la pantalla chica. Así lo hará este 2020, pues aunque no puede dar muchos detalles, ya se sabe que participará en una serie con una importante empresa mundial.
"No puedo decir qué empresa por cuestión de confidencialidad, pero la serie que me han propuesto es una historia novedosa y muy original, que me saca de mi zona de confort”, adelantó esta semana a varios medios de comunicación.