Lily Allen hubiera preferido besar a Kiell Smith-Bynoe sin un coordinador de intimidad de por medio

Los coordinadores de intimidad son una profesión que surgió a la sombra de movimientos como Me Too y Time's Up, mientras Hollywood revisaba las dinámicas que había considerado normales durante demasiado tiempo. Su principal función consiste en servir como enlace entre el director y sus actores a la hora de preparar ciertas escenas que impliquen desnudez o que coloquen los intérpretes en una situación vulnerable.

Como es normal en la actualidad, Lily Allen contó con los servicios de uno en el plató de su serie de televisión 'Dreamland' porque protagoniza más de un encuentro rodó tórrido con su coprotagonista Kiell Smith-Bynoe, pero admitió que no era fan de él.

"No sé lo útil que me pareció personalmente... Hubiera preferido lanzarme al agua y dejar que sucediera", ha explicado en el podcast que graba con su amiga Miquita Oliver.

"Pero lo que me resultaba difícil es que tenías que pedir permiso a la persona, preguntarle si le parecía bien que pusieras la mano en algún sitio antes de hacerlo, y yo no era capaz".

A la cantante y actriz de 39 años le parecía especialmente incómodo tener que negociar con su compañero cada paso. Ella hubiera preferido pasar directamente a la acción y empezar a besuquearse para dejarse llevar. La alternativa, que fue coreografiar todos sus movimientos, le resultó muy extraña.

La opinión de Lily difiere de la de muchas actrices, que han visto con buenos ojos la presencia cada vez más frecuente de los coordinadores de intimidad en el set de rodaje. La actriz de 'West Side Story' Rachel Zegler aseguró que el primero que trabajó con ella consiguió que se sintiera más cómoda al servir de guía a una recién llegada a la industria como ella. Emma Thompson nunca da crédito a los testimonios de otros actores cuando aseguran que se sintieron muy cómodos rodando una escena íntima porque, como sabe bien por su propia experiencia, nadie puede relajarse si está desnudo en presencia de cámaras y con un grupo de trabajadores, que por norma general suelen ser hombre, fijándose en cada pequeño movimiento.