Letizia hizo del rojo su elección vencedora

Ya ha pasado un año desde aquel 12 de octubre en el que la reina Letizia sorprendió al mundo entero con su estreno más inesperado: un vestido de bailarina firmado por Felipe Varela. En estos 365 días, todo ha cambiado por la crisis sanitaria, algo que ha llegado a afectar incluso a su armario. 2020 ha sido para ella la mejor ocasión para reciclar algunas de sus prendas predilectas e incluso de marcar tendencia sin fijarse en las novedades de la pasarela. De ahí que el look que escogiera para la Fiesta Nacional causara tanta expectación. A diferencia del habitual desfile multitudinario que tiene lugar en esta fecha, un acto mucho más íntimo en el Palacio Real ha sustituido el clásico evento en la agenda de los reyes. Y, siguiendo fiel a su estrategia como en los últimos compromisos oficiales, ha apostado por recurrir a su vestidor para su nuevo look del Día de la Hispanidad.

reina-letizia-look
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Esa es una de las primeras razones por las que la Reina se habría asegurado el acierto, ya que recuperó una de las mezclas que más aplausos ha recibido en estos últimos años. Fue en su viaje oficial a Japón, que tuvo lugar en 2017, cuando estrenó uno de los conjuntos que volvería a repetir siempre y cuando se tratara de citas de altura, como la de este lunes. No es el único motivo por el que destaca esta composición. Haciendo un guiño al que es uno de los colores del país, así como uno de sus preferidos cuando se trata de acudir a citas especiales, la Reina hizo del rojo su elección vencedora. El triunfo de estilo llegó por partida triple en cuento identificamos las prendas que había reciclado: una combinación obra de Felipe Varela, uno de sus modistas de cabecera.

En su look se combinaba un vestido granate con un abrigo fino -que tenía cierto parecido con las prendas orientales como los kimonos- en una tonalidad más viva del cálido matiz. Una prenda que se cerraba por delante del pecho y que conecta con los chaquetones a los que tanto recurren las royals británicas cuando se trata de actos oficiales en los meses de entretiempo, una estrategia infalible. Como toque final, un bolso de mano con forma de sobre de la misma firma y unos stilettos de charol, creación de Lodi, fueron los encargados de sincronizarse con el tono más oscuro dando lugar a un color block de análogos que también le vimos lucir, hace tan solo una semana, a Máxima de Holanda.