Yahoo Estilo Lucero Mijares, Eduardo Capetillo Jr. y Mía: la herencia que quiere ganarle a la experiencia
Los jóvenes artistas mexicanos se enfrentan con sus famosos padres en el concurso 'Juego de voces', conducido por Angélica Vale
Celebridades como Manuel Mijares, Eduardo Capetillo y Erik Rubín recogerán parte de los frutos del trabajo que han hecho como padres con Lucero Mijares, Eduardo Capetillo Jr. y Mía en el concurso de canto Juego de voces, que conduce Angélica Vale y se estrenará el 14 de abril en el Canal de las Estrellas.
En el caso de los Capetillo hay un interés particular de Eduardo por participar junto a su vástago debido a que el chico representa a la tercera generación de la dinastía que inició Manuel Capetillo y continuaron Guillermo, Manuel y el propio Lalo. El más joven de ese linaje empieza a abrirse puertas en el mundo artístico para desenvolverse en la actuación y la música.
Después de participar en la serie de Netflix Donde hubo fuego en 2022 y en la edición 2023 del reality MasterChef de TV Azteca, Capetillo Jr. se dio cuenta de que es momento de definirse como actor, algo que no tenía previsto hace tres años cuando su intención era enfocarse de lleno al ámbito musical como cantante. Para este proceso tiene en su papá a un guía que primero lo formó como persona y luego le dio herramientas para enfrentar las vicisitudes de la fama, tales como las críticas y comparaciones que recibirá por el apellido.
"Cuando hay cosas complejas, como juicios, se siente la mala onda. Ahí es cuando volteo y les digo a mis chavos 'welcome to the real world', bienvenido. Tienen dos opciones: o te alejas del medio artístico, o lo tomas como debe ser, con la perspectiva de lo que es", comentó en conferencia de prensa a pregunta expresa sobre qué habla con su hijo respecto a la relación con la prensa.
A Capetillo le importa, antes que nada, que su hijo sea una persona recta, respetuosa y centrada. Junto a Bibi Gaytán, su esposa y madre de Eduardo Jr., se han esforzado en que llegue a esta instancia de su carrera en inicio para que no se olvide que la humanidad en su persona es un eje rector.
"Pero lejos de una enseñanza profesional, pongo en el centro al ser humano. Trato de darle a mis hijos esa enseñanza de ser humano. Cuando ellos se comportan bien, a mí me da mucho gusto y me llena de orgullo cuando me dicen 'oye, qué chavo tan educado', porque entonces creo que hemos hecho algo bueno. Esa es una responsabilidad de nosotros los padres".
Bibi Gaytán y Eduardo Capetillo arrojan a su primogénito al ruedo con las indicaciones de entender el respeto al otro, incluido el público, y no guardar resentimiento a quien piense o se exprese distinto con relación a su desempeño.
En contraste, Mijares ya pasó por esa etapa que apenas comienza para los Capetillo. En compañía de Lucero, a pesar de estar separados, trabajaron en conjunto para que Lucerito empezara a labrar su ruta profesional con determinación, confianza en sí misma y compromiso riguroso con el escenario y el público.
En plan ascendente, Lucero Mijares ha plantado cara a los comentarios malintencionados sobre su peso o las comparaciones con su mamá. Sin embargo, toda vez que ya es tratada como una artista de su edad, le molesta que su carrera y la de otras cantantes de su generación sean motivo de competencia para la prensa. En ese sentido, sus padres no intervienen porque les permiten adquirir madurez para actuar ante esas situaciones.
Mijares está en modo de apoyar a su hija dentro de la búsqueda de su estilo, en el marco de acentuar su sello personal. Contribuye cooperando con el ingenio de Lucerito. Esa convivencia le concede la oportunidad de sorprenderse con ella y de admirarla. Por ejemplo, en Juego de voces, se maravilló con un reto de freestyle entre los dos.
Lucero Mijares hoy olvidó que es humana 🤍 pic.twitter.com/T5FoX2r05T
— Rubí ✨🩷 (@Rubii_Zerpa) April 8, 2024
"En el duelo de los capitanes me quito el apellido, ya no soy Mijares. No importa que seas el soldado del amor, te juro que hoy te haré sentir terror. Te dejaré desorientado. Mejor quédate sentado y ve cómo la herencia le gana a la experiencia", cantó en su rap.
Independientemente de que se tratara de una competencia para entretener al público, Mijares no pudo desprenderse del amor paternal. Durante el número musical de su hija quedó cautivado. Boquiabierto y con la mirada depositada en ella, el cantante fue el vivo retrato de la admiración que un papá famoso puede sentir por una heredera que posee un talento inagotable por explorar.
Otra figura paterna que destaca en el reality es Erik Rubín. Tal como la hecho desde que Mía le hizo saber que quería forjarse a nivel profesional como cantautora, él se mantiene a su lado. Al igual que Mijares y Lucero Mijares, ellos han venido colaborando desde tiempo atrás en rubros como producción, composición y proyección de imagen; Rubín fue quien respaldó la idea de que dejara de usar los apellidos Rubín Legarreta para que se impulse por sí sola.
Contrario a sus colegas, Erik llega a este programa con el objetivo de desmarcarse un poco del rol de músico con que se le asocia a Mía. Quiere abrirse, mostrarse vulnerable en su condición de papá haciendo ver que la artista con su sangre es a final de cuentas su pequeña: “Nos sacan de nuestra área de confort para probar cosas nuevas y cosas diferentes”.
En 'Juego de voces' también participan Alicia Villarreal e Isabel Lascuráin con sus hijos Melenie y Joss Álvarez.
