Luis Enrique y su discreta vida familiar más allá del terreno de juego
Si por algo es conocido el seleccionador nacional Luis Enrique es por su logros sobre el terreno de juego tanto como jugador como entrenador. El exfutbolista del Barça, el Real Madrid y el Sporting de Gijón sabe bien lo que es un Mundial, una Eurocopa o unos Juegos Olímpicos. Ahora lidera a la Roja en la Eurocopa 2020 y lo hace con una lista de 24 jugadores convocados de los cuales 11 de ellos debutarán esta noche en el estadio de La Cartuja en Sevilla. Un equipo mucho más joven y con menos experiencia que en anteriores convocatorias, pero entregado y con total valentía y arrojo. No estarán los dos únicos futbolistas con más de 100 partidos a sus espaldas, comentada ha sido la ausencia de Sergio Ramos en la Eurocopa y Sergio Busquets ha tenido que ser apartado de la convocatoria por covid.
Lucho, como le llaman los jugadores, ha disfrutado de unos días en familia antes del debut de La Roja, porque si hay algo importante para él son sus seres queridos. No podemos olvidar cuando Luis Enrique abandonó su cargo por "motivos familiares de fuerza mayor" y con el tiempo se supo que su hija Xana, de 9 años, había fallecido a consecuencia de un osteosarcoma, un tumor oseo. "Te echaremos de menos, pero te recordaremos cada día de nuestras vidas con la esperanza de que algún día nos volvamos a encontrar. Serás la estrella que guíe a nuestra familia”, rezaba el comunicado de la familia Martínez Cullell al hacer pública la muerte de la pequeña que conmocionó a todo el país.
Luis Enrique lleva casado más de dos décadas con Elena Cullell, barcelonesa licenciada en económicas y azafata de vuelo. La pareja se dio el sí, quiero' el 27 de diciembre de 1997 en la basílica barcelonesa de Santa María del Mar. La pareja tuvo tres hijos, Pacho, de 22 años, Sira, de 21, y Xana, la benjamina de la familia que tendría ahora once años de no haber sido por su triste fallecimiento.
Tres meses después de sufrir el golpe más duro de su vida, el técnico regresaba como entrenador de la selección española y sus palabras conmovían a la afición: "Tenía ganas de volver a recuperar la vida y volver a hacer lo que más me gusta, relacionarme con el fútbol, y demostrar a mi familia que la vida continúa". Entonces se mostró lleno de energía para afrontar los retos profesionales que tiene por delante, entre los que destacan la Eurocopa de 2020 y los Juegos Olímpicos de Tokio, destacando el gran apoyo con el que cuenta a su alrededor. "Mi familia me respalda totalmente. En esto de la muerte es algo que todos hemos de afrontar, aunque no en el orden que me ha tocado a mí. Hay muy poca información, mucho tabú en torno a esto y es una pena porque es bueno saber cómo afrontar a las personas que pasan por esto... Me siento muy orgulloso de la fortaleza y la entereza de todos ellos". En su esposa, Elena, y sus dos hijos, Pacho y Sira encontró el mayor refugio para recuperarse del fallecimiento de su hija.
El seleccionador, que es un apasionado del fútbol y del ciclismo, disfrutaba días antes del comienzo de la Eurocopa viendo a su hija Sira que es una amazona experta. La joven, que es campeona de España de saltos en la categoría de jóvenes jinetes, compitió en el Concurso de Saltos Internacional en el Club de Campo Villa de Madrid. La joven estudia actualmente Administración y Dirección de Empresas a distancia en la Universitat Oberta de Catalunya, mientras que su hijo Pacho trabaja como auditor junior en PriceWaterhouseCoopers.