Margarita Vargas actualiza el vestido con falso corsé que adelantó Inés Domecq

Con la ayuda de la estilista Cristina Reyes, Margarita Vargas consigue cautivarnos con sus estilismos. Echando la vista atrás así consiguió durante su maratón de estilo en San Petersburgo en octubre de 2021 con motivo de la boda de Jorge Romanov, hijo de la gran duquesa María Vladimirovna de Rusia y el príncipe Francisco Guillermo de Prusia, con la escritora y lobista Rebecca Bettarini. ¿Otro ejemplo? Aquel minivestido de encaje con el que el pasado mes de noviembre nos mostro su imagen más romántica, pero también atrevida. Ahora, su nuevo lookazo llega durante la III Cena Benéfica a favor de la Fundación Querer. Además, conecta con otra aristócrata que fascina con sus apuestas de invitada, Inés Domecq.

VER GALERÍA

Margarita Vargas
Margarita Vargas

-El gran acierto de Margarita Vargas para despedirse de San Petersburgo

Durante el acto celebrado ayer a favor de Fundación Querer, Margarita Vargas lució un vestido bicolor con cuerpo efecto corsé de estilo retro, hombros fruncidos, lazos en la muñeca y falda midi de línea trapecio en corte evasé. En concreto, se trata del modelo Frida (190 euros) de The IQ Collection, sello fundado por Inés Domecq y Virginia Pozo. Hace unos meses, pudimos ver con él a la actriz Paloma Bloyd en el Festival de Málaga. La duquesa de Anjou lo combina con joyas y bolso con cadena de Bvlgari y sandalias de tiras con cinta al tobillo, de Alexandre Birman.

VER GALERÍA

Inés Domecq
Inés Domecq

-Inés Domecq, la invitada perfecta en la boda de Claudia Osborne

Este estilo de vestido bicolor con cuerpo de falso corsé rematado en picos bajo la cintura fue también el que sedujo a la propia Inés Domecq para acudir como invitada a la boda de Claudia Osborne y José Entrecanales el 2 de octubre de 2021. Sin embargo, ella optó por la versión previa que encontrábamos en la colección de The IQ Collection para Invierno 2021 y que se diferenciaba por su estampado de lunares y sus hombros arquitectónicos (modelo Loretto). Curiosamente, dos meses después, Eugenia Martínez de Irujo llevó esta misma creación con topos durante la fiesta de cumpleaños de Alejandro Sanz.