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La masacre de Texas ya tiene calificación de la crítica

La masacre de Texas ya tiene calificación de la crítica
La masacre de Texas ya tiene calificación de la crítica

Con un presupuesto limitado que apenas rozaba los US$140.000 y un guión retorcido que tenía todas las de perder contra la taquilla estadounidense puritana, La Masacre de Texas (88%) se estrenaba en 1974 sin tener idea de la revolución que ocasionaría en un género que constantemente suplica por bocanadas de aire fresco. La historia no era nada del otro mundo y sus personajes eran ciertamente unidimensionales, pero había cierto encanto en la visión hostil de los pueblos sureños americanos que su director Tobe Hooper ofrecía. Por si no fuera suficiente, en dicho proyecto se podía apreciar el génesis de un ícono atemporal del horror, Leatherface: un antagonista inspirado en el asesino serial Ed Gein que utilizaba una máscara de piel humana y su estridente motosierra para cazar a cualquier que se interpusiera en su camino o en el de su desquiciada familia. La película, aunque tuvo una retribución monetaria moderada, fue recibida con calidez entre las masas, convirtiéndose instantáneamente en un clásico de culto. Sin embargo, su legado lamentablemente no permaneció intacto, entre secuelas mediocres que caían en lo risible, reboots tibios y precuelas que destrozaban las raíces del material, la franquicia fue perdiendo el interés tanto del estudio como de su audiencia. Es así que llegamos a La masacre de Texas (40%), la última entrada de la saga a cargo de Netflix que tomará únicamente la original como base para reinventar, bajo sus propios términos, el sanguinario viaje que comenzó hace casi 50 años.

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Contextualizando un poco, La masacre de Texas (40%) funciona como una recuela, término que cada vez va tomando una forma más definida. No es del todo un remake ni tampoco una secuela, es el punto medio entre ambas: una historia fresca que parte de lo establecido por la original, retomando algunos elementos o personajes de ella pero mayormente enfocada en ser un ente individual. En este capítulo dirigido por David Blue Garcia acompañamos a Melody, su hermana Lila y sus amigos en su viaje al remoto pueblo de Harlow (Texas) para montar un negocio. Pero su sueño se convierte en una auténtica pesadilla cuando molestan sin querer a Leatherface, el desquiciado asesino en serie cuyo sangriento legado sigue acechando a los habitantes de la zona, entre ellos Sally Hardesty, la única superviviente de una masacre que tuvo lugar 47 años antes, decidida a vengarse a muerte. En la plana protagónica podemos encontrar a Sarah Yarkin, Elsie Fisher, Jacob Latimore, Nell Hudson y Olwen Fouere.

El concepto de la cinta intenta replicar un poco lo que Halloween (92%) de David Gordon Green y Scream (78%) de Matt Bettinelli-Olpin hicieron por sus franquicias, trayendo de vuelta a su final girl por excelencia para ayudar a un nuevo elenco en su lucha contra las fuerzas del mal. Pero hay que ser francos, aunque la actuación de Marilyn Burns es uno de los aspectos más notorios de la original, su personaje no es ninguna Sidney Prescott o Laurie Strode, apenas conocemos detalles de ella como para poder fraternizar de la misma forma. Con esto en mente, ¿la nueva masacre habrá hecho algo verdaderamente memorable para justificar su existencia? Las primeras críticas ya se encuentran disponibles en la web y enseguida te platicaremos a detalle qué se está diciendo de ella.

En general, todas las reseñas concuerdan en el mismo punto: como slasher palomero la película cumple todo lo esperado, salpicando nuestras pantallas de sangre con sus altas dosis de gore y un puñado de muertes creativas que nos recuerdan por qué Leatherface es una de las figuras más sádicas del género. Sin embargo, aquellos que no son adeptos a este tipo de cine encontrarán una pieza con personajes unidimensionales, una historia confusa que nunca encuentra su voz y un mensaje con comentario social que cae en lo risible. Los expertos aseguran que la mayoría de las secuencias son completamente retorcidas pero, fuera de eso, el largometraje es poco interesante y, en cierto modo, aburrido, quedando a deber en todos los departamentos. Las actuaciones fueron descritas como mediocres, ninguno de los actores se ve cómodo en la piel de su personaje, ni siquiera Olwen Fouéré en el papel de Sally Hardesty. Elaborando un poco más en la participación de Fouéré, se esperaba que ella fuera el factor nostálgico que uniera el pasado con el presente para recuperar la esencia perdida de la franquicia pero no es el caso, su interpretación no toca las mismas notas dramáticas que Marilyn Burns en los setenta, logrando que Sally se sienta como una persona completamente diferente.

También se puede leer que la historia hace el intento por ser absurda, recrear los terrores de la original y explorar los orígenes de Leatherface, pero falla en los tres aspectos. El problema surge al plantear ideas interesantes que no conducen a nada, esto apoyado por un ritmo que intenta recrear el pánico en espiral de la original pero con una ejecución pobre que se apoya más en la sangre que en crear una atmósfera inquietante. En los aspectos técnicos, la cinta se ve y se siente barata: algunos escenarios lucen como un set anticuado de películas western, la banda sonora es genérica y la fotografía apenas hace algo por destacar. Se dice que lo único memorable de esta entrega es Leatherface, siendo esta la versión más abominable del villano hasta la fecha.

Finalmente, La masacre de Texas (40%) es una carnicería narrativa y actoral que, a pesar de mostrar respeto por el material original, nunca está a la altura de sus ambiciones. Aun así, es un pequeño slasher que satisfacerá los deseos más depravados de los fanáticos del género: mucho gore, un body count alto y un asesino implacable en la cima de su juego.

A continuación, presentamos una compilación de críticas y reseñas de La masacre de Texas (40%):

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Matt Donato de IGN:

La masacre de Texas es una matanza descuidada y superficial con muertes destacadas pero una historia mal escrita que arruina la experiencia.

Valerie Complex de Deadline:

Sarah Yarkin, Elsie Fisher y Leatherface hacen todo lo posible para navegar por un guión desafortunado, pero nada puede evitar que esta película de Netflix se derrumbe bajo el peso de su irracionalidad.

Meagan Navarro de Bloody Disgusting:

...si todo lo que quieres es un baño de sangre slasher completo con algunas muertes retorcidas, La masacre de Texas es más que suficiente.

Frank Scheck de The Hollywood Reporter:

...los fanáticos del cine slasher amarán 'La masacre de Texas', un amoroso homenaje a la original que no escatima en sangre. Todo lo viejo se siente nuevo otra vez.

Kimber Myers de Los Angeles Times:

La masacre de Texas nunca evoca el miedo que fue el sello distintivo de la original y solo se conforma con el disgusto por la cantidad de vísceras que muestra. La película de 1974 fue una pesadilla que parecía demasiado cercana a la realidad, pero esto es simplemente desagradable, y no en el buen sentido.

William Bibbiani de The Wrap:

Para algunos, una película con temas sin desarrollar, personajes unidimensionales y violencia desmedida puede parecer algo malo. Para los conocedores del género slasher, todo es parte de un desayuno equilibrado. La eficiencia narrativa de La masacre de Texas y su ajustado tiempo de ejecución de 81 minutos lo convierten en una entrega ideal de asesinatos creativos y gore memorable.

Ross Bonaime de Collider:

La última entrega de esta serie intenta ser absurda, recrear los terrores de la original y explorar los orígenes de Leatherface, pero falla en los tres aspectos. El resultado podría ser la peor película de una franquicia repleta de secuelas terribles.

Cass Clarke de CBR:

...en su mayor parte, la película parece no poder decidir de quién es la historia que está contando y por qué. Lamentablemente, 'La masacre de Texas' no está a la altura del legado sangriento que claramente admira.

Robert Kojder de Flickering Myth:

...es otra decepción más para esta franquicia que sigue sin poder capturar la autenticidad sádica de su pasado (...) el proyecto es destazado en pedazos desde su inicio por un elenco desechable que no deja huella, intentos vergonzosos de comentarios sociales y un énfasis en la sangre sobre los sustos.

Evan Romano de Men's Health:

...la película se queda corta en todos los departamentos: se ve barata, el terror no funciona, la actuación es mediocre y los intentos de "comentario social" son risibles.

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