Yahoo Estilo Matthew Perry tenía altos niveles de ketamina en su sistema
Matthew Perry tenía cantidades similares de ketamina en su sistema que un paciente bajo anestesia general cuando murió, según reveló su autopsia.
El actor de 54 años fue encontrado muerto en su jacuzzi en 28 de octubre pasado y este viernes 15 de diciembre se consideró que su fallecimiento fue un accidente se determinó que fue causado por los 'efectos agudos' de la droga, con factores contribuyentes como el ahogamiento, una enfermedad de las arteria coronarias y los efectos de la buprenorfina, un fármaco utilizado para tratar la adicción a los opioides.
El médico forense notó que la ex estrella de 'Friends' había estado recibiendo una terapia de infusión de ketamina como tratamiento para la depresión, pero la última sesión fue una semana y media antes de su muerte y la sustancia sólo permanece en el sistema durante tres o cuatro horas.
El informe de toxicología encontró que se encontraron 3,450 ng/ml de ketamina en su fuente de sangres periférica de 3,271 ng/ml en su fuente de sangres central, pero en la 'atención quirúrgica-anestesiológica monitoreada', los niveles general están entre 1,000 y 6,000 ng/ml.
Según DailyMail.com, el médico forense Raffi Djabourian escribió:
'Con los altos niveles de ketamina encontrados en sus muestras de sangre post mortem, los principales efectos letales serían tanto la sobreestimulación cardiovascular como la depresión respiratoria. El ahogamiento contribuye debido a la probabilidad de sumergirse en la piscina cuando perdió el conocimiento; la enfermedad de las arterias coronarias contribuye debido a la exacerbación de los efectos miocárdicos inducidos por la ketamina en el corazón'.
La descripción continuó:
'Los efectos de la bufrenorfina se enumeran como contribuyentes, aunque no en niveles tóxicos, debido a los efectos respiratorios aditivos cuando están presentes con altos niveles de ketamina'.
El experto registró que el actor de '17 Again' tenía antecedentes de enfisema, diabetes y uso de drogas, pero 'supuestamente estuvo limpio durante 19 meses' y después de haber sido un 'gran consumidor de tabaco durante muchos años', descubrieron que actualmente no está fumando en el momento de su muerte.
Y el examinador notó que Matthew sufría de 'congestión hepática crónica' en el hígado, un precursor de la cirrosis, tenía nefroesclerosis de los riñones, un endurecimiento de los tejidos causado por el uso prolongado de drogas y problemas prolongados de presión arterial alta, y fibrosis pancreática crónica, así como daños al corazón y los pulmones.
