Mermelada de naranja casera: ideas para darle un toque diferente
Aprovechar las frutas de temporada para hacer con ellas deliciosas mermeladas caseras es una de esas ideas gastro que siempre son un ‘sí’. No resultan nada complicadas de preparar y, aunque el mercado nos ofrece buenas alternativas, ¡nada como una mermelada hecha en casa, lista para endulzar tus tostadas de desayuno o tus postres!
Hoy nos vamos a centrar en una de las frutas reinas de otoño y el invierno, las naranjas, para hacer mermelada con ellas. Primero mostraremos el paso a paso para una receta clásica, pero os daremos también algunas ideas para especiar la mermelada, y darle así un toque diferente.
MERMELADA DE NARANJA TRADICIONAL Y CASERA, PASO A PASO
Ingredientes: (para 4 botes de unos 250 ml)
1 kg de naranjas
El zumo de un limón
800 g de azúcar (si te gusta muy dulce puedes sumar más azúcar)
1 litro de agua
Elaboración:
Lava bien las naranjas y el limón para eliminar cualquier resto de suciedad de su cáscara.
Pela las naranjas y reserva las cáscaras (de un par de naranjas). Asegúrate de quitar la mayor parte del albedo (la parte blanca), ya que éste puede aportar amargor.
Corta la carne de las naranjas en pequeños trozos y, si hubiera alguna semilla, retírala.
Por otro lado,corta las cáscaras de un par de naranjas en tiras finas o en pequeños trozos.
Coloca las cáscaras en una cacerola con agua y llévalas a ebullición durante unos 5 minutos. Escurre el agua y repite el proceso si prefieres una mermelada más suave en sabor.
Coloca la pulpa de las naranjas, las cáscaras ya hervidas, el jugo de limón y el litro de agua en una cacerola grande.
Cocina a fuego medio durante unos 30-40 minutos, o hasta que las cáscaras estén tiernas y la pulpa se haya deshecho.
Añade el azúcar a la mezcla de naranjas y revuelve bien.
Cocina a fuego lento, removiendo de vez en cuando, durante unos 40-50 minutos más, o hasta que la mezcla haya espesado. Es importante no subir mucho el fuego para que no se queme.
Puedes comprobar si la mermelada está lista colocando un poquiro en un plato frío. Si la mermelada se espesa al enfriarse y no ‘resbala’ cuando inclinas el plato, está lista. Si no, sigue cocinando unos minutos más.
Cuando esté hecha, vierte la mermelada caliente en frascos de vidrio esterilizados, llenándolos hasta el borde. Ciérralos los herméticamente y colócalos boca abajo durante unos 10 minutos para crear un vacío que ayudará a conservar la mermelada por más tiempo.
Una vez que los frascos se enfríen, guárdalos en un lugar fresco y oscuro. Si se conserva adecuadamente, la mermelada puede durar varios meses.
IDEAS PARA DARLE UN TOQUE DISTINTO A TU MERMELADA DE NARANJA
Sumar especias a la mermelada de naranja es una magnífica idea si queremos darle un toque extra de sabor. Son muchas las opciones que tenemos en este sentido en función, claro, de nuestros gustos. Mostramos aquí algunas alternativas en este sentido:
Canela. El sabor de la canela combina muy bien con el de la naranja. Si la usas, puedes añadir uno o dos palitos de canela en rama durante la cocción de la mermelada y retirarlos antes de envasar. Si prefieres canela en polvo, puedes agregar media cucharadita al final de la cocción.
Jengibre. El dulzor de la mermelada armoniza bien con el toque fresco y algo picante del jengibre. Puedes añadir una cucharadita de jengibre fresco rallado al comienzo de la cocción o media cucharadita de jengibre en polvo al final.
Clavo de olor. Tiene un poderoso aroma, muy fragante y un toque ligeramente picante. Resulta perfecto si te gusta una mermelada con un toque más especiado. Para ello, añade 2 o 3 clavos de olor enteros durante la cocción y retíralos antes de envasar, o bien una pizca de clavo molido.
Anís estrellado. Los amantes de los sabores anisados disfrutarán mucho esta opción a la hora de aromatizar la mermelada de naranja. Puedes añadir 1 o 2 estrellas de anís al comienzo de la cocción y retíralas antes de envasar.
Vainilla. El aroma de auténtica vainilla también hace un contraste de sabor con la naranja más que interesante, aportando un toque dulce adicional. Añade una vaina abierta a lo largo durarte la cocción y luego retírala.
Cardamomo: Sus toques cítricos, algo dulzones y florales, se complementan bien con la naranja. Puedes añadir 3 o 4 vainas de cardamomo ligeramente machacadas durante la cocción y luego retirarlas, o bien una pizca en polvo durante la cocción.
Recuerda que no tienes por qué añadir únicamente una sola especia a tu mermelada de naranja; puedes también sumar combinaciones: canela+clavo; cardamomo+vainilla… es cuestión de ir probando, y ver qué mezcla de ingredientes te convence más.