Mikey Madison, la actriz que le arrebató el Oscar a Demi Moore

Mikey Madison dio la sorpresa y se quedó con el Oscar a Mejor actriz
Mikey Madison dio la sorpresa y se quedó con el Oscar a Mejor actriz - Créditos: @Jordan Strauss

“¡Esto es muy surreal!”, fue lo primero que atinó a decir Mikey Madison al subir al escenario del teatro Dolby a recibir el Oscar a Mejor actriz protagónica por su papel en Anora, film que minutos más tarde se llevó el premio a Mejor película. Las expectativas estaban puestas en Demi Moore que, dueña de la temporada de premios, miraba atenta desde la platea como la posibilidad de alzarse por primera vez con la preciada estatuilla se había desvanecido.

La flamante ganadora del premio que entregó Emma Stone confesó que estaba nerviosa y sacó un papel con su discurso: “Crecí en Los Ángeles, pero siempre Hollywood estuvo lejos de mí, así que estar aquí en esta sala es increíble. Gracias a mi familia, mi mamá, mi papá, mi hermano pequeño, hermanas y mi hermano gemelo, gracias por ser mi mejor amigo”. En medio de una extensa lista de personas a las que mencionó, siguió: “Quiero reconocer y honrar a la comunidad de trabajadores sexuales, voy a apoyarlos y ser una aliada. Conocer gente de esa comunidad fue uno de los puntos más altos de esta experiencia”. Es que en Anora interpreta a una joven trabajadora sexual que vive una intensa historia de amor con el hijo de un millonario ruso.

Pero además, destacó a sus colegas en la categoría -Cynthia Erivo (Wicked), Karla Sofía Gascón, (Emilia Pérez), Demi Moore (La sustancia) y Fernanda Torres (Aún estoy aquí): “Reconozco el trabajo increíble de mis compañeras, me siento honrada de ser reconocida al lado de ustedes, es un sueño hecho realidad, quizás me despierte mañana”. Mientras, el director de la ceremonia mostraba a Demi Moore, sentada en su butaca, atenta a lo que ocurría.

“¿Qué voy a hacer ahora?’”

Mikaela Madison Rosberg, tal es el verdadero nombre de la actriz, cumple 26 años el próximo 25 de marzo y es la tercera de cinco hermanos. A la hora de definirse, alguna vez contó: “Creo que heredé la profundidad emocional y la nostalgia de mi padre, y la vulnerabilidad y la consideración de mi madre”. Antes de la actuación, soñaba con ser jinete y tomo gran cantidad de horas de clases de equitación, al punto que prefirió hacer su escuela secundaria desde su casa para tener más tiempo y estar más concentrada. Pero un día colgó las botas e inspirada en películas como Cuenta Conmigo y Los juegos del hambre decidió cambiar de rumbo para dedicarse de lleno a la actuación.

Entre casting y casting encontró mucho más que una profesión: una forma de acabar con la timidez que le impedía hablar o hacer contacto visual, según ella misma contó. Los primeros tiempos en el mundo de los sets no fueron fáciles y recibió varios “no” hasta que debutó a los 14 con Retirement. Un año más tarde llegó la oportunidad en cine con el film Liza, Skies are Grey y luego la serie Better thing que definió como su “universidad de actuación”.

Luego de algunos papeles chicos, le llegó la gran oportunidad de la mano nada más ni nada menos que de Quentin Tarantino cuando interpretó a Susan Sadie Atkins, una de las chicas de Charles Manson en la película de 2019 Había una vez en... Hollywood. “Fue completamente increíble y la mejor entrada en el mundo del cine para mí. Pero también fue: ‘Bueno, trabajé con mi héroe a los 19 años. ¿Qué voy a hacer ahora?’”, confesó y cinco años después logra alzarse con el Oscar.

En aquel largometraje su participación no duró más de quince minutos, tiempo suficiente para cautivar a Sean Baker, director de Anora que en ese momento se prometió que alguna vez convocaría para una de sus obras a aquella joven actriz. Tres años después la volvió a ver en pantalla con Scream y ya no le quedaron dudas de que se convertiría en su próxima musa.

“Vimos a Mikey y supimos que era ella: tenía rango, podía ser divertida, tenía actitud, era sexy, intensa y podía gritar… Y si algo sabíamos de nuestra Anora entonces es que iba a tener que gritar mucho. Además, tiene un aspecto muy único que podíamos fotografiarla de manera interesante”, dijo el director en una entrevista sobre la charla que en ese momento había tenido con su esposa y productora de la película, Samantha Quan.

Merecido reconocimiento, ya que para su rol en el film ganador de la gran noche de Hollywood, la joven se preparó de manera integral durante un año: tomó clases de ruso y pole dance, lo que le valió varios moretones y golpes, y se interiorizó en la vida de las trabajadoras sexuales. Con solo 25 años, Madison ya tiene una docena de películas en su currículum, más de veinte reconocimientos en festivales por su papel en Anora, una nominación al Globo de Oro y desde ahora, también un Oscar.