Millie Bobby Brown hizo pensar a todo el mundo que estaba embarazada cuando compró pañales para su cordero

La actriz Millie Bobby Brown, protagonista de la serie 'Stranger Things', disfruta de una vida muy apacible junto a su prometido Jake Bonjovi, el guapo modelo que resulta ser el hijo del afamado cantante Jon Bon Jovi. Los dos enamorados residen en una granja alejada del mundanal ruido, pero no tienen tiempo para aburrirse. Además de estar planificando su esperada boda, la pareja tiene un sinfín de responsabilidades debido al sinfín de mascotas que tienen a su cargo: nueve perros, cuatro gatos, dos burros, dos vacas, tres cabras, dos ovejas y un caballo.

La intérprete británica, quien también ha protagonizado la saga de películas 'Enola Holmes', ha hablado con orgullo de su pericia con los cuidados de un cordero recién nacido, a su paso por el programa de Jonathan Ross, en la cadena ITV. La artista ofreció al recién nacido todas las comodidades posibles, hasta el punto de que le crio en su propia cama, alimentándole con biberones y asegurándose con pañales de que la criatura no ensuciara demasiado.

Aunque llevan una vida muy discreta en el campo, lógicamente la actriz y su pareja deben acudir al pueblo más cercano en busca de suministros. La mera presencia de Millie Bobby Brown en una tienda de ultramarinos es razón suficiente para llamar la atención de quienes la rodean, pero más aún si la estrella británica acude al mostrador para pagar varios paquetes de pañales. "La gente pensaba que estaba embarazada", ha bromeado mientras contaba la simpática anécdota.

La popular intérprete tiene ya 20 años, y antes de que termine 2024 se habrá convertido en una mujer casada. Millie y Jake se conocieron en 2021, y en sólo unos meses su incipiente amistad desembocó en un romance propiamente dicho. Desde entonces, su relación no ha dejado de ganar enteros a gran velocidad. En abril del año pasado, los dos enamorados confirmaron públicamente su compromiso matrimonial. Y ahora, Millie ha revelado que el romántico gesto que le preparó su chico pudo haber acabado en tragedia.

Durante unas vacaciones, Jake propuso a la actriz una sesión de buceo a gran profundidad. Cuando ambos ya se encontraban a varios metros de la superficie, el también actor sacó una concha de su bolsillo, que contenía el anillo con el que le iba a pedir matrimonio. "Me puso el anillo en el dedo, y cuando se lo iba a mostrar emocionada, el anillo se escurre de mi dedo y cae al fondo rápidamente", contaba Millie. Su prometido no tardó en lanzarse a las profundidades más oscuras para recuperarlo, pese a que lo tenían completamente prohibido por los riesgos asociados a la presión. "Se lanza como en una película, lo agarra y lo salva", presumía.