Miranda Cosgrove sigue viviendo en la misma casa donde su acosador se prendió fuego y se disparó

Muchas celebridades han tenido que lidiar con fans obsesivos que les han hecho temer por su seguridad, pero el caso de Miranda Cosgrove es uno de los más espeluznantes que se conocen en Hollywood. Hace casi una década, un hombre que llevaba tiempo acosándola se coló en su propiedad y disparó contra un coche que creía que era el suyo antes de prenderse fuego en el jardín y acabar quitándose la vida.

Afortunadamente, ella no se encontraba allí en el momento de los hechos, pero tuvo que ver durante días el cordón policial que delimitaba el lugar donde se había encontrado el cuerpo desde su puerta. Lo más increíble quizá de toda esta historia es que la estrella de 'iCarly' sigue viviendo en la misma casa, aunque últimamente ha estado pensando en mudarse para encontrar un lugar en el que se sienta "realmente segura". Sin embargo, no quiere dar un paso tan importante hasta que encuentre la vivienda perfecta.

"Voy y vengo a casa de mis padres... No me siento muy segura en la mía. Durante dos años después de lo ocurrido, no me quedaba allí. Luego empecé una relación y, como esa persona estaba allí conmigo, tenía menos miedo. Pero no me gusta mucho estar allí sola", ha explicado en una entrevista al portal Bustle.

A día de hoy Miranda todavía tiene muchas preguntas sin resolver, y reconoce que no piensa demasiado a menudo en lo que pasó porque no consigue encontrarle ningún sentido. Lo único que sabe, gracias a los informes de la policía, es que aquel hombre llevaba tres días acudiendo a su casa y había enterrado distintos objetos en el jardín, desde cuchillos y cuerdas a una fiambrera que contenía un batido de chocolate.

La teoría de las autoridades, que Miranda da por buena, es que el intruso se confundió cuando vio pasar un coche similar al de la actriz y por eso disparó en seis ocasiones contra su conductora, que por suerte salió ilesa. Años más tarde ella tuvo la oportunidad de conocer a aquella mujer en un acto benéfico, y ambas estrecharon lazos a partir de la aterradora experiencia que las unía incluso antes de que se conocieran en persona.

"Una chica se me acercó y me dijo: 'No sé si debería decírtelo aquí, no cómo decirlo, pero soy la chica que estaba en tu casa y a la que dispararon'. Me pareció que estaba procesando las cosas de un modo similar al mío".

A menudo ha fantaseado en sumergirse en la historia y averiguar exactamente por qué ocurrió todo, porque cree que sería interesante saber quién era la persona, por qué estaba allí y qué le había ocurrido en el pasado. El problema es que no sabe si lo que pueda descubrir empeoraría o mejoraría su situación.