Mitos y verdades sobre el SIBO, el trastorno intestinal del que todo el mundo habla
Si hace unos años te hablábamos del SIBO en estas páginas, tal vez te lo descubríamos por vez primera. Hoy se ha convertido en una de las palabras tendencia, las búsquedas sobre este desequilibrio de la microbiota se han multiplicado y es posible que conozcas a alguien que lo padece. No es extraño que el título del libro de Asun González (@guerrasintestinas) sea el que es: ¿Tú también tienes SIBO?. Publicado por Alienta Editorial, en él la bióloga y asesora nutricional especializada en salud digestiva habla sobre esta enfermedad digestiva y aborda un tema, sin duda, de actualidad: ¿es solo una moda pasajera? Y es que lo cierto es que parece que, ahora, de repente, estuviera por todas partes.
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SIBO se ha convertido en una de las palabras más repetidas en los últimos tiempos, todo el mundo habla de él. ¿Por qué cree que ha cobrado relevancia este trastorno digestivo?
Buena pregunta, la verdad es que no sabría decir con certeza por qué justo ahora ha cobrado mayor relevancia. Somos muchos los profesionales que trabajamos con el SIBO desde hace años, incluso décadas, y algunos hablamos de él desde hace tiempo. Yo misma intento compartir toda la información que puedo en el blog y en Instagram, para dar visibilidad a este problema poco conocido. Supongo que ha ocurrido porque cada vez se sabe más sobre el SIBO, los profesionales lo diagnostican más y a raíz de alguna publicación de algún influencer, las personas se han sentido identificadas, porque el SIBO es muy frecuente.
Malas digestiones, pesadez... Entendemos que es un problema que siempre ha existido pero al que no habíamos puesto nombre anteriormente, ¿es así?
En parte sí, así es. Hasta ahora, a una persona con malas digestiones se le diagnosticaba de "intestino irritable" sin más solución que un omeprazol o un antidepresivo. Ahora sabemos que estos problemas del "intestino irritable" pueden estar ocasionados por un desequilibrio en la microbiota intestinal, sabemos que se puede tratar y que las personas mejoran, que no tienen por qué sufrir en silencio durante años. Sin embargo, aunque hay que pensar en el SIBO como un posible diagnóstico, tampoco todo siempre es SIBO, los problemas digestivos pueden tener múltiples causas.
¿Por qué cree que de repente, todo el mundo tiene SIBO o hay muchas personas con síntomas compatibles con este problema?
Supongo que porque se sabe más sobre el SIBO y se diagnostica más, también el número de personas con problemas digestivos va en aumento. Hay un 11% de la población mundial diagnosticada de "intestino irritable", más muchas otras personas con problemas digestivos sin un diagnóstico siquiera o que no han consultado con sus médicos. Aunque ahora el SIBO esté de "moda", me atrevería a decir que aún así hay mucho infradiagnóstico. ¿Por qué? Porque el "Intestino irritable" es un diagnóstico de exclusión, no debería ser lo primero con lo que nos etiqueten, no sin antes mirar otras cosas como celiaquía, enfermedad inflamatoria intestinal, hipoclorhidria, insuficiencia pancreática o biliar, otras enfermedades y también desequilibrios en la microbiota como puede ser el SIBO. Se estima que alrededor de un 50% del "intestino irritable" puede ser SIBO, merece la pena tenerlo en cuenta cuando hay problemas digestivos, para que las personas puedan mejorar.
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La pregunta clave sería si estamos ante una realidad o si se trata solo de una moda pasajera, ¿cuál es su opinión?
Es una realidad. 100%. Ojalá no se quede en una moda pasajera, ahora que las personas son conscientes de que el SIBO existe, de que su malestar no "son los nervios" ni "está en su cabeza", ni tienen que vivir con problemas toda su vida. El SIBO está descrito en la literatura médica y científica desde hace más de cien años, hay más de 2100 estudios indexados en Pubmed donde se estudia el SIBO de forma directa, más otros tantos donde se describe de forma secundaria. Recientemente, la OMS ha incluido el SIBO en su Clasificación Internacional de Enfermedades. El SIBO es una realidad y ha venido para quedarse, ojalá se incluya definitivamente en la práctica clínica habitual, tanto pública como privada.
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¿Por qué piensa que hay doctores o especialistas que no creen en este trastorno?
Porque no se han actualizado y se han quedado en la medicina de los años 50. Hay un crecimiento exponencial de estudios relacionados con la microbiota a partir del año 2010 aproximadamente, pero si nunca se leen nuevos artículos científicos, pues tenemos desgraciadamente profesionales de la salud que no "creen" en la microbiota. Como si fuera un acto de fe... ¿Simplemente porque no se ven las bacterias a simple vista? Eso ya está superado. A día de hoy es como decir "no creo en el cerebro" o "no creo en el corazón". Es cierto que es difícil estar actualizado en todos los campos de la medicina, quizá parte de la solución pasara por explicarlo en las universidades y por incluir profesionales de la microbiota en los hospitales y centros de salud, como una especialidad más.
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¿Cuáles piensa que son los mitos más habituales relacionados con el SIBO?
El mayor mito es pensar que el SIBO no existe y que es una moda inventada por los influencers. Otro mito habitual es considerarlo como una infección y no como un desequilibrio, y querer matar a las bacterias a toda costa con antibióticos y dieta FODMAP. Otro mito es que no conviene tomar probióticos porque se añaden más bacterias al sobrecrecimiento (siendo estos el mejor tratamiento para equilibrar el SIBO).
¿Por qué hay tantas personas que viven un peregrinar por distintos especialistas hasta que, por fin, se confirma el diagnóstico?
Porque en la sanidad pública desgraciadamente aún no se tiene en cuenta el SIBO, ni se dispone de la prueba, ni se piensa siquiera en este diagnóstico. Está fenomenal acudir a nuestros médicos ¡por supuesto! No podemos saltarnos este paso para que nos descarten todo tipo de enfermedades que son causa de SIBO (celiaquía, enfermedad inflamatoria, cáncer y otros muchísimos problemas). Pero cuando no se encuentran causas orgánicas, hay que pensar en la microbiota. A día de hoy, los profesionales que tratan la microbiota son pocos y son todos privados, entonces cuesta un verdadero peregrinaje dar con la persona que puede ayudarte.
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¿Cuáles piensa que son las causas que pueden estar detrás del SIBO?
Casi cualquiera, son muchas las causas de SIBO. Pensemos que la microbiota intestinal es un "órgano" delicado, conectado con todo el cuerpo y muy sensible, tanto a lo que comemos como a nuestro estilo de vida. Las causas más frecuentes son el consumo de ultraprocesados (aditivos y colorantes dañan la microbiota), el tabaco y el alcohol, la toma de fármacos como los antibióticos, los omeprazoles, los antiinflamatorios o los antidiabéticos como el GLP1, entre otros. También factores del estilo de vida como el sedentarismo, la falta de descanso, estrés crónico, picotear y tomar refrescos, la mala salud oral... Como ves son causas muy presentes en nuestra sociedad, por eso también cada vez más personas sufren de SIBO y problemas digestivos.
¿Es un problema de salud relacionado con otras enfermedades?
Sí, muy relacionado. El desequilibrio en la microbiota está relacionado con multitud de enfermedades, coexisten, a veces son causa y a su vez también consecuencia. Sabemos que el SIBO es causa de todo tipo de problemas, desde digestivos por supuesto pero también tiroideos, de piel, cistitis, déficit de vitaminas, anemia, incluso ansiedad, depresión y problemas neurológicos. Se relaciona el SIBO en especial con intolerancias alimentarias (90%), celiaquía (60%), divertículos (59%), cirrosis e hígado graso (40%), Helicobacter pylori (60%), incluso fibromialgia (en un 100% de los casos). No quiere decir que el SIBO esté ocasionando directamente todas estas enfermedades, pero sí las agrava, siendo el SIBO la causa de que por ejemplo algunos celíacos no acaben de mejorar a dieta estricta sin gluten.
¿Hay personas con más riesgo de padecerlo?
Sí, las personas que no se cuidan. Aquellos que fuman, beben, comen ultraprocesados, refrescos y comida rápida, que no hacen ejercicio ni duermen bien. Evidentemente estas personas no solo sufrirán SIBO y problemas digestivos, sino que es un caldo de cultivo para el desarrollo de diabetes, cáncer y otros problemas graves de salud. También puede ser que las personas que se cuiden sufran SIBO tras toma de antibióticos o una gastroenteritis.
¿Cómo debe ser la dieta de una persona diagnosticada con SIBO?
Debe ser una dieta libre de ultraprocesados, que, como comentábamos antes, dañan el metabolismo y la microbiota. A partir de ahí, debe ser una alimentación basada en productos frescos del mercado: verduras, pescado, huevos, carne, setas, frutas, frutos secos, agua, especias y aceite de oliva virgen extra. Debe ser una alimentación variada, llena de colores (polifenoles de las verduras que son antioxidantes y equilibran la microbiota). Así de fácil y así de difícil a la vez.
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Hay pacientes que no mejoran y que vuelven a tener la inflamación característica de este problema de salud, ¿qué les diría?
Que busquen la causa de su SIBO. Si no se busca la causa raíz, el SIBO volverá. Puede ser la falta de alimentación fresca, la falta de ejercicio físico, un fármaco que tomen, problemas dentales o las enfermedades que comentábamos. Para eliminar el SIBO es fundamental buscar la causa y a la vez tratar el SIBO de forma integral, no solo con pastillas sin mirar nada más.
En su libro podemos leer 'Yo también tuve SIBO y logré equilibrarlo'. Terminemos con un mensaje optimista; ¿se puede vencer la batalla contra este problema de salud?
¡Claro que sí! Somos muchas personas las que tuvimos SIBO y logramos librarnos de él. Con esta finalidad nace el libro ¿Tú también tienes SIBO? Para dar información, pero también respuestas y soluciones, para que las personas tomen las riendas de su salud. También que los profesionales sepan tratarlo. No es sencillo, pero se consigue y el SIBO se cura. ¡Mucho ánimo!