Esta es la mujer que trabaja liando marihuana para Snoop Dogg

Cuando salió a la luz que Snoop Dogg había contratado un experto profesional en liar marihuana, muchos pensaron que se trataba del trabajo perfecto. No solo implica acompañar a la estrella de la música en sus viajes por el mundo a bordo de un avión privado y alojarse en los mismos hoteles, también incluye un generoso salario -con todos los gastos pagados- por dedicarse básicamente a estar cerca suyo y entregarle un cigarro cuando lo pide.

Ahora el mundo por fin ha podido ponerle cara a la persona que ha conseguido el empleo: para nuestra sorpresa, porque el rapero siempre se había referido a ella usando pronombres masculinos, se trata de una mujer que se hace llamar Renegade Piranha. Ella ha concedido un par de entrevistas en los últimos días en las que explica cómo acabó formando parte del equipo de Snoop Dogg y desvela cuánto llega a fumar en un solo día.

"Calculo que son más de 450.000 cigarros los que le he liado hasta la fecha. Utilizo alrededor de media libra al día, lo que supone el equivalente a 75 o 150 unidades", ha comentado en el programa australiano de radio 'The Kyle and Jackie O Show'.

Renegade acabó trabajando para el músico por casualidad gracias a una amiga en común que conocía a los responsables de venderle los nutrientes que se utilizan para cultivar la marihuana de primera calidad que fuma. A través de ella se enteró de que buscaba a alguien que supiera liar como un profesional porque él no tenía tiempo para hacerlo.

La entrevista de trabajo consistió en dos encuentros con su actual jefe. En el primero se dedicó únicamente a mostrarle sus habilidades, pero en el segundo tuvo que enfrentarse a otros dos candidatos: uno de los ingenieros de sonido del rapero y un experto en puros venezolano, a los que acabó derrotando en una competición.

El rapero siempre ha defendido el trabajo de Renegade asegurando que requiere de un talento especial para adivinar cuándo se siente estresado y tener a punto un cigarro recién liado. Por eso hace un año decidió aumentarle el suelo por encima de los 40.000 dólares anuales que le pagaba porque le parecía más que justo.