Mujeres asesinas, un retrato de crímenes pasionales

CIUDAD DE MÉXICO, marzo 14 (EL UNIVERSAL).- Tras casi dos décadas del estreno de "Mujeres asesinas", serie que retrata historias reales de mujeres que atentaron contra la vida de alguien más, la periodista argentina y creadora de la serie, Marisa Grinstein, lamenta que las cosas no hayan cambiado aún en este terreno.

"Los motivos siguen siendo los mismos, las mujeres que yo veo siguen con falta de herramientas económicas, educativas, psicológicas, sociales y de todo tipo, y es en estos casos que siempre terminan mal", explica Marisa, en entrevista.

"La idea es ver qué es lo que las condujo a matar, a tomar una decisión tan revocable, es ver qué le pasó a esa mujer para llegar a donde llegó", ahonda.

La escritora explica que para esta segunda temporada de la nueva versión de la serie, no retomó ningún caso de los dos libros que ha lanzado al respecto, sino que se dio a la tarea de investigar casos un poco más recientes acontecidos en México, aunque considera que no hay mucha diferencia con la situación de las mujeres en Argentina.

"Hay similitudes en la problemática profundamente femenina, por ejemplo, en el acoso, pero creo que una diferencia es que en las historias de México hay más sangre, son crímenes más pasionales, no en el sentido romántico, sino que matan a alguien con quien tienen un vínculo, que pueden ser hermanos, hijos, la pareja", señala Marisa.

Ya sea con casos locales o de otros países, para la creadora de "Mujeres asesinas" siempre será de gran impacto ver cómo una mujer termina con la vida de alguien más: "Es muy desconcertante verlas agarrando un cuchillo y defendiéndose".

Esta segunda temporada, que se estrena este viernes por ViX, está integrada por ocho historias compuestas por mujeres de diversos estratos sociales que son llevadas a situaciones límite que las orillan a matar.

Tal es el caso de Rosario, quien debido al miedo y la paranoia de que "alguien" lastime a sus hijos, termina como responsable de dos muertes en el primer episodio.

"Para mí era muy importante dignificar la historia de esta mujer, para que el espectador se pregunte por qué es la única solución que esta mujer vio. A veces la justicia no alcanza y este episodio retrata la rabia social con la que muchas veces vivimos, además del hartazgo y el miedo con el que tenemos que sobrevivir en un país como el nuestro", dice Elyfer Torres, quien interpreta a Rosario.