Natalie Portman considera 'incómodas' todas las escenas de sexo

La actriz considera que el equipo de producción debe hacer un gran trabajo al rodar momentos incómodos u hostiles. credit:Bang Showbiz
La actriz considera que el equipo de producción debe hacer un gran trabajo al rodar momentos incómodos u hostiles. credit:Bang Showbiz

Natalie Portman considera "incómodas" todas las escenas de sexo.

La actriz de 42 años protagoniza el drama sobre escándalos sexuales, 'May December', en el papel de la actriz Elizabeth Berry, que estudia el tema real de su próxima película; el personaje de Julianne Moore, Gracie Atherton-Yoo, que es sorprendida manteniendo relaciones sexuales en el almacén de una tienda de mascotas con Joe, su compañero de trabajo, interpretado por Charles Melton, cuando éste sólo tenía 13 años.

La película da un giro oscuro cuando una voz espeluznante le dice a Elizabeth a través del espejo: "Eres... Gracie".

Y Natalie dice que hubo "una comunicación buena y abierta" entre los coprotagonistas antes de rodar la escena de sexo.

Sobre el rodaje de escenas íntimas, la actriz declaró a la revista Radio Times: "Nunca es cómodo. Y lo resolvimos entre nosotros. Creo que todos teníamos una comunicación muy buena y abierta. Pero creo que los coordinadores de intimidad pueden ser realmente maravillosos, sobre todo en entornos que son incómodos u hostiles. Puede ser útil tener algún tipo de estructura al respecto".

Natalie se ha mostrado encantada con la reacción que ha generado la película entre los fans.

La estrella de 'Thor: Amor y trueno' formó su propia productora, MountainA, con su amiga Sophie Mas, y su primera película, el melodrama dirigido por Todd Haynes, se vendió a Netflix por 11 millones de dólares tras recibir críticas muy favorables en Cannes.

En declaraciones a The Hollywood Reporter, Sophie habló de 'May December': "Nos encantó lo inesperada que fue. Gran parte de la recepción de la película hasta ahora la ha descrito como campy, y no sé si estamos de acuerdo con eso, pero realmente no sabes si se supone que debes reír, si es irónico, y eso se siente único. Cuando haces una película, apuestas por el guión, y sentíamos una convicción, pero en Cannes, estábamos actuando a altas horas de la noche, después de 'Asesinos de la luna florida'. Julianne tiene una primera frase en la que dice: 'No creo que tengamos suficientes hot dogs', y el público supo reírse, así que sentimos que habían entendido el tono. Sabíamos que el mercado, sobre todo con la huelga, sería ajustado: financiamos la película de forma independiente, pero la venta a Netflix nos pareció un testamento del trabajo".