La primera Navidad que Federico y Mary de Dinamarca celebran como Reyes
La primera Navidad con Federico y Mary de Dinamarca en el trono se presenta como una combinación de tradiciones y novedades en medio de un clima familiar algo confuso. Los Reyes y sus hijos, los príncipes Christian, Isabella, Vincent y Josephine pasarán los últimos días de diciembre en el Palacio de Marselisborg, situado en Aarhus, la segunda ciudad más grande de Dinamarca, y con ellos estará la reina Margarita, que ya no ocupa la jefatura del Estado, pero sigue teniendo un papel importante como cabeza no oficial de su familia. Por otro lado, el hermano del rey, el príncipe Joaquín, que vive con su familia en los Estados Unidos, tiene pensado pasar las fiestas en Francia, el país de su mujer, la princesa Marie, que sí recuperó su presencia oficial en Dinamarca durante las últimas semanas. En este escenario, de unión y desunión, la Familia Real danesa tiene estos planes:
El traslado a su residencia de Marselisborg
La Casa Real danesa ha informado que Federico X y su familia trasladarán su residencia al castillo de Marselisborg, punto central de las vacaciones navideñas desde que el rey era niño, desde el 23 al 26 de diciembre, por lo que cada día se realizará un cambio de guardia a las doce del medio día. La reina Margarita, que ya no tiene la agenda propia de la jefatura del Estado, llegará antes y se marchará después, estando en el castillo de Marselisborg del 20 al 30 de diciembre.
Esta residencia se encuentra en Jutlandia, a casi 200 kilómetros de Copenhague. Es el palacio de verano y toma su nombre de la familia que emigró desde los Países Bajos. A lo largo de los siglos cambió muchas veces de manos hasta que la ciudad de Aarhus lo compró en 1896 y se demolió la edificación principal. En 1897 se recaudaron fondos para levantar este castillo en unos terrenos que el Ayuntamiento de la ciudad decidió ceder gratuitamente. Años más tarde, entre 1899 y 1902, se construyó el actual castillo que desde 1967 usa Margarita de Dinamarca. La propiedad tiene un jardín de estilo inglés con pequeños lagos, rosales y numerosas esculturas que son visitables por el público cuando la Familia Real no se encuentra en el Palacio. Actualmente, está siendo sometida a una extensa renovación que no impide que la Familia Real lo siga disfrutando.
Hay que tener en cuenta que antes de este traslado y de que lleguen las fechas más importantes, el jefe de la Casa Real celebra un encuentro con el personal del castillo de Christiansborg, donde se albergan las caballerizas reales, la capilla y salas de audiencias. Se trata de un cóctel tipo buffet en el que el rey dirige un discurso de agradecimiento, hay actuaciones musicales a cargo de la propia banda real y se hacen los típicos corrillos informales.
¿Quiénes están invitados a este encuentro?
A diferencia de la Navidad de los Windsor, que durante cuatro décadas ha cumplido con una agenda navideña invariable y con reglas estrictas con respecto a los invitados, los daneses son más libres en este sentido. La reina Margarita siempre invitó a toda su familia, incluso durante un tiempo se sumaban a estas celebraciones la Familia Real griega, es decir, los reyes Constantino y Ana María con sus hijos, y con el tiempo cada uno fue decidiendo sus planes. El año pasado la reina Margarita contó la presencia de sus dos hijos, Federico y Joaquín, y de todos sus nietos, con la excepción del mayor, el conde Nicolás, que estaba pasando el invierno en Australia. Algo totalmente distinto a lo que sucedió en la Navidad del 2022, cuando los entonces príncipes Federico y Mary fueron los que se marcharon en viaje privado a Australia con sus hijos para estar unos días con la familia de la princesa; lo mismo hicieron Joaquín y Marie, apostar por una Navidad privada en el extranjero. No hay que olvidar que coincidió con el momento en el que la reina Margarita decidió retirar los títulos reales a los cuatro hijos de Joaquín.
La víspera de Navidad
El 23 de diciembre, en Dinamarca, se celebra el Lille juleaften, se envuelven los regalos y se adorna el árbol. Esa noche el menú suele contar con ganso o pato asado, cerdo, venado, patatas doradas con caramelo, lombarda y ensalada de pepino. De postre, el rombudding, un pudín cremoso de ron servido con salsa fría de frambuesa; aeblekage, un pastel de migas de manzana, y el postre tradicional danés servido típicamente por Navidad, el ris a la mande, un arroz con leche mezclado con nata montada, vainilla, almendra picada y salsa de cereza. Esa noche los niños dejan un plato de gachas de arroz para ayudar a los julenisser o ayudantes de Papá Noel y de.
Cambio de guardia a mediodía y ballet
Desde que el soberano danés llega al Palacio de Marselisborg, todos los días a mediodía hay un cambio guardia. Hasta ahora, dada la pasión de la reina Margarita por el ballet, el teatro y el diseño de la escenografía y el vestuario, se representaba también el ballet navideño de La reina de las Nieves. Es de suponer que este año se continúe con la tradición, ya que la reina Margarita ha retomado su colaboración con las artes plásticas en este último año, pero también cabe la posibilidad de que el rey Federico introduzca alguna novedad en la primera Navidad de su reinado.
Discurso Año Nuevo y gran cena de gala
En la corte danesa hay reglas propias como el tradicional discurso que, en lugar de hacerse en Nochebuena o en Navidad, se emite a la nación a las seis de la tarde del último día del año desde el Castillo de Amalienborg, que también se abrirá ese día al público para que puedan seguir el discurso desde las pantallas de televisión que se van a instalar en la plaza de la residencia real. La expectación es máxima al ser el primer discurso de Año Nuevo del reinado de Federico X y ya se especula sobre el contenido de su discurso en sí. La empresa de loterías y apuestas nacional, Danske Spil, ya ha registrado las primeras apuestas y dan como palabras probables "Groenlandia", "Islas Feroe", "2024", "Reina" y "Príncipe heredero".
Tras el cambio de guardia del primero de enero, la Familia Real danesa se viste de gala para asistir a una velada en la que también están presentes el Cuerpo de Oficiales, el Cuerpo Diplomático, las Fuerzas Armadas y la Agencia Danesa de Emergencias que tiene lugar en el salón de Caballeros del palacio de Christian VII. Tan solo en dos ocasiones este gran evento se ha suspendido. La primera vez fue en 2005 por el tsunami que asoló el sudeste asiático y en 2021 debido a la pandemia de coronavirus.
Menú escandinavo para comenzar el año
La cena de gala está llena de protocolos y tradiciones: como que solo se pueden usar platos de plata. Cuando la porcelana se puso de moda, las vajillas de plata estuvieron apartadas durante siglos, pero fue en la época del príncipe Henrik, esposo de la reina Margarita quien falleció en 2018, cuando se reintrodujo la costumbre de comer en servicios de este metal.
El menú de esta gran velada suele variar, pero normalmente repiten platos como la terrina de faisán manzana y champiñones encurtidos, filete de ciervo, queso brillat-savarin al horno, tarta charlotte a la Russe, bacalao de año Nuevo, chuleta de reno con pera frita, mousse de colmenillas y salsa de pimienta, regado con los vinos del Chateau de Cayx, la residencia privada y rodeada de viñedos que la Familia Real danesa tiene en Francia.
¿Habrá desfile en la carroza de oro?
La reina Margarita tenía la costumbre de celebrar el 4 de enero con un acto para oficiales de las Fuerzas Armadas y de la Agencia de Gestión de Emergencias, así como a representantes de las principales organizaciones nacionales y patrocinios reales. Antes de este encuentro, la entonces soberana danesa recorría en carroza dorada, tirada por seis caballos, el tramo que va desde Amalienborg hasta el Palacio de Christiansborg escoltada por el Regimiento de Húsares de la Guardia Real. Se trata del mejor carruaje de la Casa Real y fue mandado construir por Christian VII al fabricante Henry Fife en 1840. Está recubierto con pan de oro de 24 quilates, tiene cuatro coronas doradas en el techo y un escudo de armas pintado en las puertas. Este año los reyes Federico y Mary pueden reescribir la historia y marcar nuevas costumbres, así que habrá que ver qué ocurre con este tradicional desfile que de momento no figura en la agenda oficial de la Casa Real danesa.