Nicolás Riera y Thelma Fardin: un primer encuentro picante y una obra con guiño a un resonante triángulo amoroso

Entrevista a Thelma Fardin y Nicolás Riera. Estan por estrenar Motorhome en teatro
Entrevista a Thelma Fardin y Nicolás Riera. Estan por estrenar Motorhome en teatro - Créditos: @Soledad Aznarez

En 2007 participaban en dos de los programas más exitosos de la televisión argentina, que dividían a la audiencia infanto juvenil a la hora de la merienda. Nicolás Riera (por entonces con 22 años) era Juan “Tacho” Morales en Casi ángeles, la ficción de Cris Morena que emitía Telefe, y Thelma Fardin (de sólo 14), Josefina Beltrán, la mejor amiga de la protagonista, en Patito Feo, que iba por eltrece. En ese entonces, los dos populares actores nunca se cruzaron, y luego, a lo largo de los años –toda una rareza en el medio–, tampoco (ni siquiera en el estudio de Julio Chávez, donde ambos estudiaron actuación). Hasta que el año pasado se conocieron en los ensayos de Plagio, el proyecto teatral de José María Muscari que incluía cuatro versiones de un mismo texto, a cargo de cuatro elencos diferentes. Y si bien no les tocó compartir el mismo elenco, desde entonces son pareja.

Ahora, finalmente, van a trabajar por primera vez juntos. Serán la cabeza de compañía de Motorhome, la comedia de Alfredo Staffolani (también director de la propuesta) y el mismo Riera, que se anticipa como “un disparatado lado B del rodaje de un western argentino”, y que subirá a escena el 7 de agosto (y todos los próximos miércoles, a las 20.15) en el Teatro Metropolitan (Av. Corrientes 1343). “La idea surgió de una charla con Staffolani sobre nuestras experiencias en el cine. Yo arranqué filmando de muy chico, haciendo bolos y bancándome que nadie supiera mi nombre o que me citaran a las siete de la mañana para rodar la última escena de la noche. El cine puede no ser tan mágico como la gente se lo imagina. Pero también las largas horas de espera entre escena y escena permiten en la zona de los motorhomes conversaciones muy random entre actores de distintas edades y trayectorias, y producen situaciones muy fuera de lo común. Bueno, con ese material armamos una obra donde aparecen indios, actores, pistoleros y una directora novata”, adelanta Riera a LA NACIÓN, sentado junto a Fardin en el living de la casa que comparten en el barrio de Núñez.

"El cine puede no ser tan mágico como la gente se lo imagina. Pero también las largas horas de espera entre escena y escena permiten en la zona de los motorhomes conversaciones muy random entre actores de distintas edades y trayectorias, y producen situaciones muy fuera de lo común", dice Nicolás Riera - Créditos: @Soledad Aznarez
"El cine puede no ser tan mágico como la gente se lo imagina. Pero también las largas horas de espera entre escena y escena permiten en la zona de los motorhomes conversaciones muy random entre actores de distintas edades y trayectorias, y producen situaciones muy fuera de lo común", dice Nicolás Riera - Créditos: @Soledad Aznarez

¿Motorhome es un proyecto de pareja?

Thelma Fardin: –Sí. Si bien el impulsor del proyecto fue Nico, y hasta armó el elenco y buscó el teatro, después pasó que yo me fui involucrando cada vez más y ahora, como los dos somos muy “manija”, estamos trabajando codo a codo por igual. Yo ya no puedo despegarme y decir: ‘ah, no, aquí sólo participo como actriz´. Ahora somos un team.

Nicolás Riera: –Hoy ella se ocupa prácticamente de todo: del vestuario, de las redes y está muy en los detalles. De todos modos, con el resto del elenco (Lili Popovich, Nicolás Di Pace, Irune Porcel y Alfredo Staffolani) y del equipo técnico conformamos una cooperativa en la que yo, digamos, manejo la batuta (risas).

¿Cómo son los personajes que interpretan?

Riera: –Mi personaje es un actor, Agustín Cané, que de pibe la pegó y después no laburó nunca más como actor. Se las tuvo que rebuscar trabajando en un geriátrico y ahora está volviendo al ruedo, precisamente en este film que se llama El indio bueno. Él es el “supuesto” protagonista y, además de sufrir de ansiedad por el regreso a la actuación, carga con un temita: se está quedando pelado, algo que lo conflictúa mucho.

Fardin: –Yo soy la directora, Cruz, a la que la película se le está yendo de las manos por completo. Es su opera prima y el mecanismo por el cual logró producir la película fue endeudarse con su padre, una persona muy adinerada. Además de inexperta, es bastante maltratadora y trata a la gente según jerarquías: al protagonista y al que es famoso los trata muy bien, pero a la piba, que está recién empezando como meritoria, la ningunea. Estoy chocha con este personaje porque hacer de mala es muy divertido. La gente se podrá identificar con esta situación de poder, porque, ¿quién no ha tenido un jefe déspota?; y la gente de nuestro medio seguramente verá en la obra un montón de guiños. Algunos son tan conocidos que hasta se han hecho públicos y ya forman parte del folklore del mundo del espectáculo local.

Bueno, a esta altura la palabra motorhome remite a un escándalo entre dos actores, una modelo y una palta...

Fardin: –¡Y a una mantita de Nepal!

Riera: –Bueno, eso justamente pasó durante un rodaje, donde suelen suceder encuentros de ese tipo, no siempre tan mediáticos. De eso dan testimonio, por ejemplo, las maquilladoras, las peinadoras, las vestuaristas. Digamos que en los motorhomes pasan cosas y la obra habla de eso. Así que no nos preocupa que la gente relacione el nombre con aquel episodio. Hará bien.

¿Vivieron alguna experiencia romántica y/o sexual en un motorhome?

Fardin: –Yo ninguna en un motorhome, pero sí alguna en un camarín.

Riera: –Los camarines son incómodos, hay poco lugar. Nosotros nos conocimos en los pasillos de los camarines del Teatro Regina, cuando hacíamos Plagio, pero ahí no pasó nada. Todo sucedió después.

"Hacer de mala es muy divertido. La gente se podrá identificar con esta situación de poder, porque, ¿quién no ha tenido un jefe déspota?; y la gente de nuestro medio seguramente verá en la obra un montón de guiños" - Créditos: @Soledad Aznarez
"Hacer de mala es muy divertido. La gente se podrá identificar con esta situación de poder, porque, ¿quién no ha tenido un jefe déspota?; y la gente de nuestro medio seguramente verá en la obra un montón de guiños" - Créditos: @Soledad Aznarez

A propósito, ¿cómo comenzó la relación entre ustedes? ¿Se trató de un flechazo?

Riera: – Yo ya la había visto un par de veces en el teatro, pero ella no me había registrado. Hasta que un día, al finalizar el ensayo de la versión de la obra que me tocaba protagonizar, me la cruzo en el pasillo y le digo, haciéndome el canchero: “Bueno, acá les dejamos el escenario caliente”. Ella, sin mirarme a la cara, me contesta: “Qué bueno, porque acá llegaron los actores´. Lejos de enojarme, pensé: además de linda tiene muy buen sentido del humor y es picante. Ahí me interesó más y la busqué, la busqué y la busqué. De entrada no me dio bola, me salía con distintas excusas laborales, hasta que un día (el 3 de junio) la fui a ver en su función de la obra y la invité a comer a Edelweiss (el restorán más famoso de la colonia artística). Tuvimos una cena eterna en la que pasamos por todos los temas. Yo aún lo siento como un momento muy mágico, donde conectamos y nos olvidamos del tiempo. De hecho nos terminaron echando porque, aunque cierran tarde, nosotros no parábamos de hablar.

Y a vos, Thelma, ¿qué te sucedió con él?

Fardin: – Una vez que nos sentamos a charlar y a conocernos, mi historia con él ya no tuvo vueltas. Nico me voló la cabeza . Hoy reconozco que en un principio lo prejuzgué mucho, no conocía al artista que verdaderamente es y que hoy me enamora mucho. Su sentido del humor al toque me pareció hermoso y creo que es muy inteligente en cuanto a lo que muestra de sí mismo y a lo que no. Yo en ese sentido soy más desorganizada, muestro mucho, casi sin límites. Él es más misterioso, tiene una forma especial de dejarse conocer, por eso el flechazo no fue tan inmediato, pero en cuanto logré conocerlo bien, sentí por él algo muy contundente.

–¿Cuándo empezaron a convivir?

Riera: –Casi al toque, a los tres meses ella dejó su departamento y se vino a vivir al mío. Después nos fuimos de ahí y ahora vivimos juntos en esta casa.

Fardin: –Este es nuestro verdadero primer hogar, lo armamos los dos desde cero. Cada uno trajo todas sus cosas y dividimos los espacios por igual. Nos acompañan tres gatas, las dos de Nico (Moria –por Moria Casán– y Silvita) y la mía (India), que es la más vieja y malhumorada.

Riera:
Riera: "Creo que ya somos una familia. Por lo que estamos construyendo, digo; si después vienen hijos o no, será algo más del proceso. Lo importante es lo que siento que hoy estoy construyendo con ella" - Créditos: @Soledad Aznarez

¿Cómo resulta eso de compartir ahora tanto la vida hogareña como la laboral, o sea estar las 24 horas juntos?

Fardin: –Compartirlo todo es un riesgo, una prueba de fuego, pero también es espectacular cada vez que superás esos momentos de desafío o tensión. Es positivo compartir la misma profesión, pero por momentos es difícil, sobre todo si trabajás en un mismo proyecto, como nos pasa a nosotros ahora. Porque la intensidad es la misma para los dos, no es que uno está grabando todo el día una telenovela y el otro hace teatro un par de horas por día. No, acá estamos en el mismo proyecto, igual de involucrados e igual de demandados. Y el día del estreno hasta compartiremos los mismos nervios, ¡así que ninguno podrá tranquilizar al otro! (risas). Pero el balance es positivo. Al final uno igual encuentra espacios para contactar y contener; en fin, para cuidar al otro.

Riera: –Siento que es importante habernos encontrado en los “treintis” (Nicolás hoy tiene 39 y Thelma 31). Siendo muy jóvenes, y con el estrés de ahora, hubiese sido difícil encontrarle la vuelta a tanta convivencia. Pero hoy, con todo lo que nos conocemos y con el querer que la relación funcione, uno puede dejar pasar cosas y valorar lo que realmente importa. Sabemos que ahora todo puede ser pura vorágine y caos, pero que después del estreno ya vendrá la calma y el placer.

–¿Existen planes de casarse y formar una familia?

Riera: – Creo que ya somos una familia. Por lo que estamos construyendo, digo; si después vienen hijos o no, será algo más del proceso. Lo importante es lo que siento que hoy estoy construyendo con ella.

Fardin: – Ser madre nunca había formado parte de mi deseo. Pero ahora, estando en pareja con Nico, me di cuenta que sí quiero ser mamá . Lo descubrí un día hablando con él. De todos modos, nuestras familias perciben que nosotros ya formamos una, que lo nuestro no se trata de un noviazgo. Tengamos hijos o no, ya formamos un núcleo familiar y esto nos tiene muy felices.

El final de la pesadilla

Al promediar la entrevista, y aunque no era parte del temario original, la pareja de actores acepta hacer un punto y aparte para hablar de un tema serio que les concierne, sobre todo a Thelma, que en 2009 (durante una gira de Patito feo en Nicaragua), a los 16 años, fue violada por su compañero de elenco Juan Darthés y desde 2018 clamó por justicia.

Thelma Fardin, en la conferencia de prensa que brindó luego de que se conociera el fallo condenatorio contra Juan Darthés
Thelma Fardin, en la conferencia de prensa que brindó luego de que se conociera el fallo condenatorio contra Juan Darthés - Créditos: @Pilar Camacho

–¿Cómo vivió cada uno la reciente condena a Juan Darthés en Brasil?

Fardin: –Yo me saqué un peso gigante de encima. Fueron muchos años de resistir y de seguir adelante en contextos en los que parecía imposible litigar, primero en Nicaragua y después en Brasil. Aprendí muchísimo de derecho internacional y la pelea se llevó una parte muy grande de mi energía. Realmente cuando terminó todo fue muy fuerte darme cuenta del caudal de energía que me había consumido. Siempre fui de decir “yo puedo, yo puedo”, porque soy de esas personas que siempre van para adelante, pero en cuanto se me liberó esa energía recuerdo que le dije a Nico: “Ahora voy a poder lograr mucho más, todo lo que quiera”. Porque, claro, si pude atravesar esa locura, que jamás me imaginé tener que atravesar, en un escenario completamente impensado, es de suponer que ahora todo me será más fácil. Hoy me siento en proceso de sanación, porque no hay dudas de que la justicia es reparadora.

–Digamos que el efecto secundario de todo lo que viviste fue el empoderamiento, ¿no?

Fardin: –Sí, totalmente. Pero el costo fue muy alto, para mí y toda la gente que estuvo cerca. Fue todo muy duro. Hoy siento que todo esto me fortaleció, pero no se lo deseo a nadie. Nunca me arrepentí de hacer lo que hice, porque necesitaba buscar justicia, pero reconozco que todo esto podría haber arrasado conmigo y toda mi vida. Por suerte no pasó y, por el contrario, me convirtió en una persona mucho más fuerte y segura y con un mayor autoconocimiento. Supongo que si pude lo que pude ante una situación tan dura, en situaciones más amables, ¡imaginate!

–Y vos, Nicolás, ¿cómo viviste el fallo?

Riera: –Yo pude ver el alivio en ella, y me alegra que toda la potencia que tiene la pueda poner ahora en lo que la apasiona, que es realmente la actuación. Cuando la descubrí como actriz el año pasado en Plagio, una obra en la que era muy complicado hacer algo bueno, ella volaba sobre el escenario. Ahora yo creo que va a poder volcar aún más todo su talento y energía en Motorhome. Cuando pasó lo del fallo estábamos con el proyecto dando vueltas, a partir de ahí fue “vamos, hagámoslo, ahora sí”. Hoy la observo en los ensayos y me alegro que no haya quedado anulada, que pueda entregarse a la actuación y ocuparse de todo como sólo ella puede hacerlo. Me produce mucha admiración.

"La observo en los ensayos y me alegro que no haya quedado anulada, que pueda entregarse a la actuación y ocuparse de todo como sólo ella puede hacerlo. Me produce mucha admiración", dice el actor sobre Fardin - Créditos: @Soledad Aznarez
"La observo en los ensayos y me alegro que no haya quedado anulada, que pueda entregarse a la actuación y ocuparse de todo como sólo ella puede hacerlo. Me produce mucha admiración", dice el actor sobre Fardin - Créditos: @Soledad Aznarez

–¿Cómo la acompañaste durante todo el proceso? ¿Le brindaste tu apoyo de alguna manera especial?

Riera: –Todo se fue dando desde el amor. Conectamos de una manera muy zarpada, por eso no hizo falta hablar demasiado del tema. La acompañé con todo el amor posible.

–¿En algún momento el proceso judicial fue un obstáculo entre ustedes?

Fardin: –El proceso judicial fue un peso que me tocaba cargar a mí, pero, sin dudas, también terminó atravesando a todos los que me rodeaban. Y entre ellos, por supuesto, también a Nico. Justo cuando lo conocí estaba empezando a escribir el libro que estoy por publicar (No callarás). Y cuando me sentaba a escribir claramente necesitaba un sostén, una contención. Y ahí él estuvo siempre. Tal como dijo, el acompañamiento se dio siempre desde el amor, no desde sentarnos a pensar y debatir. Para eso tenía a mi equipo legal. Después, en cuanto a los dolores, y como suele suceder en todas las parejas, cada uno venía con su bagaje; así que se trató de conjugar los míos con los de él y viceversa.

–Thelma, ¿pensás que la condena de seis años de prisión fue justa, es decir suficiente?

Fardin: –Para mí es más que suficiente. Para ser más clara: para mí con que la justicia lo declarara culpable era más que suficiente. Después, si el tiempo de la condena es corto o largo, no es un tema que me interese sentarme a pensar, ni menos aún qué le va a pasar a él a partir de ahora.

–¿Aún esperás un pedido de disculpas a nivel personal o una señal pública de arrepentimiento?

Fardin: –Para nada.

"Es muy lindo convivir con Nico, porque, más allá del amor que siente el uno por el otro, compartimos el haber atravesado una experiencia similar y los mismos guiños y recuerdos", reflexiona Fardin sobre su experiencia como protagonistas de exitosas tiras cuando aún eran niños - Créditos: @Soledad Aznarez
"Es muy lindo convivir con Nico, porque, más allá del amor que siente el uno por el otro, compartimos el haber atravesado una experiencia similar y los mismos guiños y recuerdos", reflexiona Fardin sobre su experiencia como protagonistas de exitosas tiras cuando aún eran niños - Créditos: @Soledad Aznarez

Ustedes participaron de dos programas que hicieron historia: Casi ángeles y Patito feo. ¿Qué recuerdos tienen de aquellas experiencias y cómo los marcó?

Riera: –¡Éramos como un River y Boca! Yo venía de hacer chico 1 y chico 2 en todos lados, así que para mí la experiencia fue absolutamente zarpada. Allí tuve mi primer personaje con nombre y fueron cuatro años de locura diaria. Grabábamos a más no poder y hacíamos giras. Hoy lo recuerdo como una gran escuela artística y de producción. Ahí aprendí, por ejemplo, todo lo que hoy estoy poniendo en práctica en Motorhome. Trabajar con Cris Morena fue como hacer un master, algo que nunca más me volvió a pasar. Con ella obtuve en poco tiempo todo el entrenamiento que necesitaba para encarar la profesión.

Fardin: –Pese a mi corta edad, antes de Patito feo yo ya había trabajado mucho; incluso había conocido la fama y los treinta puntos de rating en Sos mi vida, donde interpreté a la hija de Facundo Arana. Sin embargo, lo de Patito fue una locura, salíamos de gira y parecíamos los Rolling Stones. Éramos todos unos pendejos haciendo lo que amábamos para el público infanto juvenil, que es muy pero muy efervescente. Imaginate que llegamos a llenar el estadio de River con ochenta mil personas gritando a la vez. Después, eso no se vuelve a dar nunca más en la profesión. Por eso hay algo que nos mancomuna a los pocos que tuvimos la suerte de vivir algo así. Y por eso ahora es muy lindo convivir con Nico, porque, más allá del amor que siente el uno por el otro, compartimos el haber atravesado una experiencia similar y los mismos guiños y recuerdos.

Motorhome. En el Teatro Metropolitan, Av. Corrientes 1343. Los miércoles a las 20:15. Entradas por Plateanet